DISTORSIÓN

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La tonalidad del cielo variaba entre azules y naranjas, disueltos en un camino de tiempo bastante crucial. La gente alrededor buscaba la forma de llegar a sus destinos, entre taxis y autobuses, o alternativas como bicicletas, eran los medios por los cuales evadían la necesidad de enfrentarse a la oscuridad, y peligros al azar de la noche. Pocas eran las caminatas, la mayoría de parejas felices que disfrutaban la luz de la luna salir lentamente, sus paradas eran simples restaurantes o a mayor de los casos moteles...

-Ah...-

Un suspiro broto producto de la calma y el buen ambiente que se mezclaba, el goce de una pequeña caminata era un gran placer de la vida para él, un símbolo de total libertad y sentido de la reflexión...

-"Espero que Jean no esté en apuros..."-

Recuerdos risueños vinieron a su mente, donde su bebe le daba problemas a su padre adoptivo y comenzaba a patalear en pleno momento del baño, salpicando todo y a todos...

-Jaja...- Rio jocoso...

-Disculpe...- Una rasposa voz llamo por detrás...

-¿Si?-

El joven de pecas vio el sombrío aspecto del hombre, su cara estaba casi oculta por un sombrero, la gran gabardina oscura escondía la forma de su físico, que daba a simple vista, ser un hombre mayor. La travesía de la caminata llego a un punto en el parque, la poca iluminación e inexistente cantidad de gente eran motivos por los cuales desconfiaba...

-Es él...-

-¡¿QUÉ? ARGH!-

El cloroformo acabo con sus sentidos, dejándolo solo con el gran dolor de la persona que estaba detrás, sujetando sus brazos con fuerza, terminando en la fría sensación que ofrecía el suelo de concreto...

...

-¿Eren?-

-...-

El impacto de la noticia fue demasiado. Desde que subieron al taxi, Rivaille intentaba hacer hablar al castaño pero este apenas respondía con agudos "aja" o encogiéndose de hombros. Muchos pensamientos invadían la mente de esa pobre víctima y el mayor temía lo peor, que algún impulso hiriera más al chico o mucho peor aún, que él solo se hiciera daño...

-Eren, todo estará bien...-

-...-

Al llegar bajaron rápidamente, por poco y olvidando pagarle al conductor. Entraron al restaurante, Eren por delante siendo recibido en brazos por Hanji, y Rivaille, al dar los últimos pasos para cerrar la puerta y entrar completamente, un puño fue quien recibió a su cara, cayendo de espaldas al piso...

-¡MALDITO BASTARDO!-

La femenina y desesperante voz fue reconocida de inmediato, ignorando el reclamo, junto con el golpe, e intentando ponerse de pie...

-¡MIKASA TRANQUILIZATE!-

-¡¿CÓMO MIERDA QUIEREN QUE ME CALME?! DESPUES DE SABER...!-

-¡MIKASA!- La autoritaria voz de Auruo llamo su atención... -¡NO ES MOMENTO PARA ESTO!-

-¡PERO SEÑOR...!-

-Eres una maldita mocosa...-

-¡TU CALLATE HIJO DE...!-

-¡AMBOS CALLENSE!- Grito Hanji, cubriendo a Eren en sus brazos, que lloraba en silencio y sobre sus hombros...

-...-

Rapto de CorduraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora