• Who Are You? • ~ J.HSK

•35 •

–Honestamente, yo nunca tuve un mejor amigo durante la escuela o no alguno que recuerde–dijo haciendo una mueca–si tenía con quien almorzar o salir de vez en cuando, pero no eran algo así como mis mejores amigo

–Pero ahora tienes a jungkook–comente tratando de animarlo

–Y me siento muy feliz por eso–admitió–él siempre está apoyándome al igual que yo tratado de hacerlo con él. Aunque no se lo diga seguido, no sé qué haría sin él, supongo que todo seria más complicado

Sonreí con empatía al entender el sentimiento del que hablaba.

–Es un buen chico y entiendo por completo a lo que te refieres

Continuamos nuestros camino con la dulce música que salía de las bocinas del auto, en un momento dado, Hoseok me tomo de la mano y continuamos el camino así.

Suspire cuando se detuvo frente a mi casa. El sol ya se había ocultado y al no ver ninguna luz prendida, fue que me di cuenta de que no había nadie en casa.

–¿crees que podamos hablar mañana?–pregunte girando un poco mi cuerpo en su dirección–aún hay cosas de las que hablar

–claro, no creas que se me olvido todo lo que cause con mi carta

–entiendo por qué lo hiciste, pero si vamos a tener un futuro , me gustaría saber que cuento contigo–lo interrumpí antes de que pudiera responder–pero eso lo hablaremos después

–me parece bien, una charla y un helado es lo que nos hace falta

–me encanta como piensas

Besó nuevamente mi mano antes de dejarme ir para bajar del auto y abrir la puerta de mi lado. Tomé su mano para salir y caminamos hacia la puerta de mi casa.

Por alguna razón, el saber que lo vería hasta mañana me hizo un nudo en el pecho, quería quedarme con él, es como si tuviera miedo que se fuera.

–gracias por dejar que me quedara contigo–habló cuando estaba a punto de abrir la puerta de mi hogar

Me giré para verlo de frente.

–De nada, solo promete que no fingirás más para estar conmigo. En un futuro, simplemente pídelo, mientras seas tú estaré más que feliz- dije llevando mi mano a su mejilla

–Lo tendré en cuenta–se acercó un poco más a mí, nuestros labios estaban a milímetros y nuestras narices se rozaban–te amo y realmente lamento lo cobarde que fui al dejarte esa maldita carta–Murmuró haciendo que mi corazón se acelerara. Sus ojos brillaron después de decir esas palabras y sin esperar más tiempo juntamos nuestros labios en un beso que hizo que mis piernas temblaran.

Me sostuve de sus hombros mientras el me pegaba más a su cuerpo de una manera en la que no era posible que algo se interpusiera entre nosotros.

Sus manos me abrazaban con fuerza como si tuviera miedo de que me alejara de él repentinamente, lo cual sin duda no haría y mucho menos después de que nuestras lenguas comenzaron a rozarse de manera apasionada. Solo éramos él y yo en ese momento.

Después de unos largos y placenteros segundos terminamos con aquella sesión de besos, pero Hoseok dejó cortos y rápido besos por todo mi rostro haciéndome suspirar por aquel lindo gesto. Besaba mis mejillas, mi frente, mi nariz y mis labios de manera rápida y linda.

Después de eso vino un segundo beso, igual de fogoso que el anterior, pero a medida que el beso subía de intensidad las manos de Hoseok presionaban mi cintura de una manera más fuerte hasta convertirlo en algo doloroso.

–Hoseok–le llamé alejando mis labios de los suyos

–Será mejor que entres, Minju–habló mirándome fijamente con algo de advertencia

–¿estas bien?–pregunte preocupada al ver cómo se alejaba de mi con pasos algo torpes

–Entra de una vez. Te llamare más tarde–sus manos se cerraban en puños y luego se relajaban, algo estaba pasando y sabía que era.

Busqué mis llaves en mi bolsa y finalmente las encontré, escuchaba como Hoseok respiraba con fuerza y se quejaba detrás de mí. Alguien quería salir y lo estaba consiguiendo.

Saqué mis llaves y las introduje en la cerradura, pero en ese momento él se acercó rápidamente a mi colocando su mano en el marco de la puerta evitando que la abriera. Su respiración estaba en mi cuello y escuché una risa salir de sus labios tensándome por completo en ese momento.

–hola, muñeca–Jay me tomó de hombro haciendo que me diera vuelta, la expresión de felicidad y tranquilidad que antes adornaban su rostro habían desaparecido, ahora solo estaban los oscuros y vacíos ojos de Jay frente a mi– ¿esperaban que me quedara tranquilo mientras Hoseok se aprovechaba de lo que es mío?–habló con total seriedad

–No sé de qué hablas. Nada de aquí te pertenece–me atreví a decir sin apartar la mirada. Jay simplemente apretó la mandíbula antes de hablar

–Él no te merece Minju, Hoseok no merece nada bueno

–Él lo merece todo–dije rápidamente– merece el amor de todos a su alrededor

Sabía que no era lo mejor el ponerme a discutir con Jay, pero no podía evitarlo. Había muchas cosas que le quería decir, dejarle en claro que Hoseok es quien tiene el control.

–es un cobarde–contradijo en un tono bajo

–El único cobarde aquí eres tú, ¿cómo te atreves a amenazarlo para que se aleje de mí?–Pregunte sintiendo un ardor en mi garganta debido a la molestia que comenzaba a sentir

–Te estaba quitando un peso de encima, él no le conviene a nadie. Tu debes solo de estar conmigo–la molestia en su voz era alarmante, pero eso no fue suficiente para detenerme.

–Yo lo amo a él– dije con total seriedad–Hoseok es con quien quiero estar y lamento decírtelo, pero me quedare a su lado aunque intentes que no sea así

–Nunca podrás ser feliz con él, Minju–sus dedos acariciaron mi mejilla con suavidad, pero no había nada tierno en su toque–porque sin mí él no es nada–afirmó

Sentí como mis mejillas se calentaron, estaba molesta y sin poder controlarme, coloque mis manos en su pecho para empujarlo aunque no se movió mucho de su lugar, pero si parecía sorprendido de mi actuar.

–ahí te equivocas. Tú no eres nada sin él, tú existes por Hoseok. Espero que pronto lo entiendas

En ese momento observé cómo sus ojos se volvían fríos haciendo su mirada más dura.

–ven conmigo–Ordenó y yo simplemente decidí ignorarlo y girarme en dirección a la puerta para intentar entrar a mi casa

–Mis padres no tardaran en llegar. Te recomiendo que te vayas a casa

–Realmente me importa una mierda, pero dado que te interesas tanto por Hoseok estoy seguro que querrás saber lo que ocurrirá

Miré sobre mi hombro y la seriedad que cubría su rostro en su rostro no era algo que me relajara demasiado. Cerré los ojos y respiré profundamente.

–lo que me interesa ahora es estar con Hoseok, pero dado que nos interrumpiste yo-

Abrí los ojos de golpe cuando sentí como una de sus manos me cubrió la boca y con la otra me tomó de la cintura pegando mi espalda a su pecho.

–Harás lo que yo te diga si no quieres que haga algo que no te agradará para nada–susurro en mi oído

Asentí con miedo y Jay buscó en los bolsillos de su pantalón hasta que encontró las llaves de su auto.

–vamos, que no quiero tener que lidiar con el tráfico–dijo con algo de burla

Cuando Jay cerró la puerta del copiloto después de que me adentré al auto, fue que el miedo se adentró en mi pecho haciéndome difícil respirar con tranquilidad.

•••