Quizás todo comenzó cinco años atrás; cuando mamá cerro detrás de ella la puerta de casa y nunca mas regreso. Nunca lo olvide, quizás fue porque desde entonces mi hermano menor nunca dejo de llorar. Aun recuerdo el dolor en la mirada de papá, el rencor que tenia mi hermana hacia ella, pero algo que jamas podre dejar atrás sera su forma cruel de nunca llamar, siquiera recordar alguno de nuestros cumpleaños. Creo que por ello soy así, aunque yo no soy nadie para juzgarla. Debería ir de regreso al pasado, así podría saber si ella se marcho por algo malo de allí, pero al parecer todo era bueno, incluso su amor hacia papá, el mismo que la hizo marcharse. No era correcto que yo hubiese tomado la mala vida, tampoco que le hiciera daño a otras mujeres para aliviar mis penas, nada era correcto, pero no importaba, ella no estaba allí para llevarme hacia la buena vida y creo que papá nunca se recupero y por ello no me sano, pero esta bien. Vivamos el otro lado de la moneda, aquella cara que no es la mejor pero que no podemos cambiar. Esta es mi historia, aquí comienza mi vida, después de ella...
