Cuando la persona que te prometió nunca dejarte lo hace tu vida ya no es igual. Las piezas de tu corazón ya no encajan y nunca llegas a encontrar la que te hace falta.
O donde Harry se engaña de amar a una chica y deja a su pequeño novio por ella.
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En algún momento la verdad siempre sale a relucir.
Harry ya no podía más, el creía amar a Ashley como para poder dejar a Louis. Pero algo todavía se sentía vivo dentro de él cuando veía al ojiazul.
Con Ashley y su madre recordándole día a día lo que era "bueno" para el, no le ayudaba a pensar claramente sobre el tema de Louis. Y lo mejor sería que lo dejara ir, no quería seguir lastimando al chico y que creyera que el rizado lo seguía amando como antes. Lo que pasara después ya no sería más su problema.
Estaba dispuesto hablaría a Louis y le diría todo, no quería seguir mintiendo.
Tomó sus llaves y cartera y salió rumbo a la casa del menor, pensaba en lo que le diría al chico. Pues sabía que Louis era muy sensible, pero no sabía que pronto sería padre. Cuando llegó a la casa de Louis se dio cuenta que no estaba solo, o bueno miro como ese rubio le daba un beso al castaño muy cerca de los labios apretó el volante y respiro para luego calmarse.
Vio como se iba y Louis entraba a su casa, ¿Louis se veía más rellenito, no?
Al llegar a la puerta, respiro hondo y profundo, tocó el timbre. No pasaron ni cinco minutos cuando Louis abrió la puerta sonriendo, pero al ver a Harry su sonrisa se borro.
—¿Se te ofrece algo? — preguntó cruzando los brazos Louis.
Auch. Eso había dolido.
—Necesitamos hablar. — respondió Harry seriamente.
Louis asintió, se aparto dejando que Harry entrará a su casa. Ambos chicos se sentaron tranquilamente en la sala Harry fue el primero en hablar.
—Creo que, ya no podemos seguir. — Louis abrió los ojos.
Pero no iba a llorar, ya lo hizo varias veces en su soledad y quería que así permanezca. Sabía que eso pasaría y por supuesto el entendería que si Harry ya no siente lo mismo, no lo va a retener. El no era así, el buscaba la felicidad de Harry y si su felicidad ya no es a su lado, lo aceptaría.
—Entiendo. — susurro Louis. Harry no se esperaba esa reacción.
—Conocí a alguien más, ella es buena. Y creo que me hace feliz. — dijo el rizado mirando a otro lado.
—Ashley. — Afirmó Louis. El mayor abrió los ojos.
El silencio se lo confirmó a Louis, respiro y soltó el aire. No podía estresarse por algo así, ahora le importaba más su bebé. Lo único que le quedaba de Harry.
—Espero y seas muy feliz. — se puso de pie Louis. Camino hacia la puerta y lo abrió—Puedes retirarte. — dijo mirando al ojiverde que aún seguían sin reaccionar.
—Lo siento. — comenzó a salir.
—No pidas disculpas, si no son sinceras. — Louis cerró la puerta.
Y se soltó a llorar ahora si, ya no tenia a su rizado. Tocó su vientre y sonrió con nostalgia. Aquello que crecía dentro de el fue producto de su primera vez.
—Seremos felices mi cielo. Ya lo veras. — hablo Louis.
[...]
Jay preparaba la cena para ella y Louis. El castaño no había salido de su habitación ni había comido en la tarde.
—Louis. Baja a cenar. — habló Jay tocando la puerta.
Un pequeño "ya voy" se escucho. Cuando la mujer había llegado encontró a su hijo llorando y con tristeza le relato lo sucedido. Pero no iba a dejar que Louis entrará en depresión no en su estado.
Louis bajo las escaleras con su pijama, sus ojos estaba hinchados y su nariz roja. Tomó su lugar en la mesa y se dispuso a comer en silencio.
—Hijo, mañana tienes cita con el doctor. — menciono Jay. —No podré ir. —
El castaño asintió. — Le diré a Luke que me acompañe. — respondió.
Y otra vez hubo silencio. Cuando acabaron fueron a dejar sus platos y se fueron a descansar.
El menor tomó su teléfono y marco el número de Luke. El rubio contestó.
—hola— hablo Louis.
"Hola Lou." hablo alegremente el rubio.
—¿Quería saber su podrías acompañarme a mi cita con el doctor?— mordió su uña Louis.
"Claro. Me encantaría" dijo alegremente Luke.
—Bueno. Te veo mañana a las doce. — respondió el menor.
Colgó el teléfono y sonrió. Luke era un amor, no lo iba a negar.
En los últimos días que Harry no estuvo el se la pasó con el todos los días. En la escuela y fuera de la escuela.
Y hablando de escuela. Ya no podía ir, Jay le dijo que no iría por el embarazo. La castaño lo ayudaría, pues ella trabajaba en un bufed de abogados muy importante en Londres.
Aun que este se había negado, Johanna le dijo que esa era la última palabra y así se haría. Puff madres.
Pinche Harold.
No quise colocar su reacción de louis como la colocan en otros fic. Quise que sea neutral y relajada pues como ahí lo dice le haría mal. ❤️
Tarde en publicar por que según yo ya tenía el capitulo pero no me gustó y lo volvía a escribir y a escribir y a así hasta que quedó.
