Sostienes el acertijo con ambas manos, lo lees varias veces bajo el mismo concepto: ¿Dónde está la trampa?
Estás seguro/a de que debe haber algún tipo de juego de palabras. O que debe haber algún error. Dos y dos son cuatro, cuatro y dos son seis, seis y dos son ocho y ocho dieciséis. De igual manera no sabes la respuesta. Miras un poco más la hoja, casi buscando una pista, pero nada.
Solo porque es la opción del medio y tu cerebro está seco como el desierto de Atacama, eliges la opción C: 3 aves y 2 árboles.
La enseñas a la cámara con total resignación, pero con esperanza de que sea la correcta. La esperanza se te escapa junto con la luz; y lo que es peor, tu desesperanza crece para cuando regresa.
Miras la pantalla y sí. Ahí está Juan. Atado de pies y manos, con pesas de buzo amarradas a su abdomen. Son tres o cuatro cinturones.
Junto a él, un tanque de agua. Es predecible, pero es la peor de las muertes. Te imaginas lo espantoso que sería morir por la falta de oxígeno. Sientes que se te oprime el pecho.
Al lado del tanque ves a un hombre con una máscara cubriendo su rostro. Es media amorfa, pero crees que es una morsa, una foca, un león marino; ahora entiendes todo.
Observas como el tipo carga a Juan y lo lleva hasta el tanque. Parece que tu compañero de cuarto pesa solo unos gramos para como lo levanta "La Morsa".
Llegando al borde, te señala y lo arroja al agua sin dudar siquiera un segundo.
El tanque comienza a burbujear. Ves a Juan intentando conservar el aire, luchando por llegar a la superficie.
Pasados unos cuantos segundos lo observas cansado, hasta que libera su último exhalo y su cuerpo termina de caer al fondo del tanque.
El enmascarado se retira. No fue una muerte salvaje, fue una muerte sufrida. Fue la muerte de un compañero.
Te torturas e intentas contener la respiración para saber que se siente. Entiendes que murió de una manera deplorable. Entiendes lo que pudo haber sido el Titanic.
Te maldices por ser tan infantil.
El altavoz te interrumpe una vez más. No tienes que abrir nada, solo descansar, mañana será otro día.
A) Salvaste a Nélida y Marcos. Juan está muerto. Ve al capítulo 44.
B) Salvaste a Nélida. Marcos y Juan están muertos. Ve al capítulo 39.
C) Salvaste a Marcos. Nélida y Juan están muertos. Ve al capítulo 42.
D) Los tres están muertos. Ve al capítulo 54.
ESTÁS LEYENDO
¿Qué eliges? | Historia interactiva
Short StoryTe encuentras atrapado en un cuarto sin saber como llegaste ahí, con personas que apenas conoces y sin ninguna referencia de cuál es la razón por la que estás en ese lugar. Toda decisión que tomes te llevará a un camino distinto y a nuevos desafíos...
