Me miró con esos ojos azules anhelantes, nostálgicos. Me sonrió con esa sonrisa sincera. No quería verla, pero no porque me desagradara, sino porque sabía que mis sentimientos por ella saldrían, aquellos que siempre habían estado guardados desde que me había ido. Y es que nunca lo habíamos dejado, simplemente las cosas cambiaron, yo me fui de la ciudad y nos olvidamos mutuamente, pero estaba claro que cuando nos volviéramos a ver, ese sentimiento afloraría. Bajó del coche, iba con un vestido que iba a conjunto de sus brillantes ojos, no sabía si estaba tiritando o llorando, de todos modos le invité a entrar, al fin y al cabo, necesitaba hablar con alguien.
Entramos y enseguida me abrazó, esos sentimientos estaban dando su luz otra vez y no sabía si retenerlos, ¿qué pensaría Alice de esto? No sabía bien que hacer, estaba con la inquietud, pero finalmente me dejé llevar. Le rodeé con mis brazos.
-Te he echado mucho de menos.- me dijo Christine con nostalgia. Me miró esperando una respuesta que no sabía cómo darla. Le di un beso en la mejilla.
-¿Cómo sabías que estaba por aquí? ¿Y cómo sabías que estaría despierto?- Le dije curioso.
-Madre mía Ethan, parece mentira que me preguntes eso, estuvimos juntos durante 2 años, ¿enserio me preguntas eso? Te conozco más que a la palma de mi mano, cariño.
No podía dejar que volvieras a irte sin verte. – se me acercó para darme un beso.
-Christine...- dije incómodo.
-¿Qué pasa? ¿Se te ha comido la lengua el gato? Dame un beso va.- Se volvió a acercar.
-No puedo...
-¿Cómo que no puedes? Dos años contigo y no me puedes dar un beso de reconciliación, parece una broma esto, va.- Me dio un beso sin poder evitarlo. ¿Realmente lo evité o quise pensar que lo había evitado? A fin de cuentas yo también tenía ganas de volver a notar sus labios con los míos.
Entre besos y abrazos terminamos encerrados en mi habitación. Sabía perfectamente que lo que estaba haciendo no estaba bien, pero en ese momento no le di muchas vueltas a la cabeza. Christine me quitó la camisa y empezó a dejar marcas de su pintalabios por mi cuello hasta acabar en el ombligo y volver a besar mis labios. Me puse encima de ella y le quité el vestido. Después de mucho tiempo sin vernos, volvíamos a estar juntos, como si no hubiera pasado ni un solo segundo separados. Volvía a ser mía y yo suyo. Instantes eternos.
Alice Brook
Ya llevaba 2 semanas y media sin estar con Ethan y lo echaba mucho de menos, pasamos de estar juntos cada segundo a estar casi sin apenas hablar durante dias. Tampoco quería molestarlo ya que sabía que él también necesitaba su tiempo para estar con su familia y aclarar su mente.
Durante esos días estuve pasando las tardes con Jayden, no me había dado cuenta hasta ahora que era un chico muy agradable, él era muy empático y comprensivo, se parecía mucho a Ethan en todos los sentidos, aunque Jayden era un chico bueno, a diferencia de Ethan.
Jayden siempre había sido un buen estudiante y el chico más deseado por todas las chicas del instituto pero no se lo tenía nada creído, era muy humilde, era encantador.
Íbamos quedando algunos días para adelantar un trabajo que teníamos de la universidad y otros días simplemente para matar el aburrimiento. Solo él y yo éramos los únicos que hacíamos la misma carrera de todos nuestros amigos y eso nos hizo más cercanos. A diferencia de Alex que acabó de estudiar bachillerato y se metió a trabajar.
Como cualquier otra tarde, Jayden y yo acabamos las clases y nos fuimos a mi casa a estudiar, nos quedamos super aburridos de estudiar así que le propuse hacer una pausa y subir a mi habitación a ver alguna película o hacer cualquiera otra cosa para despejarnos de los estudios, él aceptó.
Le estaba enseñando mis fotos de pequeña mientras escuchábamos música, cuando al levantarme de la cama para cambiar de canción, me cogió de la mano y me tiró hacía él, empezó a reír por mi cara de boba que se me quedó al caerme en la cama.
-Oye no te rías que me podría haber matado y tu serías mi asesino eh.- dije haciéndome la enfadada.
-Si te mueres tú, yo voy después.- dijo sonriendo
-Sí, tú vas después pero porque Ethan te mataría.- contesté burlona.
-¿Qué tiene que ver Ethan aquí?- preguntó un poco molesto
-¿Quizás porque es mi novio?- dije irónica.
-¿Seguro?- dijo Jayden acercándose a mí. Tenía unos labios y una sonrisa muy atractivos y una mirada más todavía.
-Jayden... Párate, enserio.- Me puse seria y me levanté de la cama enfadada, yo no sería capaz de besarme con otro chico mientras tuviera novio, jamás. Bajé al comedor, me dirigí a la puerta y le pedí que se fuera.
-Alice, yo...- intentó disculparse.
-Vete porfavor.- le dije sin dirigir mirada.
-Déjame que te lo explique, por favor Alice, yo no quería que te sintieras mal, lo sie...
Le cerré la puerta en sus narices y llamé a mi hermano para que viniera a casa, no quería estar sola, pero tampoco con Jayden.
Pasé unos dias ignorando a Jayden cuando me venía a hablar entre clases, simplemente me limitaba a tener trato de compañeros de clase y ya está.
Quise darle una sorpresa a Ethan, ya que solo le quedaban 2 días para volver a la ciudad, pero igualmente quería ir a verlo y poder conocer un poco a su familia, y así cambiaba un poco de aires también.
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Carta 623
RomancePero ya era demasiado tarde porque ya no habría vuelta atrás, todo había acabado para mí. Escuché su voz gritando mi nombre, su voz quebrada en pedazos, no sabía si era real, o solo imaginaciones mías, pero en ese momento, sabía que no la podía dej...