Capítulo 1: Algo que dije (Something I Said)

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Bueno, después de escribir el último de los momentos (Todos los momentos que no fueron) me quedé pensando, que como algunos de ustedes, yo tampoco me sentía conforme con lo que sucedió en esta parte de la historia. Esta es mi versión de la historia, como creo que debería ser. Sin tanta negación por parte de Flor a su transición y con una segunda tercera en discordia. Una chica que le ayudará a entenderse un poco mejor y que pusiera a nerviosa a Jaz.

Este fic constará de varios capítulos. Posiblemente 13 (algún día les contaré porque) y aunque tiene su parte dramática-romántica, tendrá también comedia, ya que Estrelladas en el baño tuvo/tiene muy buenos comentarios sobre su contenido cómico. Veremos cómo me sale este mix.

La novela Las Estrellas, ni sus personajes, ni sus locaciones, ni nada de esa maravilla de historia me pertenece. Si me pertenecieran: 1) No sería un éxito; 2) Las hermanas habrían estado presentes en la casamiento y Miranda habría cantado Anda ve, cuéntale (versión vals) XD

Algo que dije (Something I Said)

Flor estaba sentada en medio de una plaza. Que plaza daba igual, había llegado hasta ella por fuerza de la necesidad de alejarse de su hotel, de su cocina, de su ruina. Maldito el momento en que había decidido decirle todo a Jaz. ¿Por qué había tenido que decirle todo a Jaz? ¿Por qué se había quedado a escuchar esa respuesta tan dura? Tan traumática. A ella la habían rechazado otras veces, pero el dolor de este rechazo no tenía comparación con nada que había vivido.

Su tourette estaba fuera de control. Cuando Jazmín le dijo que necesitaba "ver lo que le pasaba" no se tomó el tiempo de pensar en nada. Salió de la cocina y del hotel como alma que lleva el diablo. Desencajada, dolida. Evitó a Miranda y a Virginia, a todos los que se cruzaron en su camino, ya sea para socorrerla como para molestarla. Camino fuera sin mirar atrás. Sin devolver todas las miradas de más que le obsequió el recorrido. Todos los ojos desubicados y los susurros por ver a esa chica que, con lágrimas rodando por sus mejillas, puteaba y se agitaba sin cesar.

Se sentó porque ese banco de plaza se cruzó en su camino. Por eso, nada más. Se sentó para comerse más todavía la cabeza con el desprecio de Jazmin.

-¡Pasacalle! ¡PASACALLE...LLE...! ¡BOLUDA! – Exclamó mientras movía involuntariamente su hombro y los dedos de la mano derecha - ¡NYA! ¡AYYYYYY, BASTA FLOR! – se gritó con fuerza y rompió en llanto, mientras se daba golpes con la mano abierta en el pecho.

Habría continuado hasta lastimarse, pero un pañuelo con olor rico apareció en escena de la nada. El perfume que emanaba de la tela fue lo primero que sintió y, a pesar de estar prevenida, Flor dio un salto hacia atrás de la sorpresa al ver el trozo de tela frente a ella. Pero la pudo la curiosidad y siguió el recorrido desde el pañuelo hasta la chica que lo sostenía. Le esperaba otra sorpresa. Una sonrisa tranquila y bonita. Neutral. El cabello castaño oscuro y los dientes perfectos. Bonita, en verdad muy guapa. La joven movió la mano indicándole con los ojos que tomará el pañuelo. A Flor ese gesto le pareció una antigüedad, algo propio de las películas de época.

-¡Raba del siglo 19! – soltó mientras se daba otro golpe en el pecho - ¡Hm! ¡Perdón!

-No pasa nada – la dueña del pañuelo tenía voz también y era una de esas voces muy serenas – Más bien, soy una raba del siglo 20 – con media sonrisa agregó – dale, agárralo – insistió.

-¡Pe...sada! – pero, a pesar de que el tourette la había sentenciado, Flor le dio una oportunidad y tomó el pañuelo secándose los ojos.

La chica se sentó a su lado. A Flor le impresionaba esa seguridad que parecía emanar de ella y la serenidad con la que parecía manejar sus insultos y espasmos – No sé qué puede ser tan grave, pero te estás perdiendo un día precioso – dijo mirando el cielo y respirando profundo – se respira aire fresco y hay un sol hermoso.

Deseando a una ESTRELLA - FLOZMINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora