Detective y Ladrón

~• 20 •~

Robin.

Corrí hacia mi padre al verlo con una bebé en sus brazos. Al verla ya había quedado dormida,mirándolo en busca de respuesta este habló.

—Es ella.—quedé aliviado con tan solo saber eso.

—¿Cómo haremos que vuelva a la normalidad?—pregunté.

—Quizás nos tome un tiempo...mientras tanto no sería malo tenerla así por un tiempo.

—¡Genial! Paz sin ella...—dijo Nightwing que le arrebataba la bebe de mi padre.—Mírala nada más, parece imposible creer que esta cosa repulsiva, engreída y malcriada sea tan adorable.

Antes de volver a nuestros respectivos hogares.Por instinto miré a mi izquierda...buscando entre la oscuridad logré ver a ese gato,el mismo chico que salía en los periódicos con mi hermana.Me apetece matarlo...sé que él planeó algo en contra de ella.

Hoy no será la noche.

Lo dejé ir solo por una vez en mi vida lo haría. Subí al batimovil cargando a mi hermana—que había despertado por el sonido del motor.—parecía confusa y miraba su alrededor, comenzó a dar buenas bofetadas a mis brazos pero,como es pequeña y débil,no me hace daño.

  Comenzó a balbucear cosas sin sentidos hasta gritar de una manera espantosa.

—Estarás así por un tiempo.—le dije a mi hermana mientras agarraba su pequeña mano.

—Yo diría que es una ventaja de lidiar con uno menos.—la voz sería de mi padre hizo que me molestara un poco...cierto punto es bueno.

Así no tendría que estar vigilándola si salía con Logan o a ese niño castaño.

Narradora.

El primer día fue pésimo para Natalia siendo un bebé común y corriente.Le hizo la vida imposible a toda su familia e incluso a sus "hermanos" del orfanato. Ellos ya no podían soportar otro minuto más con ella, Bruce no parecía estar harto del problema, le parecía divertido.

—Alfred,iré a la empresa.—dijo Bruce mientras se llevaba a la niña en brazos al auto,Natalia parecía estar feliz,ya que, no estará encerrada en la casa con tres chicos sacados del orfanato.

Al empresario llegó a su destino con una pequeña sonrisa en su rostro.Algo imposible de creer, entró a aquellas puertas sin importancia alguna—claro con la bebé—todos los que trabajaban ahí quedaron boca abiertos, incluso las damas con las que una vez estuvieron con él por...interés, le hervía la sangre verlo con una criatura tan linda.

—Señor Bruce, todo ha sido éxito la semana pasada con la junta especial...a pesar que hubo unos inconvenientes.—informó la señorita que entraba a la oficina sin permiso alguno.

—Toque la puerta antes de entrar,señorita Hathnod.—regañó Bruce en un tono "amable".

—Vine a darle estos archivos.—ella ignoró por completo,solo entregó los papeles.—¿Cuánto tiene la niña?

Sabía que en el interior la mujer moría de ira y envidia. Si supiera quién es la perra afortunada de estar con el mismísimo Bruce Wayne.

Le cortaría la cabeza junto con la niña.

—Pronto tendrá su primer año.—mintió Bruce naturalmente,claro, no le dirá que su hija tiene en realidad trece años y se convirtió en un bebé por culpa de un villano.

•~•

Alex vigilaba la pequeña entre las ventanas de la gran empresa, permaneció escondido entre las aves que picaban y hacían sus necesidades ante aquella inmensa estatua de gárgola—que estaba localizada cerca de la empresa—

—Pss...pss.—hizo este mientras tocaba la ventana.

Natalia fue la única que miró, esta no parecía estar contenta con su presencia. La ojiazules miró el control de su padre,lo agarró oprimiendo algunos botones y finalmente abrió un poco la ventana.

—Iré a por los papeles ¿Podría quedarse con la niña?—preguntó el empresario.
—Claro que sí.—respondió la mujer con una amplia y falsa sonrisa.