Eres Mi Mundo

Capitulo 7

No sabia que hacer o mucho peor que decir, la situación era demasiado compremetedora en este momento, pero lo unicó que pensaba ¿Que hace aqui?, ¿Es una broma verdad?, ¡Porque a mi!.

Solo se disponia a ver al chico de ojos dorados y con un ego demasiado alto se encontraba frente a ella nuevamente con el fin de terminar el día con un final desastrosó y horrible.

-¡¿Que diablos haces aqui Inuyasha?!

-Vaya, hasta que al fin respondes, claro que chica no se iba ha quedar callada cuando tiene a un verdadero hombre frente a ella.

Kagome no pudo evitar reirse sarcasticamente a lo que le respondió ese pedazó de Idiota que la tiene acorralada entre la espada y la pared.

-Por favor no me hagas reir, ¿Alguna vez te haz escuchado?, ¡Eres un completo idiota!

-Ahora te haces dificil, pero en el salón de clases te comportastes de otra manera.

Dió un paso decidido hacia ella, sonrió al ver la reacción que tuvo la señorita "orgullosa" frente a él.

-Y dime.

Coloco sus brazos en cada lado de su cabeza en la pared del interior del baño, acercó su boca hacia el oido de ella.

-¿Porque tan nerviosa?

Un jadeó, salio de ella al sentir el aliento chocar contra la piel haciendo que esta se estremeciera tan facilmente.

-Alejate por favor, Inuyasha.

-¿Y si no quiero que harás?

Agarró uno de sus gluteós acoplandolo en el hueco de la mano de él, la miró fijamente a los ojos, mientras con su otra mano entrelazó la de ella.

-Gritaré.

-Creéme, nadie te va ha oir.

Abrió su boca apuntó de gritar pero esta fue callada con beso fugaz que le estaba brindando ese chico que no paraba de hacer su vida infeliz y triste. Inuyasha aprovechó ese gesto de parte de ella y adentró su lengua saboreando el interior de esa niña que no paraba de moverse para cortar el beso.

Se separó de ella bruscamente viendo como esa azabache le regalaba una hermosa vista, su vestido estaba levantado, sus labios hinchados debido al beso de hace unos momentos, su pecho subia y bajaba buscando relajar la respiración, sus ojos tenian lagrimas, sus mejillas estaban de un color rosado que simplemente la hacia ver más tierna e inocente de lo que es, y por ultimó todo su bello largo cabello estaba revuelto.

Estaba dispuesto a irse para dejar a una joven exsaltada, le dio una ultima mirada pero antes de irse le dio un pequeño beso en los labios, separandose de ella rapidamente.

-Nos veremos después, Higurashi.

Se fue del baño dejando una azabache desconcertada y confundido debido a lo que acaba de pasar.