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Desde esa noche día ya habían pasado casi dos semanas y todo iba de maravilla  entre Hoseok y yo, por otro lado, hobi y jay  no se habían hecho presentes en los días anteriores, lo cual mantenía a Hoseok tranquilo.

Esa tarde, Hoseok y yo estábamos en mi casa intentado preparar algo de comer. Últimamente hemos pasado mucho tiempo juntos, vamos a comer o salimos a algún lado que nos consume gran parte de nuestro día, es agradable estar con él e incluso llevamos a mi hermana con nosotros.

El hombre y la infante ahora mismo se encontraban en la sala probando algunos cambios de look, siempre que viene Hoseok ella sale de su habitación con algunas cosas para peinar a mi novio, y a él no le molesta, al contrario, le gusta mucho que le toquen el cabello tanto que en una ocasión se queda dormido.

­­–eso huele delicioso–Comentó Hoseok entrando a la cocina con un extraño peinado, al parecer mi hermana lo quiso peinar con dos chongos. Reí mientras sacaba la pasta del fuego .

–muy lindo tu cabello–comente volteándome para verlo mejor

–Tú hermana se acaba de ir con tus padres y no pudo terminar de peinarme– dijo moviendo su cabeza levemente– así que no le pegaré por el peinado, es un servicio incompleto

Los negocios siempre son primero y Hoseok le pagaba a mi hermana por peinarlo, Kathy cada vez tenía más dulces ya que esa era la manera en la que el le pagaba y ella estaba mas que feliz con aquel trato.

Me llenaba el corazón el saber que mi familia aceptaba a Hoseok, mis padres nunca se opusieron a que el pasara tiempo conmigo, lo cual me sorprendió conociendo lo dura que puede llegar a ser mi madre.

–ven aquí–hizo lo que le pedí y le acomode el cabello, se quejó un poco pero finalmente pude deshacer aquel chongo–ahora sí, guapo como siempre–sonreí mientras me tomaba de la cintura.

–¿De qué hablas? Yo soy guapo de cualquier manera–beso mi mejilla rápidamente

–Bueno, no te lo negaré

Me acerqué a él juntando nuestros labios en un lento beso, algo que había descubierto era la preferencia de Hoseok por los besos largos y profundos, ciertamente eso no me molestaba, me gustaba la manera que tenia de besarme.

No pensé que el beso escalaria tan rápido, su lengua no tuvo ningún problema en enredarse con la mía, su brazo me tomo con más fuerza para acercar más nuestros cuerpos, no me sorprendió demasiado cuando pude sentir aquella dura presión que había en los pantalones de Hoseok.

Me tomó entre sus brazos levantándome levemente del piso para poder rodearlo con mis piernas, caminó hasta mi habitación sin dejar de besarnos, de vez en cuando soltaba un pequeña risa al notar como Hoseok  chocaba con algunas cosas, no era la primera vez que teníamos intimidad en mi habitación, pero el aún seguía olvidando algunas decoraciones que teníamos sen el pasillo.

Cuando finalmente llegamos a mi habitación cerró la puerta con el pie y me recostó en la cama mientras me besaba el cuello. Se sentía muy bien sentir la humedad de sus labios calientes sobre mi piel.

No pasó mucho tiempo para que el piso de mi habitación fuera cubierto por nuestra ropa la cual estaba regada por todas partes. Hoseok acariciaba cada rincón de mi cuerpo haciéndome suspirar deseando más su toque, el cuarto se llenó del sonido de sus labios besando mi cuerpo.

Una vez más juntamos nuestros labios en un beso que casi me quita el aliento , su lengua se juntó con la mía rozándose de una manera exquisita y apasionada, se enterró en mi con una lentitud desesperante. Abrace su espalda con fuerza sintiendo como comenzaba a moverse sin dejar de besar mi rostro, y bajar a mi cuello , los movimientos de Hoseok  eran lentos pero profundos y totalmente satisfactorios. Juntos llegamos a la cima del placer con un gemido que se escapó de nuestros labios.

Dejó caer su cuerpo sobre el mío cubriéndome con él, su corazón latía rápido como el mío, después de unos segundos se colocó a mi lado y me abrazo atrayéndome a su cuerpo para descansar mi cabeza en su pecho. Estaba totalmente tranquila a su lado, con esa calma y con sus brazos alrededor de mi cuerpo me quedé dormida después de unos segundos.

Lo primero que hice al despertar fue mirar el reloj, había dormido dos horas, mis padres habían salido a la ciudad vecino así que aun teníamos tiempo. No tenía ganas de levantarme pero debí de hacerlo, los brazos de Hoseok seguían alrededor mío, su respiración era lenta y en su rostro no se veía algún rastro de preocupación, le di un beso rápidamente en los labios antes de salir de la comodidad de aquella cama.

Camine hacia el baño para tomar una ducha rápida. Al salir me enrolle en la toalla, necesitaba ir por ropa. Cuando entre a mi cuarto Hoseok estaba sentando en la cama, sonreí al ver su cabello alborotado, se veía adorable.

­–creí que estarías dormido–me acerqué a la cama–¿quieres comer algo? La pasta quedo lista, pero tendríamos que recalentarla –alzó la mirada

­–Nonna tengo frío, nunca había dormido sin ropa pero no está mal–sonrió con ternura–y sí, me gustaría comer pasta

–¿Hobi?–pregunte tomando la toalla con fuerza y sintiendo cómo mis mejillas se calentaban y se volvían rojas

De todo lo que puedo ocurrir este día, el ver a hobi de nuevo no era algo que esperaba, para nada.

–Me alegra verte nonna, pero ¿por qué estoy sin ropa? Y ¿me extrañaste?–preguntó mirándome tiernamente

­–Si hobi, te extrañé mucho, hmm me debo de cambiar, pero volveré pronto así que espera aquí–pedí rápidamente

–Nonna ¿Me ayudarás a cambiarme?–preguntó sin apartar la mirada de mi–Esta no es mi habitación y no se dónde se encuentra mi rapa ¿es esa?–preguntó mirando hacia el piso donde todavía seguía la ropa que nos quitamos la noche anterior.

Asentí tragando saliva, me sentía muy incómoda en aquella situación, pero no podía mostrarme incomoda, no si no quería que Hobi continuara haciendo muchas preguntas.

–¿me puedo bañar?, no sé que estuvo haciendo Hoseok hyng, pero me siento algo pegajoso–arrugo la nariz

–claro, iré por unas toallas para dártelas.

–está bien

Sali de la habitación dejando a Hobi sentado sobre la cama, busque una toalla limpia y regrese rápidamente a la habitación, pero me lleve una gran sorpresa cuando lo vi mirar por la ventana despreocupada mente. Con torpeza y rapidez me acerqué el y cerré la contina para después alejarlo del vidrio.

–nonna, estaba por saludar a los vecinos–se quejo

–estoy segura que podrás hacerlo una vez que te des una ducha–pase la toalla por sus caderas para taparlo y así poder respirar con mas tranquilidad.–te llevare al baño y mientras te duchas acomodare un poco la habitación

–está bien, no sé a que jugaron pero dejaron muy desordenado.

–vamos vamos–dije sin responder su primera duda y lo empuje levemente por la espalda hasta llegar al baño y dejarle el agua caliente corriendo.

Arregle mi habitación lo mejor que pude, ciertamente, no estaba del todo desordenada, pero la cama no le daba ese aspecto. Me cambie y junte la ropa del piso, reí al imaginar lo que sería cuando le contara a Hoseok sobre la repentina aparición de hobi.

–¡Nonna!–el grito de Hobi me hizo salir casi corriendo hasta el baño.

Sonreí al ver como sostenía la toalla mientras su cabello escurría montones de agua, tome una pequeña toalla que estaba sobre el lavabo, Hobi se inclinó un poco en mi dirección y dejo que le secara el cabello.

–¿Por qué tengo esto?–pregunto mirándose al espejo

Mire en su dirección y abrí los ojos al notar algunas marcas rojas sobre su espalda, todas ellas hechas por mis manos. Me aclare la garganta antes de responder.

–no tengo idea, probablemente fueron los mosquitos

Hobi no hizo más preguntas y le agradecí por eso, aun estaba aprendiendo como tratarlo.

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Lo interesante de esto es que se supone que publicaría esto desde la semana pasada, lamento la demora.

• Who Are You? • ~ J.HSKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora