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Nunca en mi vida pensé que ir en bicicleta a la escuela sería lo más increíble, puedes visualizar todo, personas despidiéndose de su pareja y separando su camino, los vendedores, niños felices por ir a la escuela y contándole a su madre que sueños tuvieron por la noche.

Llegué a la universidad, pocos iban con bicicleta, la mayoría llevaba auto.
De pronto un motociclista pasó rozandome e hizo que casi me cayera, le grité ¡Idiota! Me hizo una señal obscena y se fue al estacionamiento.
Encadene la bicicleta y me fui directo al salón.

— Hola amigo, que carita de susto tienes, tranquilo no iba a faltar el primer día.

— Eres un idiota Fernando ¿ Dónde están Esteban y Sebastián?

— Vienen en camino, creo se les hizo tarde ya sabes lo mismo de siempre — Esteban y Sebastián son mis otros dos mejores amigos, los 4 hemos sido amigos desde la preparatoria y nunca dejamos de hablarnos.

Llegó el profesor de Historia de la Arquitectura y a su pasó llegaron mis amigos, con una mirada que yo conocía, algo tramaban.

— ¿Saben quién es la chica nueva?, Preguntamos en qué salón iría y dicen que la van a integrar aquí.

— Ay Esteban que tarde te llegan los chismes yo fui por ella

— ¿Y cómo es? ¿Tiene novio? ¿Es sexy?

— Sebastián cálmate, sabemos que ustedes dos nunca han salido con nadie pero dudo mucho que ella se fije en ustedes. — el profesor nos miró y nos hizo guardar silencio, busqué a Raquel y no se encontraba, toda la clase pensé en ella, en qué haría para tenerla contenta ¿ Es así como se debe amar a alguien?.

Terminó la clase y tuvimos una hora libre, el profesor de matemáticas 3 no vino, así que nos fuimos a la cafetería donde la mayoría de la escuela estaban.

— ¿Alguno ha visto a Raquel?

— No amigo y ahora no me interesa, Isabel no entró a la primera clase

— ¿Quién es Isabel? La chica de intercambio, cierto.

Mis amigos se sentaron en una banca para desayunar y hablar de nuestras vacaciones pero alguien de lejos saludo a Fernando, todos voltearon a ver a esa chica, la mayoría de los que estaban cerca la miraban y ella lo gozaba.

Su cabello es cobrizo, piel muy clara, ojos color miel, estatura promedio pero su cuerpo era... Puff distinto a las mujeres de aquí, no es delgado,es llenita no exagerado solo tenía mucha carne en las piernas, su trasero y una cintura pequeña.Un cuerpo muy llamativo, pechos grandes pero no exagerados, llevaba puesto una blusa blanca muy pegada y de botones un pantalón negro super pegado que le hacían notar mucho mejor su figura.

— Hola Fer, que terrible fue no entrar a la primera clase. Si no me safo de él subdirector que se quedó mirando mis pechos por más de una hora y coquetear conmigo ahora mismo estaría arriba del escritorio.

— Hola Isabel, bueno es que te dije que así no vinieras pero fue tu culpa. Ellos son Sebastián, Esteban y Elliot.

Sebastián y Esteban no dejaban de mirar a Isabel, y eran tan obvios que ella lo notó

— Veo que a ustedes les hace falta estar con una mujer. Lo que ven es grasa, de la buen claro, si algún día estamos libres nos la pasaremos muy bien juntos— me miró a mi, su mirada atractiva me dejó helado, sin que decir.

— Ah... Hola yo soy el idiota de la mañana, lamento mucho haberte casi matado. Si estaremos juntos deberás acostumbrarte a mi personalidad, no soy como todas las chicas de aquí y se darán cuenta. En fin tengo que irme, debo hablar con el profesor y hacer nuevos amigos ustedes entienden.

Todo O Nada Donde viven las historias. Descúbrelo ahora