II. El plan.

5.2K 296 37
                                    

Hace frío, estoy en la parada del bus esperando a que el estúpido de Thomás llegue, pero va a venir antes el bus y no pienso perderlo, como he sido tan tonta de pensar que lo de ayer era de verdad.

Llega el bus y subo corriendo, me siento en el primer sitio como de costumbre y paso el trayecto pensando como afrontar esto, menos mal que le dige que me lo pensaba y no sabe nada de mi amor por su primo, hubiera sido un desastre.

Entro al Instituto y voy directa a mi taquilla, dejó mis cosas y ando por los pasillos hasta llegar a mi clase, en la puerta está el grupo de Thomas con él incluido, pienso en recriminarle, pero no, paso por su lado sin mirarle, ya que su primo tiene captada toda mi atención, hoy viene totalmente arrebatador, con unos vaqueros que marcan su fabuloso culo.

_ Cuatro ojos, ¿tienes los deberes?

Yo le miro, aunque sea con un insulto se ha molestado en mirarme, sus ojos penetran los míos y yo me siento totalmente desarmada, el sigue mirándome con una sonrisa en la cara, la sonrisa mas perfecta que jamas haya visto.

_ Si. Le contestó en un tono bajo que ha echo que Joel se acerque un poco hacia mi poniéndome más nerviosa.

_  Lo suponía, me los dejas que ayer tuve la tarde muy ocupada.

_ Si, claro.  Se que no debería  hacer eso, pero como voy a negarme, además el que copie mis deberes no le ayuda en nada, todo lo contrario, en el examen no puedo ayudarle.

Voy directa a mi mesa y siento como él me sigue, a una distancia más que razonable.

Me siento y saco el cuaderno, se lo paso y su mano me roza, el roce hace que me mis mejillas ardan, seguro que estoy sonrojada y eso no quiero que lo note.

El aparta rápido tirando del cuaderno y se lo pasan entre todos incluido Thomas copiando uno a unos mis deberes, soy tonta lo se, pero que puedo hacer, estoy loca por Joel, me levantaria y pondría el grito en el cielo, les pegaría a cada uno una buena bofetada, pero a quien quiero engañar no lo voy hacer.


Termina el día de clases y no he sabido nada del tema de Thomas, el muy imbécil, voy a mi taquilla y veo que el director llama mi atención.

_ Ariel, puedes pasar un segundo. Me dice desde su silla.

_  Por supuesto. Entró cerrando la puerta a mi espalda. _ Dígame, le escucho.

_ Nada, decirte que la semana que viene te entregare las papeletas para que recaudes dinero para el viaje de fin de curso, ¿tu las repartes por las clases de último año verdad?

_  Si no me queda más remedio.

_  Ya verás que organizar el viaje no es tan malo, piensa que tu tienes el poder de proponer.

_ Su sentido del humor mejora con los años señor.

_  Venga, no quiero entretenerte más. Me sonríe y me giro para irme. _ Espera Ariel.

_ Dime.

_ He estado pensando que podrías ayudar a tu compañero Thomas, realmente necesita un cambio de aires.

pσr nєcєѕidαd .  * EDITANDO*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora