14.

278 34 7
                                    


|Liam.

Estaba planeado que Zayn fuera secuestrado al día siguiente y la única idea razonable para salvarlo era que estuviera conmigo unos días, meses, años, lo que sea. Si él no hubiera aceptado, probablemente lo hubiera llevado a la fuerza a mi departamento. Y ahora venía la parte interesante; decirle al Sr. Clever que Zayn había desaparecido de la noche a la mañana sin dejar rastro y que nadie sabía en donde estaba.

Lo abracé aún más fuerte cuando se durmió. Habíamos hablado por casi dos horas cuando por fin se quedó dormido. Debería sentirme miserable por haberlo arrebatado de su familia, la escuela, pero no lo hacía. "Egoísta" me repetía a mí mismo con desprecio, esa era la palabra que mejor me describía. Aunque, en realidad me importaba un comino su familia, sus amigos, la maldita escuela, lo único que importaba era que Zayn estuviera a mi lado. Yo podía ser su máximo riesgo y a la vez su único refugio.

Dormí por pequeños momentos durante la noche, me despertaba cada pocos minutos para cerciorarme de que él seguía a mi lado. Unas horas más tarde, cuando el sol salió, volví a despertar. No tuve que voltear a mi lado para ver si Zayn seguía dormido junto a mí, ya que sentí su espalda contra la mía. Me giré y lo abracé; aspiré el dulce aroma de su cabello y suspiré profundamente. Él volteó de repente con una radiante sonrisa.

- ¿Qué haremos hoy? - Preguntó sin rastro alguno de sueño en su rostro.

- ¿Qué quieres hacer?

- Mmmm, ir a cualquier parte, quizás al parque, quizás a otra ciudad. - Genial. Apenas llevábamos juntos un día y Zayn ya quería que lo llevara a recorrer el mundo. Sin embargo, no podía culparlo.

- Después del desayuno hablamos sobre eso. - Besé su hombro y cerré los ojos.

- Liam, hay algo que no te he preguntado. - Dijo acomodándose en mi pecho.

- ¿Qué cosa? - Cuestioné con el cuerpo tenso y nervioso.

- ¿Cómo vamos a vivir juntos si ninguno de los dos tiene trabajo y además si tú ya dejaste de ir a la preparatoria? - Sabía que tarde o temprano Zayn terminaría preguntándome eso. Y aquí van las mentiras de nuevo.

- Digamos que tengo una gigantesca cuenta de ahorros en el banco y eso es por lo último que debes preocuparte. - Abrí los ojos de nuevo para darme cuenta de que me miraba confundido.

- ¿Tus padres te dan todo ese dinero? - Preguntó con inocencia. Zayn de verdad creía en mí, más de lo que debería.

- Sí. - Mentí.

...............

Después de intentar hacer el desayuno en el departamento, lo llevé a mi restaurante favorito para desayunar. Zayn no paro de reír en todo el camino sobre mi poca habilidad para cocinar. Y nos reímos aún más cuando notó que él tenía incluso menos habilidad que yo.

- ¿Crees que mi padre ya haya notado mi ausencia? - Me preguntó bajando la cabeza y jugando con sus manos.

- No quería que pensaras en eso, pero probablemente ya debe estar buscándote por todos lados. Sin embargo, este lugar es seguro y nunca le pasaría por la mente buscarte aquí - Dije intentando tranquilizarlo.

- Hasta ahora empiezo a sentirme mal por mi padre. - Confesó en voz baja.

- Velo como un pequeño descanso de tu pequeña familia, te divertirás un rato y después volverás a estar con tu padre. - De preferencia antes de que nos maten a los dos por intentar protegerte. Pensé asustado.

- Tienes razón. - Sus ojos mieles brillaron con emoción. - Me hace falta un poco de libertad. - Me miró de una manera que yo considere extremadamente provocativa. Le sonreí ocultando las ansias que sentía por besarlo.

- Debes tener en cuenta que no podemos pasar mucho tiempo fuera de un lugar seguro, tu padre - Y un grupo de secuestradores. - estará buscándote. Será mejor estar en lugares no tan públicos.

Salimos del restaurante y empezamos a caminar por las soleadas calles del vecindario.
Pasé mi brazo por sus hombros y Zayn me rodeó la espalda con uno de sus brazos

- No hubiera soportado estar lejos de ti.– Confesó con voz apenas audible. - No me arrepiento de haber escapado.

- Me alegra. Porque de otra manera te habría obligado a venir - Dije en tono de broma, a pesar de que era verdad.

Zayn rio y me abrazó débilmente. Ahora más que nunca, Zayn me necesitaba; haber escapado así después de toda una vida al lado de su padre, debía ser duro. Lo abracé de forma protectora y volví a contener mis ganas de besarlo. Si lo besaba cada vez que quería, él pensaría que yo era alguna clase de psicópata o acosador incapaz de mantener la cordura. Además, la gente miraría y lo que menos necesitábamos es a alguien que enfocara su a tención en nosotros.

..............


Pasamos todo el día fuera del departamento. Lo cual se supone que debería estar prácticamente prohibido. Pero cuando Zayn decía "de verdad quiero ir a..." o "¿Por favor podemos ir a..." o peor aún, cuando utilizaba su cara de súplica, simplemente no podía decirle que no. Haría lo que fuera para poder distraerlo.

Zayn disfrutaba de estar saliendo casi por primera vez, mientras yo miraba cada lugar con detenimiento. En busca de alguien que pudiera estar siguiéndonos, o cualquier estupidez que representara peligro para mi chico. De vez en cuando él se detenía y solo me besaba cortamente. Sabía justo en que momento detenerse, justo en el momento que yo empezaba a enloquecer. Después del cine, lo convencí de regresar a casa. Cuando abrí la puerta, Zayn corrió al sillón y se aventó en él, cayendo entre los almohadones. Sonreí al verlo tan cansado, eso no se veía muy seguido. Su energía parecía nunca terminar. Me senté en la pequeña mesa que estaba frente al sillón y lo miré aun sonriendo como estúpido enamorado. Zayn comenzó a mirarme con confusión hasta que decidió hablar.

- ¿Podrías besarme? - Me preguntó inseguro. Eso era lo que había esperado todo el maldito día.

No pude formular ninguna frase, me acerqué a él con decisión y tomé su rostro entre mis manos. Lo besé sin decir nada más. Puso sus manos en mis hombros y me atrajo hacia él.
Apoyé mi cuerpo contra el suyo lentamente y pasé mi mano por su cadera; sintiendo el calor corporal de su cuerpo traspasar la tela de su polera gris. No pude recordar la última vez que nos habíamos besado de esa manera, todos sus sentidos estaban concentrados en mí.

Acarició mi cabello suavemente y me adueñé completamente de sus labios, como si necesitaba hacerle saber que él era mío y de nadie más. Toqué su abdomen por debajo de la polera; tocando sus definidos músculos con mis ásperas manos, sentí como Zayn temblaba un poco entre mis brazos. Pero en vez de detenerme, lo besé incluso con más fuerza.
Llegué a un punto en el cual, deberme no era una opción. Era tan feliz, sus caricias me hacían olvidar los problemas al menos por unos segundos.

Dejé de besarlo, a lo que él me miró conmocionado. Sus ojos brillaban y le daban un aspecto misterioso. Acarició mi espalda suavemente, eran como pequeñas caricias de mariposa y fue cuando me di cuenta de que lo deseaba tanto, que apenas podía pensar en otra cosa. Bajé mis labios a su cuello y fue cuando todo se volvió desenfrenado. Me sorprendí cuando intentó quitarme la camiseta, lo ayudé quitándomela yo mismo y la aventé al piso. Lo miré una vez más, Zayn estaba dispuesta a todo, pero me observaba con la inocencia que la caracterizaba.
Maldición, ¿Y que estaba haciendo yo? Aprovechándome de ello. Me había prometido a mí mismo que no intentaría pasarme de listo con él mientras durara su estancia. Me separé bruscamente.

- Estás cansado. - Afirmé con la voz ronca.

- ¿Lo estoy? - Preguntó sonriendo con diversión a pesar de que su voz se escuchaba agitada.

- Vamos a dormir. - Me acerqué a él y lo tomé en brazos.

Se acomodó en mi pecho y cerró los ojos. En cuanto estuvimos en la cama, Zayn cayó en un profundo sueño. Esa noche, tenía que ver al Sr. Clever. Lo tenía todo perfectamente planeado. La parte difícil era que tendría que dejar a Zayn solo por unas horas para ir a la bodega. Me vestí y regresé de nuevo a la habitación. Él estaba tan cansado que despertaría hasta tarde. Lo miré por un momento, acaricié su brazo, me di la vuelta y salí de la habitación.

Dangerous & Perfect (Ziam) AdaptaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora