Touch My Soul (Is It Love?Peter)[TERMINADA]

CUADRO PARTE I

ALICE

Me encontraba tumbada en mi cama con Peter a mi lado durmiendo como un bebé; era realmente adorable, como lo amaba.

Un ruido me hizo sobresaltar, dándome cuenta de que Ángela estaba delante de la cama mirándome con una expresión dulce. Al verme comenzó a correr y no pude evitar salir detrás de ella.

Me esperaba al final del pasillo como si quisiera que la siguiera. Comencé a caminar hasta ella, huyendo de mí de nuevo.

En el salón, Jack y Alina estaban durmiendo en los sofás sin enterarse que yo estaba allí. Ángela puso su dedo índice en los labios, indicándome que guardara silencio, abriendo la puerta de la mansión con suavidad.

Eran altas horas de la noche y apenas había luz, por lo que tenía que andar con cuidado de no tropezarme. Ángela comenzó a correr a través del bosque y no pude evitar ir tras ella sabiendo que era la hermana de Nicolae; deseaba ayudarla.

Comenzó a amainar su paso, parándose al pie de un enorme árbol.

- ¿Qué quieres que vea, Ángela?

Entonces alguien me puso una sábana encima, inmovilizándome con violencia. Yo intenté gritar, pero una mano me la tapó con cinta aislante.

-Es hora de que hagamos una visita; hay alguien que no ves desde hace tiempo.

Aquella voz me era conocida, pero no ubicaba su procedencia en mi memoria. Una voz femenina se unió a la conversación:

-Vaya, fuiste tan escurridiza, pero por fin te tenemos.

Yo temblaba de terror sabiendo que nadie me podía escuchar; no sabía que iba a ser de mí ni adonde me llevaban, pero lo que más me inquietaba era saber que alguien me estaba esperando.

SARAH

Chris y yo no habíamos parado de besarnos abrazados delante de aquella chimenea. Me sentía tan a gusto con él y tan protegida; nunca me había sentido así.

Sus manos acariciaban mi rostro y me miraba con curiosidad, me sentía realmente querida y especial.

Un rugido en mi estómago me hizo sobresaltar: hora de cenar.

Miré a Chris y me percaté que llevaba demasiada ropa de cuero encima, seguro que no estaba cómodo.

-Chris voy a por algo de ropa cómoda para ti.

-No es necesario de verdad-Me dijo con una sonrisa.

-Quiero que te sientas como en casa.

-Bueno, pero eso lo haces tú, no la ropa.

Comencé a reírme con ganas, me comenzaba a gustar mucho aquellas bromas. Subí hasta la habitación de mi hermano para tomar una camiseta y unos pantalones más cómodos, encontrándome una nota encima de la mesilla.

"No me busques, me fui bien lejos"

Aquel mensaje no era típico de Sebastián, él no se iría, así como así. Tomé la nota, analizándola con detenimiento y noté un leve olor a sangre.

Mierda...la sangre de Sebastián, la nota estaba plagada de su olor.

Corrí al salón donde estaba Chris y le dije con nerviosismo.

-Debemos de volver a la mansión; Alice podría estar en peligro.

Y al ver la nota entre mis manos supo a lo que me refería.

PETER

Comencé a despertarme sin sentir a Alice a mi lado, lo que me hizo pensar que quizás había bajado a comer algo.

Me sentía vivo e invencible, la sensación más increíble que había sentido en la vida. Iba a bajar a la cocina a tomar a mi mujer en los brazos y a darme un baño relajante con ella susurrándole lo mucho que la amo.

Quería colmarla de atenciones, de mimos y caricias; aún aquella puñalada la tenía clavada en mi mente. Pensé que la perdería para siempre y eso me aterraba, me aterraba saber en los peligros que habían allí fuera.

Todos aún estaban durmiendo debido a las altas horas de la madrugada. Pero cuando llegué a la cocina, no encontré a Alice allí, ¿Dónde podría estar?

Mi teléfono sonó, viendo que se trataba de Chris.

- ¡Peter ten cuidado, han cogido a Sebastián!

- ¿Te refieres a la organización? -Le pregunté preocupado.

-Son ellos, no tengo duda. Nos intentaron hacer creer que la nota que había dejado Sebastián era cierta, pero estaba impregnada de olor a sangre; su olor.

Comencé a sentir aterrado... ¿Dónde estaba Alice?

-Ten a Alice cerca, seguro que han vuelto a por ella.

-Ese es el problema Chris... que ella no está.

ALICE

Me encontraba en el asiento de un coche con los ojos vendados y la boca cubierta. Oía algunas voces a mi alrededor, pero solo dos de ellas las reconocía como mis secuestradores. No podía moverme, una cuerda ataba firmemente mis brazos, haciéndome daño en el estómago; temía por mi bebé.

-Ya estamos llegando Alice, es hora de los reencuentros...-Dijo la voz de un chico.

Sabía que aquel encuentro no iba a ser placentero; temía de quien se tratara y estaba segura de que no era buena persona.

La idea de la Organización me vino a la mente, ¿Y si me habían descubierto?

Comencé a pensar en la aparición de Ángela, ¿Y si me había tendido una trampa?, parecía surrealista...era la hermana de Nicolae.

El coche se detuvo y literalmente me tiraron al suelo de un empujón. Entre dos personas me llevaban sujeta por los brazos por un terreno un tanto pedregoso, haciéndome tambalear desorientada.

Oí una especie de botones que emitían una serie de ruidos electrónicos y seguimos caminando. El terreno pedregoso comenzó a ser uno liso y la temperatura me indicaba que estaba en un edificio. Los murmullos a mi alrededor eran incesantes y a veces, chocaba con gente que se cruzaba en nuestro camino.

Paramos en seco después de girar varias veces, haciéndome sentar de golpe en una silla. Comenzaron a atarme a ella con fuerza para evitar que saliera corriendo; aquello cada vez se estaba poniendo más siniestro.

Unas manos frías comenzaron a desatarme la cinta de mi boca y finalmente, la venda cayó al suelo.

No...no podía ser.....

-Rebeca...