Shut up and let's love

{01}

-Momo-

A mi querida Jeongyeon se le caía la baba. Su boca estaba medio abierta y sus manos, nariz y frente se apoyaban el el cristal de la ventana —sí, yo a veces también me pregunto cómo se le puede llamar a eso "homosapiens"—. Pero, en fin, mi rubia idiota no era tonta, ella estaba enamorada —lo cual era mucho peor—. Y, os preguntaréis: ¿de quién?; de otro idiota que además de cachetón, era homosexual —Jeongyeon no lo aceptaba, decía que era mentira—. Y que estudiaba en un curso superior. Así que, sí, a quien miraba por la ventana era a Jimin, el idiota odioso del que hablaba.

Jeongyeon había conseguido convencer al castaño imbécil que fuese al cine con ella tras varios rechazos y estaba más ida que nunca. Y, ¿quién era la amiga tonta que iba a tener que aguantar todas sus estupideces? La menda. Sí, yo: Momo, la mejor amiga de la rubia de bote.

—Unnie... —me llamó sin apartarse del cristal, yo me acerqué a ella mostrándole que tenía mi atención—. ¿Quién es ese? ¡Está muy pegado a Jimin! —su tono estuvo lleno de enojo y dio varios fuertes golpes en la ventana.

Me giré algo cansada y enfoqué mi vista en el acompañante del amor platónico de mi amiga. Había un chico, sí, ¡y vaya chico! Yoongi caminaba al lado de Jimin por el patio —lo que era raro—. A Yoongi se le conocía como un chico demasiado flojo como para siquiera ir al baño, y verlo desplazarse era... ¡guau!

Me incliné para observar con mayor nitidez. Jimin parecía entusiasmado con estar junto al otro chico, pero el sentimiento no era mutuo. Yoongi se mostraba serio e incluso algo molesto.

—Unnie... —su voz ya no era de enfado, sino con tristeza—, ¿quién es ese?

—Es Yoongi-oppa —respondí seca sin dejar de mirar aquella pareja.

—¿Oppa? —Jeongyeon me miró asombrada.

—¿Qué quieres que te diga? —me giré para salir del aula donde estábamos—. Vámonos, las clases han terminado y debes aprender a contener tus ganas de comerte a Jimin si quieres salir con él, vayamos a practicar.

Sí, esa tarde iba a ser larga.