No te tengo miedo 》g.d

Capítulo 8

Narra Carter:

Prestaba atención a la clase, cuando en cuestión de segundos, todos giramos hacia el asiento de Paula al escuchar cómo se levantaba con brusquedad, me le quede mirando para que ver que sucedía con ella, pero ella cayó con fuerza al suelo.
Me levanté con rapidez y me dirigí a su lado pude notar como salía sangre de su cabeza, y ella se mantenía con los ojos cerrados.
La tomé con fuerza y la cargue en mis brazos para luego dirigirme hacia la salida y caminar lo más rápido hacía enfermería.

En mi trayecto una voz conocida me detuvo.

—¿Que le pasó a Paula? ¿Que le hicieron? ¿Porque está sangrando?. – Preguntó en un tono duro y frío.

—¿Te importa? Supongo que no! –  Contesté enojado.

—Claro que me importa imbécil! Si no no preguntaría. – Gritó.
—Así que contestame! ¿Que le pasó a Paula?

Apretaba sus puños y su cara empezaba a tensarse.

—¡Oh! Ahora resulta que te importa la vida de los demás. – Reí irónico. —No estoy para tus miedos Dolan, sal de mi camino. – Lo mire fijo.

—No las demás, pero la de ella sí. –  Bajo la voz.
—Solo quiero saber qué le ocurrió. – Bajo la mirada.

—Solo se desmayo. – Conteste obvio.

—¿Y la sangre? – Pregunto levantando la mirada al momento en que acariciaba el pelo de Paula con delicadeza.

—Oh está en su período. – Dije sarcásticamente.

—¿Que? Carter deja de decir estupideces! – Grayson me miro molestó.

—Es obvio que al caer se golpeó y por eso la sangre, idiota! Ahora si me disculpas, tengo que salvar la vida de mi hermana. – Dije apartandolo.

—Bien. - Se hizo a un lado, mirando a Paula con ¿Preocupación?

Vaya, quién lo diría, un chico como Dolan preocupandose por la vida de mi hermana, eso sí que no me la creía.

Llegué a enfermería y la coloqué en la camilla, la doctora comenzó a revisarla al mismo tiempo que me cuestionaba acerca de lo sucedido.
Le lavo la herida y le colocó una venda, le acercó alcohol en un algodón para despertarla, pero ella aún seguía inconsciente.
Me comenzaba a preocupar, ya habían pasado dos horas desde su desmayo y aún no reaccionaba.

Me senté a su lado, observandola detenidamente.
Sentí dolor al verla así, me acerqué a depositarle un beso en la frente y no pude evitar derramar unas lágrimas.

—Eres tan linda Paula, tan tierna, tan dulce, eres la chica que todos quisieran a su lado, incluyendo al imbécil de Dolan. – Le acariciaba la mejilla.
—No puedo dejar de agradecer por tener una hermana como tú, que lástima que el divorcio de nuestros padres nos haya separado. Solíamos ser el uno para el otro, aún maldigo la hora en que papá me lo dijo, sigo sin creermelo, diablos Pau, solo espero que cuando te enteres, no me odies y entiendas el porqué de mi silencio. No me importa que un maldito papel diga lo contrario, te amo.

Narra Grayson:

Al ver a Paula de esa manera, sentí un dolor en mi pecho, sin saber el porque.
Me cole por los casilleros llegando a enfermería, observe como Carter lloraba al instante en que le decía algo a Paula, ella seguía sin despertar.
Comencé a preocuparme aún más, quería saber porque le pasó eso, porque mierda no reaccionaba.
Sentía un gran impulso dentro de mi, no podía controlarlo, tenía que entrar a verla, estar con ella, hacerle saber que contaba conmigo, que no dejaría que nada ni nadie la lastimara, no a ella.

Escuché como la enfermera le decía a Carter que tenían que dejarla sola unos momentos.
El asintió y juntos salieron de enfermería.
Aproveche el momento y me adentre al lugar.

Era obvio que no iba a estar sola.

Me acerqué a ella y me senté a su lado, tomé una de sus manos y le di un pequeño beso en la mejilla.
Observé cada detalle de su rostro, sin duda la chica más linda que pudiera conocer.

Una sonrisa salió de mi rostro sin esperarla, y ahí fue cuando me di cuenta de una cosa.

—Paula, no se que diablos pasa conmigo últimamente, pero sabes, jamás me había sentido así, nunca me había preocupado por alguien como lo hago contigo, jamás había abrazado a alguien intentando sanarle todas sus heridas, pero, contigo todo es diferente. Y sin que yo lo haya decidido, eres la causante de mis sonrisas. ¿Porque Paula Reynolds? ¿Porque tenías que ser tu la chica que llegó para salvarme de todos mis males? No tienes idea de cuanto te odio pero a la vez te...

Sentí como se movió, y abrió sus ojos lentamente, parpadeo varias veces, y se quedó mirando el lugar, para después llegar a mí, al chocar nuestras miradas sentí una fuerte conexión entre los dos.

Ella solo frunció el ceño y abrió sus labios para hablar.

—¿Grayson? ¿Que haces aquí?

—Amm, yo,yo, yo solo vine a ver como seguías, encontré a Carter en el pasillo cargandote desmayada y con sangre en tu cabeza.

—Oh, así que ¿Carter me trajo? – Dijo bajando la mirada.

—Asi es. – Contesté frío.

—Que bien, es mi hermano debería hacerlo. – Rodo los ojos.

Ambos nos quedamos callados un segundo.

—¿Grayson? – Preguntó tomando mi mano.

—S... ¿si? – Dije en tono nervioso.

—¿Cuanto tiempo llevas aquí?

—No lo se, supongo que unos minutos, ¿porqué?.

—Es que escuché que me hablaban.

Mierda! Que no haya escuchado lo que le dije

—¿Eras tu verdad? – Preguntó Paula.

—Eh, yo, si era yo. – Conteste rascandome la nuca.

—Bien y ¿Que era lo que me decías? – Sonrió.

Mierda ¿Ahora que le dirás Dolan?

—Pues yo, yo solo.. – Ella seguía mirándome con ternura y atención.

—Agh bien, yo te decía Paula que eres la causante de mis...

No me odies Paula por favor.

—¿La causante de tus? – Preguntó frunciendo el ceño.