Del amor al odio, ¿Y del odio al amor? TaeHwi

011

Al pasar esos pensamientos por su cabeza, Hwiyoung decidió de una vez por todas salir de allí y dirigirse a aquella juega que parecía ser "más interesante" para el. No se preocupaba por Rowoon ya que hacia un rato que no lo veía, suponía que sus sospechas se habían hecho realidad, Seok Woo se había ido a un hotel con aquella puta y lo había dejado sólo, ¿al menos debió haberle avisado no?

Camino hacia el lugar como cualquier otra persona, a lo lejos ya podía ver el humo y las luces, realmente era un idiota, ¿a quien se le ocurría salir a las cuatro de la mañana de la mañana a una calle totalmente vacía sólo por su capricho de divertirse?, mientras caminaba llegó a pensar que alguien lo perseguía, pero unos segundos después tiro su preocupación a la basura.

Por suerte en el transcurso no le sucedió nada, llego en una sola parte. Y como suponía la diversión apenas había comenzado, iba a ser una gran noche para el.

Llegó e inmediatamente se unió a todo el lío que había, pues, unos chicos lo habían invitado a fumar y beber, aunque la única cosa por la que ellos se habían juntado con el era por su trasero, no era como si Hwiyoung no sólo supiera, solamente que aprovechaba esto para que no estuviera sólo y nadie se metiera con el, eran algo así como unos guardaespaldas.

Comenzó con algo tranquilo para entrar en ritmo, y se unió a fumar en un Narguile, un dispositivo para fumar tabaco de distintos sabores, filtrado por agua.
Era nuevo para el, tanto que después de solo dos minutos de haber estado fumando su cabeza ya estaba en otro mundo, podía jurar que ni siquiera se acordaba su nombre, del día, o del lugar y el tipo de personas con las que estaba. Lo único que le importaba en ese momento era el divertirse con sus "nuevos amigos" y olvidarse de todo lo demás, todo lo que le hacia daño.

Camino tambaleándose hasta su siguiente atracción, el gran barril de cerveza que alrededor tenía a gente inconsciente de tanto tomar, era algo así como un reto, el que bebía más ganaba, obviamente algo estúpido, es lo que Hwiyoung hubiese pensado si hubiese estado cuerdo. No dudó ni un poco en aceptar aquel reto, presumía ante todos que era el mejor en estas cosas, contaba su vida en estados unidos y todo el dinero que poseía allí, mujeres interesadas obviamente se le estuvieron pegando. Estaba a punto de tomar el tubo por donde salía todo el alcohol pero sintió junto a a el a alguien hablándole.

Basta, ya para.

Escuchó, creyó que era su conciencia ya que cuando volteo no llegó a ver a nadie, supuso que hasta el mismo sabía que se iba a hacer mierda si tomaba todas esa cantidad de alcohol, dejó el tubo aún lado y rechazó el reto, dejando a muchos exasperados por su decisión..

Luego de varios tragos y fumar hierba gratis se decidió por ponerse bailar, por cada paso que daba desabotonaba su camisa hasta finalmente haberla dejado en el piso quedando su torso así completamente desnudo, algo que le importaba en lo más mínimo ya que estaba bajo los efectos de la intoxicación.

Se puso a bailar con unas chicas que se lanzaban encima, no iba a mentir, se comió a besos a varias, pero nada más, no era como si tomara enserio a alguna.

De un momento a otro apartaron a todos de la pista, eran unos chicos que iban a empezar otra carrera de motocicletas por esa ruta, todos fastidiados se corrieron ya que sabían que tan temibles eran el grupo que hacia y corrían famosas carreras de motos, donde aprovechaban el poco tránsito de la madrugada y apostaban dinero en efectivo, tragos, sus motocicletas y en algunos casos hasta sus parejas.
Se decía que si te metías con ellos desaparecías completamente de la humanidad. Eran algo así como una "mafia".

Claro, todos obedecieron ante la petición del chico menos una sola persona que no sabía nada de eso, Hwiyoung, era el único que se había quedado parado allí, con una de las motos ya posicionada para empezar la carrera.

-¡Niño sal de aquí!- Grito el chico que estaba echando a todos de la calle.

-¿Y que pasará si no quiero?- Desafío Hwiyoung, realmente se había vuelto loco- ¿acaso me golpearás?- Se acercó a el.

-¡Oye niño no querrás meterte conmigo!- Exclamó aquel hombre mientras alzaba su puño contra la cara de Hwiyoung, el rubio estaba preparado para lo que viniera pero el golpe nunca llegó.

-¡Que mierda estas haciendo Dong Sung!- Retó un chico alto de cabello rojo fuego con una mirada aterradora, parecía tener un cierto grado de poder al ver al antes valiente "Dong Sung" hecho un pollito.

-Y-yo, lo siento... No sabía que venía contigo Zuho, lo siento- Hizo una reverencia y se fue corriendo.

-¡IDIOTA!- Gritó en son de venganza Hwiyoung, mientras trataba de perseguirlo y perdía el equilibrio.

El nombrado zuho se apresuró a tomarlo rápidamente de la descubierta aún cintura para que no cayera contra el piso y se pudiera lesionar o golpear, el chico que estaba en frente suyo era demasiado hermoso como para que se dañara, pensaba. Por reflejo Hwiyoung se aferró a sus brazos, clavando sus uñas en el.

-¿Estas bien?- Preguntó el más alto.

-Si, pero...-Pausó Hwiyoung.

-¿Pero?...-Preguntó nuevamente Zuho mientras sus ojos recorrían todo el cuerpo de Hwiyoung.

- No te di permiso para, TO-CAR-ME- Susurró acercándose a la boca de su opuesto, este sólo estaba hipnotizado en el rosa palido de los labios del rubio - Así que...- Enredó sus brazos en el cuello de zuho aun apegándolo mas a el- Sueltaaaaaame- Empujó al pelirrojo y empezó a reír a carcajadas por lo sorprendido que se veía el rostro de Zuho, había sido completamente engañado.

-Y-yo, ya me tengo que ir, nos vemos luego- Tartamudeó el mayor mientras le tiraba su chaqueta al rubio para que se cubriera. Parecía ser que era el otro motociclista.

-¡Saranghae Oppa!- Gritó Hwiyoung tomando la chaqueta, agitando sus manos y riendo. Quien sabría decir si todo se debía a la hierva que había fumado o al alcohol que había tomado.

No podía estar más loco, pensó zuho y rió.