CELOS Y CONCIERTO.

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NARRADO POR MIA

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NARRADO POR MIA

Hoy era el día donde los chicos tocarían en La Sala Riviera, después de tantos ensayos y nervios, al fin era el día.

-Buenos días- dijo Villamil despertando a mi lado, con su cabello alborotado y una sonrisa que no enseñaba dientes.

-Es el día- le digo dándole un corto beso en los labios y sonríe –, vamos.. les invitare el desayuno a todos, tenemos el tiempo contado, así que levanta tu trasero famoso.- salgo de la habitación y me dirijo a la habitación más cercana, al ver a Isaza tan dormido no pude evitar planear como despertarlo. Agua fue mi mejor opción, fui por un roseador y me acerque a su cama.

-Isa, Isa...- dije muy cerca de su cara en susurros y el parecía no escucharme –, Isa es hora de despertar...

-No quiero- fue lo único que salió de su boca y sonreí con malicia.

-¡ES HORA DE DESPERTAR SOLDADO! ¡ARRIBA, ARRIBA, ARRIBA, BASURA!- dije con gritos y comencé a rosearle agua en la cara, de inmediato comenzó a moverse para cubrirse y deje de lanzarle agua y nos quedamos viendo fijamente por unos segundos.

-Es mejor que corras- dijo, comencé a correr y a gritar por todo el departamento y entre a la habitación de Simón, quien por cierto también estaba dormido.

-¡AYUDA! ¡QUIERE APLASTERME, O COMERME!- me lance a la cama y Simón comenzó a quejarse.

-¡VEN AQUÍ MIA!- al fin me tomo de los pies y comenzó a hacerme cosquillas mi risa no tardo en sonar por todo el departamento.

-¡BOLITA A MIA!- Simón fue el primero en ponerse encima de mi.

-¡NO NO NO!- mi risa seguía y pude escuchar como a la habitación entro Villamil y Martín, quienes se unieron a la bolita. Cuando al fin se quitaron de encima y me dejaron respirar nos quedamos los cinco acostados en la cama de Simón aún calmando la risa.

-Pensé que iba a morir joven- dije e Isaza quien estaba a un lado mío me soltó un golpe en la frente, el cual conteste de misma manera y comenzamos a pelear de nuevo hasta que un carraspeo de garganta nos detuvo y volteamos a ver de quien se trataba.

-Andrea...- dijimos todos en unísono e Isaza y yo nos separamos, Andrea salió de la habitación y el la siguió, y todos nos quedamos en silencio

-No sabía que tenía llave- dice Martín.

-Creo que ni Isaza lo sabía- dice Villa y todos estamos de acuerdo.

-Bueno, báñense, los invitare a desayunar.- dije. Todos salimos de la habitación e Isaza esta con Andrea hablando calmadamente.

-¡ARREGLATE!, nos vamos a desayunar- le grite a Isaza.

-¿POR ESO ME DESPERTASTE ASÍ?- me grito de vuelta. -¿NO PUDISTE DESPERTARME COMO GENTE NORMAL?

Si tu te vas..   -EN EDICCIÓN-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora