Capítulo 5

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Capítulo 5

David

Present Time

Hoy mi madre me había sacado mas temprano de cama, mi hermana había venido a desayunar como las mayoría de los días y estábamos sentados en el comedor, Mari Mar no paraba de echarme miradas llenas de intriga y picardía, ¿Laura le habría contado algo de lo de anoche? Iba tener que dejarme interrogar, para saber que tal habían estados las cosas una vez que salieron de casa y descubrir que sabía, no podía negar que estaba con un animo inmejorable desde lo ocurrido ayer y deseaba de manera desesperada que Laura volviese a venir.

-¿Como amaneció el niño hoy?- me preguntó mientras yo le sonreía tratando de esconder los colores que se subían al rostro.

-De un contento que se le sale por la cara- dijo mi madre.

-A que tiene que ver con Laurita, eso seguro- le respondió mi hermana.

-Lo mismo creo yo- dijo mi madre mirándome

-Si, es por ella- Dije yo a mi ritmo lento y un poco tímido

-Ahí tienes los efectos de Huracán Laura sobre el niño- mi hermana no paraba de hacer bromas y de reír ante mi nerviosismo, pero que esperaban que dijera, a media mañana tenia mis terapias y lo único que quería era que mi madre o Mari Mar llamasen a Laura a ver si le apetecía venir a casa mientras realizaban mis ejercicios. Necesitaba una motivación extra y un premio por todo mi esfuerzo.

No había pegado el ojo en toda la noche pensando en ella y tratando de controlar mis impulsos, que desde que se fue, no hacían mas que venir uno tras otro y me tenían todo húmedo bajo las sabanas y frito de calor.

Ahora mismo recordando su contacto con mi piel, me había puesto de lo mas animado y no tenia intención alguna de moverme de la mesa, hasta que todos se levantaran, parecía un crio que descubre el sexo por primera vez, pero como me hacia sentir vivo experiementar como reaccionaba mi cuerpo, había pensado que esto ya estaba acabado para mi.

-David he llamado a Laura a ver si se viene a tus terapias y te comportas de manera adecuada con el doctor, que un tanto cabreado se fue anteayer con tus borderias y con ella has estado como una seda- mi hermana sacándome de mis pensamientos.

Le había llamado, maravilloso. Le había llamado, inevitablemente sonreí ante lo dicho y le agradecí.

-Daví – dijo mi madre haciendo que le mirara- vamos a tener que dejarte guapo, le diré a tu padre que te afeite un poco-

-Vale- le dije agradeciendo todo lo que estaban haciendo por mi.

-Y veré si llamo a Jordi pa que te corte esa maraña de pelo que te traes-

- No!- casi le grite, no iba dejar que me cortasen ni el mas minimo rizo, amaba que Laura los acariciara y me no iba privar de ese gesto.

-Déjale el pelo tal cual al chiquillo, que así le gusta mas a su Laurita, ¿A que si David?

Yo asentí de manera suave con una cara de imbécil, y ahí estaban otra vez mis sensaciones de adolescente pulsando contra mi pantalón, estaba pero imparable, que ni cuando estaba de pie, andaba tan cachondo, que era lo que tenia Laura que me ponía con tan solo pensarla.

-Mari Mar- dije lento para que me entendiera.

-¿Aja?, vaya, ahora hasta me nombras y hace unos días, ni un si, ni un no, David... Vamos que te habrá hecho la Laura pa dejarte tan hablador a ti niño-

Hoy sale el solDonde viven las historias. Descúbrelo ahora