Capítulo 16

508 36 7
                                    

Quizás no entendais lo que viene a continuación, pero como algunas ya sabrán, lo he soñado y se me ha ocurrido escribirlo en un capitulo. Espero de corazón que os guste, y por favor sugerid escenas que os gustaría que pasaran, para sumarlas. 

Besos... 

________________________________________________________________


Capitulo 16

FlashForward

David

Retomar paso a paso mi carrera estaba siendo toda una pasada, el quipo había decidido que era hora de empezar a asistir a eventos sociales, como invitado u otras cosas que no demandaran cantar en publico, ser embajador de causas benéficas o como rostro publicitario.

La verdad en ese punto se estaban dando bien las cosas.

Un año y medio había pasado desde el accidente, y medio año desde que empecé a dejarme ver en publico, había eludido compromisos previos al accidente que luego de ponerme bien tuve que retomar muy a mi pesar y costándome un precio que nunca estuve dispuesto a pagar.

Pero acá estaba enfundado en un traje color vino, con los rizos nuevamente cortados y acojonado por si me hacían subir al escenario.

Me importaba una mierda todo, por mi hubiese estado en casa, con el pantalón de pijama y mis rizos arrastrándose en el suelo. El único motivo que me arrastraba hasta este lugar, era mi incontrolable necesidad de verla.

Parecía un búho moviendo mi cabeza de un lado para otro a ver si reconocía su rostro entre toda la gente que se apostaba en centro del salón.

¿Vendría con alguien?

Todos se fueron acomodando en sus mesas, en cuanto el anfitrión comenzó a relatar la razón de por que se hacia el evento, la vi, iba preciosa, con un vestido color rosa pálido, su cabello mas largo y oscuro, recogido en un moño que resaltaba las expresiones frescas de su cara.

Cuanta belleza junta, joder!

Cuando las cosas empezaron a moverse un poco en mi vida, luego de que mi motricidad volviera casi por completo, y mi agenda empezara a llenarse de sesiones fotográficas, entrevistas y todas esas gilipolleses, Laura decidió por los dos y esta vez, fui yo quien se quedo solo y con una casa llena de recuerdos.

Me dijo que no estaba preparada para todo lo que se venia y que antes de que la historia se repitiese otra vez, prefería ser ella quien cortase por lo sano y diera un paso al costado, que de cualquier manera yo ya me podía valer por mi mismo, lo que ella no sabía, era que sin ella, yo era un puto fantasma por los rincones de la casa, cada sitio, cada cosa, estaba impregnado de su aroma y me estaba volviendo loco sin ella.

Laura ya estaba sentada en su mesa, iba acompañada, pero para mi suerte, no era de algún amigo o novio, si es que cabía es posibilidad, me ponía malo solo de imaginármela con otro.

Ella y clara, una de sus asistentes, estaban a cuatro mesas por delante de la mía, yo me había quedado pasmado mirándola como hablaba con los demás en su mesa, no podía aunque intentaba, quitar mi mirada de ella.

-Chacho deja de mirarla que se va a gastar- mi amigo sacándome de mis pensamientos.

-el que- dije tratando de disimular.

-"el que", dice, que ya dejes de mirar a Laura y poner cara de imbécil-

- No tengo otra hermano, la verdad es que la extraño demasiado- Dirigí mi mirada a mi amigo que tomaba una servilleta para limpiarse del bocado que acababa de meter en su boca, mientras yo respondía y me miraba, sabiendo yo que a continuación, diría cosas que me dolerían en el alma, pero que tenían todo de ciertas.

Hoy sale el solDonde viven las historias. Descúbrelo ahora