¡¡BICHO RARO!!

capitulo 9. lo confieso ¡me gusta!

- llegamos- se escucho la voz de James y el radio dejo de sonar. Las dos amigas se habían metido tanto en sus pensamientos que ni se fijaron en el camino, ni cuando el jeep se detuve frente a casa.

Se bajaron y todos se fueron a sus respectivas habitaciones. Hope siguió a Kim, cuando entraron a la habitación, Kim entro a su baño y se cambio. Mientras tanto la pelirroja recorría el colorido cuarto de su amiga y tocaba la sabanas como si fuera la primera vez que viera unas y miraba curiosa los posters de grupos que en su vida había escuchado.

-lista- escucho la voz aguda de su amiga y volteo a ver. Estaba parada con unos shorts blancos, una blusa de tirantes roja con patrón de flores blancas y unas sandalias de plataforma color blanco, traía el uniforme echo bolas entre las manos y como era costumbre en ella lo aventó por ahí. -¿no quieres que te preste ropa?- le pregunto

-gracias- en ese momento no le importaba la ropa, solo quería quitarse ese uniforme que odiaba. Pero se arrepintió cuando su amiga le enseño su armario. Eran puras falditas y mini shorts y blusas de mil colores, formas y diseños. Kim busco rápido con la mirada y saco un short de mezclilla color vino y una playera blanca que antes era de su hermano.. -¿enserio?- pregunto al ver el short

-si anda póntelo- contesto son una sonrisa. La pelirroja asintió y entro al baño, salió vestida y con sus típicos converse negros.

Cuando ambas estuvieron cambiadas bajaron a comer. Donde ya las esperaban, los cuatros chicos también cambiados. El único que no las recibió con cara de pocos amigos fue James. Pero era normal ese chico socializa hasta con las piedras y no le importaba como fuera la gente. Nunca le decía que no a un amigo.

Se sentaron el los lugares disponibles que para su suerte. Hope quedo junto a Román y frente a su amiga que estaba entre Claire y James. Después de minutos apareció Mercedes con su típica sonrisa amable y empezó a servir la comida.

-oye pelirroja- dijo de pronto Román, la aludida lo volteo a ver con cara algo molesta -¿quieres ir al baile conmigo?-

-¿que?- Hope abrió los ojos como platos y lo miro. Kim y Claire se quedaron viendo la escena con la boca medio abierta de impresión

-me oíste- le dijo cortantemente

-¿porque?- le pregunto aun sorprendida. El chico volteo a ver a las primas que aun no salían de su asombro

-en primera por que Claire ya tiene pareja. En segunda porque no quiero ir con Megan. En tercera así podre molestar a esa toda la noche- Cuando dijo "esa" miro a Kim respectivamente -y en cuarta... porque con shorts no te ves tan fea-

-¿eso fue un cumplido?- pregunto sarcástica la pelirroja, el moreno le contesto con una de sus sonrisas, una que podría a cualquier chica a babear y eso paso con la dos primas.

-tómalo como quieras, rara-

-como sea... aunque me encantaría ya quede de ir con amigos, pregúntale a alguien mas-

-mi primera opción me dijo hoy que no- dijo Román con una sonrisa burlona y volteo a ver a Kim, quien también lo miraba con una cara entre sorprendida y confundida. Pero después de unos segundos desvió su mirada a su amiga de cabello rojo y ambas se dedicaron una mirada. Como si se pudieran comunicar por la mente.

Después de esa conversación siguieron comiendo. Los únicos que platicaban eran los tres hombres y Claire que decía algún comentario de vez en cuando. Al terminar se fueron parando y yendo. Claire se fue de compras con unas amigas y los tres hombres a jugar videojuegos.

Kim y Hope caminaron por el patio hasta que terminaron sentadas en la orilla de la alberca mojándose los pies y viendo al infinito.

-¿aun estas segura que fue Beck?- pregunto Hope a su amiga

-supongo- contesto esta encogiéndose de hombros

-enserio, podría ser Román-

-no, él no es... Román me odia- contesto. Hope la miro confundida, pues no entendía como podía estar tan segura, para ella el de la nota era obvio Román

-¿porque estas tan segura?-

-me trata del asco y no me quiere cerca... así o mas obvio. Me odia - le dijo volteándola a ver por primera vez y con un rastro en su voz de ¿tristeza?

-él te gusta ¿verdad?- la rubia volteo a ver el agua y asintió lentamente. Hope la abrazo para consolarla.

Mientras tanto en el cuatro de Leo.

James y Leo estaban parados con un control en la mano, jugando con el Wii del dueño de la habitación. Mientras Román estaba sentado en la cama y miraba concentrado la pantalla, esperando su turno.

-hey Román ¿te puedo hacer una pregunta?-

-pues ya que James- contesto. Ninguno de los dos despego su vista de la pantalla mientras hablaban

-¿que te traes con mi hermana?- esta pregunta lo tomo por sorpresa, pero no fue el único pues Leo puso toda su atención a la conversación.

-nada, solo me gusta molestarla- contesto encogiéndose de hombros

-no te creo-

-cree lo que quieras, me vale- le dijo Román que estaba comenzado a enojarse, por lo que mejor dejaron la conversación por la paz.

-¡gane!- exclamo Leo después de un par de minutos en silencio. Poco después el mas joven aviso que iría a su habitación rápido y salió dejando a Leo y Román solos.

El ultimo tomo rápido el control que el castaño había dejado e iniciaron una nueva partida.

-te conozco- Román miro confundido a su amigo -sé que te gusta mi prima-

-no... bueno es complicado- esta vez el que miro sin entender nada su amigo fue Leo -Dime superficial si quieres. Me gusta pero no se... odio su estilo y moda-

-sigo sin entender-

-es linda y agradable... solo que es algo ridícula . Tal vez si cambiara su forma de arreglarse...- mejor se callo al ver la cara de decepción que tenia Leo al oírlo. -olvídalo-

Estaba a punto de abrir la puerta y entrar a la habitación de su primo. Cuando lo escucho, e inevitablemente se enojo al oír la superficiales palabras del chico. Regreso a su habitación con las manos apretadas formando un puño y rechinando los dientes.

Cuando llego azoto la puerta y se tiro a su cama. Que ni se le ocurriera a Román lastimar a su hermana. Porque se las vería con el. Tal vez era demasiado protector con ella, tomando en cuenta que era el menor. Pero no permitiría que la lastimaran, pues así funcionaba su relación: peleaban muy seguido pero se protegían el uno al otro.