Survive Together +18 © (Daryl Dixon)

1. vivir

Hola chicas! Bueno, una vez más, otra obra... En realidad esto no es sólo mío, sino que de reedusftlincoln quien fue la que tuvo el honor de tener la idea y proponerme a mí de hacer esta obra juntas. Quiero explicar que no tiene nada que ver con el apocalipsis, y que además, en este caso, Daryl va a ser un chico de veinte años. Creo que es una obra demasiado fuerte para mí, ya que va a tratar de temas que, incluso ya en el 2018, siguen siendo demasiado difíciles de soportar, y tal vez muchas de ustedes lo tenga que vivir. Queremos que se sientan identificadas y que, además, sepan que hay muchas formas de pedir ayuda.

La historia va a tratar de muchos temas, los dos principales van a ser la homofobia, y el bullying. Es por eso que estoy muy contenta de poder escribir algo así, porque es algo que quise hacer hace mucho tiempo. Así que espero que les guste, y que sepan que todo es gracias a Tami! Te quiero! ❤️

Disfruten de la nueva obra✨

Otro golpe más. Otro maldito golpe más en mi cuerpo. Ya ni siquiera tengo el maquillaje suficiente como para tapar las heridas y así, hacer que mis padres nunca sepan lo que me pasa, porque lo que menos quiero, es que se enteren que todo lo que sufro las cinco horas de colegio, es por culpa de ellos dos. No quiero que se sientan culpables, ni mucho menos quiero que se decepcionen de ellos mismos. Los amo, así como son, y como me criaron, y jamás me arrepentiría de tenerlos a ambos como padres.

Ni siquiera con estos golpes que recibo de lunes a viernes.

Nadie se da cuenta, o si se dan, se hacen los indiferentes. No sé la razón de las actitudes de ellos. No sé si por miedo, no sé si porque realmente no les intereso en lo absoluto, o porque simplemente, de seguro piensan que son temas ajenos a sus vidas y no deben meterse en nada.

— Para que aprendas que no tienes que ni siquiera acercarte a nosotras, Smith. No queremos contagiarnos de la enfermedad que los idiotas de tus padres tienes, y que de seguro tú también debes de tener. — me dice Leila, empujándome contra la pared del baño, haciéndome tanto daño, que yo gimo por dentro, porque no quiero que se de cuenta de mi debilidad.

— De hecho, creo que se está contagiando. —dice su compatriota, Bethany. — El otro día la observé mirándome los pechos en el gimnasio, antes de ir a correr por el campus.

— ¿Eso es verdad? — dice Leila abriendo su boca en forma de O, para luego reírse como una desquiciada. — Responde, Smith. ¿Es verdad?

—No. —digo yo, rotundamente. — No me interesa mirarlas.

Mal.

Muy mal.

No debí responder así, y ahora mismo, me arrepiento muchísimo.

Si antes había sido un puñetazo en mi mejilla derecha, ahora lo es en la boca de mi estómago.

— Para un poco, Leila. Ya te pasas. — Christine es quien habla ahora. Jamás pensé que iba a escuchar esas palabras salir de su boca.

Me encuentro en el suelo, con las manos en mi estómago, retorciéndome del dolor. Leila chista con su lengua, para reírse y caminar hacia la puerta del baño, yéndose detrás de ella Bethany, pero Christine, quedándose ahí, frente a mi cuerpo, mirándome con sus manos en las caderas.

— No me das lastima. No me gusta la violencia extrema, eso es todo, Smith. Deberías sacar un poco más de carácter, pero con los padres que tienes... dudo que lo hagas.

Pensé que iba a ser de gran ayuda, y sin embargo, terminó siendo igual que sus dos amigas.

Se va, y por fin quedo completamente sola en el baño. Estoy acostumbrada a vivir esto todos los días, pero ya es algo que me causa demasiado dolor, y no físico, sino que mental.