I'M KINDA DOPE AFTER THE SERVICE

김삭진

Seúl, Corea del Sur; Martes, 5:00 AM

Ese dia se habia quedado haciendo guardia hasta esa hora, llegó a casa muy cansado. Sin cambiarse ni nada por el estilo se tiro a su cama y durmió las horas perdidas.

Despertó a la 1:15 PM tenía que estar en su trabajo a las 2:30 PM, ya tenia listo su almuerzo, no por más le decian Omma cuando estaba en un grupo.

El kimchi le habia quedado delicioso, se sintió orgulloso de si mismo, lavó los platos, cepillo sus dientes y tomó una ducha rápida. Sacó un uniforme limpio de su closet, tomo unos zapatos, su camisa y corbata. Metió a su maletín algunos dulces y chucherias ya que hoy tenía que atender niños y cuanto amaba a esos pequeños corazones de melocotón.

Ordenó su cama, metió a lavar la ropa del día anterior y se fue sin más.

…

Estaba en la estación de tren como todos los días y esperó unos minutos hasta que llego aquella maquina.

Una vez salieron varias personas de esta, entró y rápidamente localizó un asiento. Sacó sus audífonos color rosa que tanto atesoraba y escuchó un poco de música. Tenía de todo, rock, clasica, pop, hip hop, rap, baladas, etc. Estuvo escuchando varias de sus canciones favoritas la mitad del camino, hasta que sonó una que no recordaba tener ahí. Confundido, revisó el nombre de la canción para quedar en shock.

Era su primer Solo, Awake..

Se quedó pasmado por unos minutos mientras la canción sonaba en sus auriculares, habian pasado varios años desde la última vez que habia escuchado su canción y eso le trajo un sin fin de recuerdos.

Las largas horas practicando vocales, pedir hasta el cansancio más líneas, quedar exhausto por el fuerte entrenamiento de baile, la jodida dieta que tanto odiaba, cuidar de sus seis chicos, cuando le decian Omma Jin, cuando su perrito falleció, cuando ARMY los apoyó, cuando ganaron los premios, cuando BTS llego al tope mundial...

y cuando BTS se separó.

Algunas lágrimas salieron del que se hacía llamar mundialmente hermoso. Cerró los ojos y lentamente empezó a cantar SU canción. La voz le había cambiado un poco, pero aún así podía llegar a sus agudos de cuando era joven.

—wide awake.. wide awake.. no lie!

Maybe I.. can.. ¡never fly!

¡Jeogi jeo kkoccipdeulcheoreom!

¡Nalgael dan geotcheoreomeun! ¡an dwae! Yeah!

Maybe I.. can’t.. touch ¡the sky!

Geuraedo son ppeotgo sipeo..
Dallyeobogo sipeo.. jogeum deo...

Finalizó la canción, cuando abrió los ojos varias personas del tren le aplaudian, otras lloraban y algunos se le acercaron.

—Pensé que ya no vivía aquí en Corea Hyung-SeokJin—dijo un joven, de no más de 24 años, mientras hacía una reverencia—¿p-puede darme su autógrafo por favor?

El pelinegro se llevó una mano al rostro, tenía tantas ganas de llorar de pura felicidad. No podia creerlo, todavía habían personas que sabían de él.

Sonrió y firmó una foto que el chico le había dado, era él en una sesión fotográfica de cuando tenia su cabello color rosa. Se la entregó con una sonrisa mayor a la anterior, el joven estaba feliz y le pidió una selfie a la cual ni loco se negaría.

El tren se detuvo y las puertas se abrieron, se despidió del chico y tomo sus cosas para ir camino a su trabajo.

Se sentía tan feliz, demasiado feliz.

ARMY siempre estará conmigo pensó.

Un presentimiento se hizo presente en él, era extraño eso.. Pero sentía que sería algo muy bueno. Sin más entró al hospital para empezar su jornada laboral.

Y así empezó un día más en la vida del doctor Kim SeokJin.