|CAPITULO 24|Apuestas|

1K 58 4
                                    

—Nada–Mentí—¿Viste a las chicas?–Desvie el tema.

—No me cambies el tema–Frunció el ceño—¿Qué te paso?

—No quiero hablar de eso ahora.

—Tendrás que querer–Dijo rodeandome con su brazo por mi hombro y dandome vuelta para caminar junto a el.

Le conte sobre la conversación qué había escuchado de Agustín  y Belen . Tincho  me escuchaba con atención y luego desvió su mirada como si ocultara algo.

—¿Sabes algo?–Pregunté mirandolo.

—No–Respondió—Solo creo que debes hablar con Agustín  antes de especular cosas.

—No ¿Qué voy a decirle? Qué se pudra–Respondí enojada.

—No deberías ser tan impulsiva.

—Es un idiota–Dije convencida.

Él me miro en silencio.

—Está bien, todo lo que te dije ahora no se lo digas a nadie. Ni siquiera a los chicos–Dije entrecerrando mis ojos.

—Bueno.

Estuvimos conversando sobre diferentes cosas un largo rato y luego nos fuimos a la cabaña.

Entramos en silencio, Pablo , Milagros , Marcos y Camila  estaban jugando playstation. Agustin  estaba sentado en la cocina tomando leche con cereal y Belen  no sé.

Tincho  se sentó a un lado de Pablo y yo mire a Agustín . Él movio su cabeza diciendome qué me sentara junto a el, pero lo ignore y camine a mi habitación..Idiota.

Paso mas o menos una hora y quise salir, no había nadie en la sala de estar y me fuí a sentar a una banca de afuera. Divise el cesped y me tendí en él, me puse audifonos y me metí en mi mundo.

Sentí unos pasos que se acercaban, mire hacia un lado y Agustín  se había sentado a mi lado.

Me saque los audifonos irritada y mire a Agustín .

—¿Qué quieres?–Pregunté fria.

Él me miro desinteresado.

—Sentarme–Respondió tan frio como yo.

—Hay mucho espacio para qué te sientes en otro lugar.

—Me quiero sentar aquí–Respondió desviando su mirada hacia adelante.

—Pero yo no quiero qué te sientes aquí–Me senté irritada mirandolo a los ojos, pero él miraba hacia el frente.

—No escuche qué te haya preguntado si me podía sentar–Contestó indiferente y levantando su mirada para chocar con la mia.

Lo observe irritada y me puse de pie. Sentí la mirada de Agustín  encima de mi, pero lo ignore y camine a mi habitación y me encerre en ella.

Paso un rato y golpearon la puerta y está se abrio, levante mi vista y choque con los ojos negros  de Agustín .

—¿Y ahora qué?–Pregunté sentandome en la cama.

—¿Acompañame a dar una vuelta?–Preguntó entrando y cerrando la puerta.

—No, gracias.

—¿Qué te paso?

—Nada.

—No me mientas–Contestó acercandose a mi y sentandose a mi lado.

—Dejame en paz–Dije dando vuelta mi cabeza y mirando hacia la muralla.

—¿Ahora qué hice?–Preguntó irritado.

—Preguntaselo a tú amiga Belen –Respondí sin mirarlo.

El tosió para luego reír.

—¿De qué te ríes?–Pregunte mirandolo mientras me sentaba en frente de él.

—¿Escuchaste todo?

—Si–Respondí mirandolo enojada.

—Todo es mentira ________.

—Eres un idiota–Entrecerre mis ojos, siempre lo trataba asi, pero está vez estaba muy enojada.

—________, todo lo qué le dije a Belen  es mentira. Fue una linda noche ¿No crees?

—Dejame en paz–Me puse de pie y camine fuera de la cabaña.

—¡Hey espera!–Se puso de pie y me siguió hasta qué estuvimos afuera, me tomo del brazo dandome vuelta.

—Escuchame ¿Está bien?–Dijo fijando su mirada en la mia.

—Ya escuche todo lo que debía escuchar Agustín .

—Sólo intentaba protegerte.

—¿Protegerme?–Dije irónica—Ya no me protejas más, de verdad. Si eso es protegerme me imagino como sera para ti undirme.

—No seas tonta–Fijo su mirada en la mia—Sabes qué Belen  dijo que si no era ella, no seria nadie más.

—No le tengo miedo a Belen , además..

—No quiero que te expulsen del campamento–Me interrumpió.

Estaba tan serio, su mirada era tan dura.

—Eso no pasará porque.. ¿Qué te hace pensar que yo quiero estar contigo?

—Nada–Respondió indiferente—Pero si le decía a Belen  que nos habíamos besado y qué en realidad si me gustó, ella iba a hacer cualquier estúpidez para qué te expulsaran.

—Hubiese preferido irme–Desvie mi mirada.

—¿Por qué?

—Por qué no quiero gente como tú en mi vida.

—¿Qué tan malo crees qué soy?

—Mucho.

—No es así–Frunció el ceño—De verdad lo único qué hacía era tratar de protegerte.

—Está bien, ya no lo hagas más.

—Lo seguire haciendo _________.

—¿Por qué? ¡¿Por qué diablos te importa tanto?!–Levante mi voz.

—No me gustaría que te expulsaran por mi culpa.

—Ya basta ¿Si? Si no quieres eso entonces dejemonos de hablar y listo.

—Belen  no decide con quién me junto.

—Ah pero si decide como hablar de las personas ¿No?

—¿Te pusiste celosa?–Entrecerro sus ojos sin despegar su mirada de la mia.

—No.

—¿Te dolió?

—No, no seas idiota–Me enoje—Jamás me daria celos verte con ella ni menos me dolería.

—Puedes apostar que si–Levanto sus cejas.

Maldito Agustín , sabía qué le diría que si..Malditas apuestas.

—Apostemos–Dije entrecerrando mis ojos.

—¿Estas segura?–Preguntó sobervio.

—Por favor ¿De verdad crees qué me enamoraría de ti?–Pregunté sarcástica.

—Si–Enarcó una ceja.

—El que se enamora pierde–Estire mi mano derecha.

—Voy a romper tu corazón amiga–Dijo tomando mi mano con su mano izquierda.

El sonrió haciendo que esos malditos oyuelos aparecieran, se acercó a mi y beso mi frente.

—Gran apuesta, nos vemos–Se retiró indiferente hacia la cabaña.

Está bien, el juego comienza..Nuevamente.

----------------------------------------------------------------  

Eres Mío Imbécil (Agustín Casanova y Tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora