Capítulo 48

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El alemán, el británico, el danés, el noruego y el sueco. Intentas encontrar alguna relación con alguno como para que este sea el dueño del pez. Intentas encontrar la trampa en el acertijo, pero es evidente que las cosas no suceden así.

La vida de una joven y de su hermanito corren completo peligro, todo depende de tí.

Recreas toda la escena del acertijo, personalmente te importa un comino que fuma cada uno de esos tipos, el color de sus casas, o qué beben. Ni siquiera te importan ellos. Te cuesta concentrarte, pero quitándole todo lo que está de más, llegas a la conclusión de que el dueño del pez es el sueco, opción C.

Le enseñas a la cámara la respuesta, la cual rutinaria como siempre, hace zoom y captura lo escrito.

Dudas un instante si era esa la nacionalidad que querías poner. De todas formas no hay vuelta atrás. 

La luz se vuelve penumbras. Ahora lo confirmas, de verdad no hay reversa en esto.

La iluminación se reestablece y se hace presente el tan temido momento.

Con Julieta al otro lado del televisor, aparentemente dormida en una camilla. Recostada junto a un hombre cubierto de pies a cabeza de negro, cuyo rostro está cubierto por la máscara de una cebra.

El hombre se pone un traje especial, un mameluco que recubre todo su cuerpo y junto con este unos guantes amarillos, a tono con el uniforme. Levanta un bidón transparente, parece ser un químico. Y lo es.

La desnuda de a poco hasta dejarla en ropa interior. La joven está plenamente dormida, puede que no vaya a sufrir su muerte. 

Te lamentas por pensar esto, es decir, sufra o no, está muriendo y es tu culpa.

Te señala y comienza su "show". 

Empieza por mojarle los pies y de a poco va subiendo hasta terminar en su cabeza.

Del cuerpo comienza a salir una especie de vapor. Cuesta que se disipe, pero para cuando lo hace puedes ver cómo la piel comienza a corroerse. Su rostro se encuentra disuelto plenamente.

Al parecer es ácido, capaz de desarmar todo excepto plástico. Con el transcurso del tiempo ni los huesos de la muchacha quedarán.

El vídeo parece no terminar hasta que de Julieta no quede nada, sin embargo, el parlante vuelve a sonar.

Cuando la pantalla se apague puedes abrir el último acertijo.

Ve al capítulo 61.

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