IV. París.

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Llego al instituto y el primero que se para a recordarme mi cambio de look es el director.

_ Ariel, vaya cambio, me gusta.

Por desgracia su cara dice lo contrario, pero es normal a mi tampoco me ha gustado mucho el cambio, pero eso no quiere decir nada, millones de chicas se cambian el pelo, a colores peor que un simple castaño oscuro.

Entro a clase sin hacer caso a las miradas que me acechan desde las mesas, hoy el grupo de Joel no está en la puerta y eso me molesta, pero veo que están Al fondo de la clase todos hablando muy entretenidos tanto que no me ha mirado ninguno, yo me acerco a ellos a dejar mi chaqueta en la percha y me pego todo lo que puedo a Joel para que me mire, mientras cuelgo la chaqueta no apartó la mirada de él, su cara es imposible de leer, no se si le habrá gustado o no, lo único que se esque me mira, y eso es buena señal.

Me giró apartando por obligación mi vista de él y ando despacio moviendo las caderas a cada paso hacia mi asíento, que está en primera fila.

A mi lado nunca se sienta nadie Y me parece genial así tengo mucho más espacio para mi, pero hoy algo preciso pasa, siento como alguien se sienta en la silla de mi derecha y giró la cabeza, ¿Quien es el que se sienta con la friki cuatro ojos de clase?

_ Hola Cuatro....Ariel, vaya cambio de look no? Me dice Joel sonriendo y el mundo desaparece, me está hablando, me ha llamado por mi nombre, en su boca suena mucho mejor, estoy sin habla, le miro, está tan cerca de mi que puedo casi tocar su pierna con la mía, el corazón me golpea el pecho dando blincos de emoción.

_ Hola, Si.

_Me gusta. Le gusta? A dicho que le gusta, pero por que no he empezado este plan hace años, es maravilloso, claro hace años no estaba aquí.

_Gracias Joel. Digo completamente sonrojada.

Entra el profesor llamado mi atención, necesito atender, pero como lo voy a lograr hoy con este hombre aquí tan pegado a mi.

El profesor empieza y yo sólo puedo mirar a mi lado, me tiene completamente loca, es que desde aquí veo su perfil, es increíblemente perfecto, su nariz y el contorno de sus labios.

_ Ariel?. Escucho, ¿He?, han dicho mi nombre?, salgo de mi ensimismamiento y miro al profesor que me mira, al igual que toda la clase, no se que me ha preguntado, como me ha podido pasar esto, dios, que hago?

_ Profesor, perdone me repite que hoy tengo un dolor horrible de cabeza, perdone.

_ La ecuación, hazla.

_ Si por supuesto.

Me pongo de pie y me encaminó a la pizarra y hago la ecuación sin ningún problema, suerte que aún sin prestar atención las matemáticas es mi asignatura favorita y me defiendo bien.

_ Perfecto, Sientese.

Las palabras del profesor me reconfortan y me voy rápido a mi sitio, donde me espera mi amado Joel.

Termina el día, ha sido el mejor día por su compañía que ha estado todas las horas sentado a mi lado, pero lo peor es que es el primer día que no presto atención en clase y eso no me gusta, y por muy bueno que esté, es mejor no tenerle de compañero si quiero aprobar.

pσr nєcєѕidαd .  * EDITANDO*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora