Al otro día atendió la llamada. Eran menos de las doce del medio día así que supuse se alistaba para ir a estudiar. En cuanto escucho mi voz quiso saber como estaban las cosas conmigo pero yo solo quería escucharla hablar por horas, solo quería el sonido de su voz que me daba tanta tranquilidad, que me producía paz. Después de una risita tonta menciono que alguien mas estaba en su vida, menciono su nombre seguido de un suspiro y sentí celos. Incluso creo que ella noto el cambio en mi voz porque se quedo en silencio mientras los segundos corrían cada vez mas rápido. Dame un año, por favor. Rogué. Aclaro su garganta antes de responder. Déjame ir, esto ya no tiene sentido, nunca me has querido, Henry. Creo que algo en mi reacciono. Por favor, te necesito, eres lo único que tengo. Y ella colgó, supongo que así es como la hacia sentir yo, abandonada, en completa soledad, sin ganas siquiera de respirar. En serio estaba haciendo su vida sin mi, era cierto la llamada de mi mejor amigo en la que confeso que la vio besándose con alguien mas. Y lo odio, lo odie. Todo mi problema con él comenzó mucho antes de Mara pero algo dentro de mi lo hizo mucho mas fuerte al imaginarlo con la mujer que debía ser para mi. Debo regresar, debo hallar la manera de tenerla en mi vida. Supongo que ella es el camino a mi alegría.
