La Guerra Santa Magica (Fairy TailxSaint Seiya)

CAPITULO 3

Mientras nuestros magos arribaban a la ciudad y se dirigían al hotel para descansar ya que mañana comenzarían con la investigación y un mago de la ciudad estaría con ellos para guiarlos y ayudarlos, pero era un mago con una magia muy inusual, el cual se encontraba en su casa junto a su único hermano, los cuales se encuentran cenando.

-Los magos enviados por el Reino de Fiore, deben de estar llegando en esos instantes a su hotel-comentaba un joven con cabello color café, con ojos marrones rojizos.

-Pero ¿por qué el Reino pidió ayuda a otro Reino?, si por eso tenemos también nuestros magos-decía un joven con cabello rubio largo y ojos azueles-y más aun ¿Por qué tienes que ir tu a una misión muy peligrosa como esta?

-Sabes que tengo que ir, ya que soy el único mago de esta ciudad- respondía el joven de cabello café-además no te preocupes puedo cuidarme bien solo, ya que soy un mago muy habilidoso- decía esto dándole una sonrisa a su compañero.

-Yo no dudo de tu fuerza, he visto lo fuerte que te has vuelto es solo que...no me gustaría...perder a mi única familia...-expresaba el rubio con algunas lagrimas en el rostro-no desde el accidente,.. No podría soportar otra perdida.

-No estés triste, ella no le gustaría verte así de triste-comentaba el joven de pelo café tomando por los hombre para mirarlo a los ojos- y recuerda lo que le prometiste- le decía al rubio haciendo recordar esa promesa- le prometiste volverte un gran pintor y yo te cuidare hasta que puedas cumplir esa promesa Alone.

-Tenma... ¿por qué no puedo ser tan fuerte como tú? ¿Que aun de después de lo que sufrimos puedas mostrar esa sonrisa?-preguntaba con una mirada de tristeza recordando un recuerdo muy doloroso.

-Tú eres muy fuerte Alone, no tendrás una gran fuerza física, pero tienes un corazón muy noble y puro, algo que muchas personas no tiene, tienes un gran talento con la pintura y estoy muy seguro que el destino te tiene algo muy grande preparado- eran las palabras de Tenma a su hermano-aunque no seamos hermano de sangre, siempre te considere como uno y como tal te ayudare y te protegeré.

-Tenma, muchas gracias, algún día te devolveré todo lo que has hecho por mí, te lo prometo- decía Alone a su hermano.

-Mientras persigas tu sueño, con eso me harás feliz, ya que yo quiero seguir viendo tus pinturas-le respondía Tenma a su hermano-ahora continuemos cenando y ahí que descansar, ya que quiero que termines pronto tu pintura.

-Cierto mañana iré a las colinas que se encuentran al norte de la ciudad,-le comentaba a su hermano mientras comía.

-¿A las colinas del norte? ¿Por qué iras a un lugar muy inclinado, ya que es muy complicado llegar ahí?-preguntaba Tenma.

-Lo que pasa, que ahí dicen que ahí puedo encontrar unos frutos que me puedan dar el rojo, que estoy buscando-decía Alone con una sonrisa en el rostro, ya que el hablar de lo que lo apasiona lo hace feliz- es un rojo no muy intenso y suave el que busco, el cual aun no he podido encontrar, y espero que esos frutos me den el rojo que busco.

-Bien, ve pero con cuidado, yo estaré en el bosque que esta al sur, si tienes algún problema o ves algo peligroso o sospecho, por favor sal de ahí y dímelo cuanto antes, si- decía Tenma con algo de preocupación hacia su hermano.

-Por supuesto Tenma, yo te diré si veo algo sospecho o inusual, ya que entre nosotros no hay mentiras-decía Alone, lo cual si era cierto ya que entre ambos hermano no se ocultaban nada.

-Bien, sin más que decir, será mejor ir a descansar ya que mañana será un largo día-expresaba Tenma ya con algo de cansancio por un día de trabajo.