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— Ven conmigo a Busan—. YoonGi susurro en mi oído en cuanto pudo abrazarme por la espalda mientras salía de mi habitación.

— No, ya hablamos de ello.

— No me importa, quiero que vayas a Busan conmigo.

— Son tres días YoonGi. No puedo—. Me excuse—. Además mañana regresan mi madre y mi hermana, quiero estar con mi familia.

— Tu padre ira también.

— Precisamente, tengo que recibirlas. No puedo acompañarte.

— ¿De verdad vas a ir a recibirlas y pasar los tres días en su casa?—. Inquirió alejando su cuerpo del mío y colocándose frente a mí.

— ¿No confías en mí?

— Tanto como tu confías en mí, HoSeokie—. Vale, eso era nada.

— Te dije que habíamos terminado ¿No es así?

— Si, por eso cuando el idiota te trajo a casa la mañana siguiente se despidió de ti tan amistosamente ¿No?

Recordé lo ocurrido hace una semana. La exquisita noche que había pasado en los brazos de SeokJin mientras follabamos, y la increíble tranquilidad que me daba al estar a su lado cuando dormimos abrazados. Sus dulces labios que no me cansaré nunca de besar y todas las muestras de afecto de la mañana. Había sido perfecto, él era todo un romántico, y mi corta estadía en su casa era comparable a lo que llamaban "miel sobre hojuelas".

La mañana que SeokJin me había traído a casa no pudimos evitar despedirnos de la manera usual y terminamos casi sin ropa, de no ser porque mi mano presiono en el claxon del automóvil cuando ya estaba sobre sus piernas y él tenía sus manos sobre mis muslos, no nos hubiésemos detenido.

— Incluso los condenados a muerte tienen derecho a una última cena.

YoonGi resoplo con un poco de molestia, pero volvió a acercarse a mí. Tomándome de la cintura con una mano y con la otra acariciando una de mis mejillas. Me parecía lindo que volviera a tratarme con cariño, como si nada hubiera pasado; pero el problema residía en que precisamente, algo si había pasado, y nada de lo que hiciera ahora lo cambiaria.

— Busan, tú, yo. Será perfecto, incluso seré cursi— reí divertido.

— Te he dicho que no. Y por supuesto que no lo serás, solo quieres que vaya para mantenerme vigilado.

— Es una razón, pero de verdad que quiero que me acompañes.

— No, no iré a Busan.

— ¿Y qué vas a hacer los tres días encerrado?—. Lo veía frustrado, nunca le había gustado que alguien se le negara a nada. Eso había sido uno de los motivos por los cuales yo le había atraído tanto cuando nos conocimos en su "pequeña" fiesta.

— No voy a estar encerrado todo el tiempo. Mañana antes de ir al aeropuerto me paseare por tu jardín.

— No les hagas más fotos por favor—. YoonGi inflo sus mejillas y bajo sus brazos con un movimiento rápido, sus pequeños ojos se entrecerraron y junto sus labios en una mueca. Era tan condenadamente tierno así.

— Ah por favor—. Pedí haciendo una voz chillona—. Sabes que me encantan todas ellas. Solo serán un par de fotos a las Hooker's Lips.*

— No seas vulgar— pidió serio—. Científico.

— Psychotria Elata ¿Feliz?— asintió sin muchos ánimos. No mentí por completo, claro que haría las fotos y pasaría al aeropuerto por mi madre y hermana, pero solo eso. Los dos días restantes la pasaría en casa de SeokJin, claro estaba.

Exclusivo  -  [2Seok]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora