[POV normal]
Black entró al gimnasio sin preocuparse si sus acompañantes seguían detrás de él. Al cruzar por la puerta vio que la fiesta ya estaba acabando, pues, Yellow, Ruby y Crys estaban limpiando un poco lo que era el desastre que estaba seguro antes de salir no había, Silver y Green llevaban a una alegre Blue y un inconsciente Red a las habitaciones que había en el establecimiento. Dia y Platinum retiraban los platos de la mesa y Pearl se dirigía donde él.
—Black, que bueno que llegan, íbamos a repartir habitaciones—miró detrás de él desconcertado. — ¿y tú compañera?
—Está detrás de...—al girar notó la ausencia de su querida compañera de región quedando intrigado. —¿White? ¿Gold? —llamó, pero no recibió ninguna respuesta. —¡White! —exclamó haciendo que su preocupación aflore recorriendo todo su ser. Sin dudarlo un segundo salió corriendo en la dirección que había tomado anteriormente.
—¡Black, espera! —exclamó Pearl llamando la atención del resto quienes se acercaron preocupados.
—¿Qué sucedió, Pearl? —preguntó Ruby observando a su kohai con el rostro afligido.
—No lo sé, pero esto no me da buena espina. —confesó para luego dirigirse por donde se había perdido Black.
Ruby salió del gimnasio acompañado de Crys. —Quédense aquí, nosotros iremos con Pearl—respondió la chica recibiendo una respuesta afirmativa por parte de los chicos. —Tranquilos, no debe ser nada grave.
[~*~]
[Gold]
Esto está mal.
No debería ser así.
¿Es por la maldición?
No creo que esto pasaría en una situación normal, ¿no?
Definitivamente no.
—Tranquilita, o a tu amiga no le irá muy bien que digamos—dijo el hombre que arrastró a White al callejón y que ahora uno de sus compañeros la tenía con una mano en su boca y con la otra le sujetaba las manos. White me observaba con miedo, tratando de mantener el control. En cambió yo me encuentro maquinando infinitas ideas de cómo salir de esta.
Demonios. Demonios. Demonios.
Si tuviese mi palo de billar hubiese ideado un plan perfecto para salvar a White. Llevo mi mano derecha lentamente hacia mi cinturón para liberar a Ataro, pero de pronto siento una mano sujetando mi muñeca y en un segundo estoy contra la pared. Por la fuerza del impacto dejé escapar un gemido de dolor escuchando a la vez quejidos de White tratando de zafarse en hombre.
—Dije, tranquila—el hombre que hablaba era alto, fornido, pero no tanto como los otros dos, tenía canas y un tatuaje en su brazo izquierdo. —Con esta castaña estaremos bien, no parece ser de aquí, se venderá bien.
Pánico. Todo mi cuerpo alimentado por el pánico y es peor al ver el rostro de White que con las palabras del sujeto comienza a soltar lágrimas empapando la mano de su captor.
—¡White! —se escucha la voz de Black a poca distancia del callejón a lo que White comienza a forcejear más y a producir más quejidos. —¡White!
Abrí mi boca, pero el sujeto detrás de mi golpeó mi cabeza con la pared logrando que me mareara y que perdiera las palabras para que nos ayudaran. Cuando me di cuenta estábamos en el fondo del callejón ocultos gracias a la oscuridad, noté a White dormida aun en manos del secuaz y yo siendo atada, solo que al recuperar la conciencia logré alejar las ataduras, el gusto me duró poco, pues me volvieron a tomar de las manos.
—¿Qu-qué le hiciste? —pregunté casi en un hilo de voz aun un poco mareado.
—Cloroformo, aunque una formula especial hecha con somníferos de Gloom, para cuando despierte ya estará en otra región y tú quizás no con tanta suerte—el sujeto sonrió con malicia sacando una pistola de su cinturón. —Sujétala bien. —ordenó al mi captor quien me sometió colocando mis manos en mi espalda y haciendo que me arrodillara. El que sujeto al mando se acercó hasta poner el arma en mi frente. —Mándale mis saludos a Giratina.
Demonios.
¿Cómo es que las cosas, que de por sí ya estaban torcidas, se torcieron aún más? Toda esta situación es tan fuera de lugar que para cuando termine de procesarlo, ya estaré muerto, pero es lo menos importante, ¿Qué sucederá con White? No quiero que nada le pase, pero en estos momentos soy inútil.
—Muere.
Crys...
Cerré los ojos esperando una bala que perforara mi cabeza, pero nunca llegó, lo que el destino me mandó fue un campeón de Unova con los huevos suficientes para mandarle un puñetazo a alguien armado. No morí, pero el tipo si disparó logrando alcanzar mi hombro derecho. Solté un alarido de dolor, pero aproveché la confusión para soltarme del agarre del grandulón que recién noto que es calvo, nervioso, pero con decisión le pateó la entrepierna lo más fuerte que puedo logrando doblegarlo.
Lo siguiente pasa rápido.
Siento la adrenalina en mi cuerpo. Tomo un pedazo de fierro del suelo y con fuerzo lo golpeo en la espalda dejándolo fuera de combate. Me di la vuelta encontrándome con Black en un forcejeo con el tipo del tatuaje en el brazo. Trato de acercarme, siento mi respiración acelerada, pero veo como el otro compañero se llevaba a White en su hombro afuera del callejón donde había una camioneta blanca esperándolos.
Tragué grueso. Miré a Black, luego a White, cuando miré nuevamente a Black este me miró fijamente asintiendo a lo que le correspondo. Comienzo a correr tomando una poke ball de mi bolsillo y arrojándola al aire dejando salir a Ataro quien rápidamente atacó con una de sus colas al captor de White.
Este tambaleó un poco dejándolo desorientado lo suficiente para que Ataro le diera otro golpe en la quijada y pudiera llegar yo a darlo con el fierro en la espalda logrando que cayese y soltara a la castaña. La tomé entre mis brazos notándola profundamente dormida. El dolor de mi hombro se fue incrementando hasta el punto de ser insoportable y no resistir más mi peso sobre mis piernas desplomándome sobre la pared.
El otro cómplice que se encontraba en el auto salió apuntándome con un arma. Mierda. Siento detrás de mí como arrojan a Black al suelo. —Es suficiente, todos se irán al infierno.
Sentía como mi sangre brotaba de mi herida manchando la pared y como mi corazón retumbaba en mis oídos. Me sentía muy cansado, como si estuviese flotando, como si fuese un sueño, en verdad espero que sea un sueño, por Arceus, como lo espero.
Escuché la bala siendo disparada y comencé a tener miedo, pero no llegó a mí, supuse que le dispararon a Black y el miedo se transformó en pánico. Cerré los ojos y todo se silenció.
—¡GOLD!
.
.
.
.
.
Chan, CHAN, ¡CHAN!
Por Arceus, que intenso todo, ¿Qué les ha parecido?
La verdad es que esta escena estaba planeada desde el inicio, pero con un tono más fuerte y sin los chicos de Unova. Quería darles un poco más de protagonismo y ¡voila!
cofcofydepasoagregaragencyshippingcofcof
¿A quien le habrán disparado? ¿Alguien morirá? ¿Habrán más capítulos intensos? ¿Gold estará aprendiendo la lección?
Pareciera que no me centrara en eso, pero si, si lo hago xD
Espero que les haya gustado, nos leemos a la próxima :D
~Hikari Miu~
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Lección por aprender // Pokémon Special
Fanfiction¡La fiesta de Red por su cumpleaños! Los DexHolders estuvieron un buen tiempo preparándola, incluso invitaron a los chicos de Unova, pero como no todo es perfecto algo desafortunado tuvo que suceder. ¿Pero qué a sucedido? ¿Quién es esa chica de cabe...