Mirame sólo a mí.

33 .- 9-1-1

POV ZACHARY.

(Tres meses después)

—¡¡Harry, es el ganador!! —Anunció una pelirroja.

Me quité el casco y bajé de la motocicleta.

—Buen trabajó. —Logan se acercó a mí juntó con el imbécil de Marcó. Aún no me creó que aceptará venir a una carrera ilegal.

—Es hora de la fiesta. —Gritó Marcó.

(....)

Me encontraba bebiendo, rodeado de unas diez chicas. Una de ellas tenía las manos en mi cuello trataba de besarme, yo me empiné la cerveza que tenía en la mano.

—Eres demasiado guapo. —Decía una.

—Sus ojos son hermosos. —Comentó otra.

No sé cuántos botes he tomado, sólo veo que Marco me hace señas para que vaya con él. Me levantó y caminó hasta él. Me extiende una botella de tequila. La cogí y le di un gran tragó, las cosas se comenzaron a salir de control. Marco no paró de darme tequila. Perdí algunos de mis cinco sentidos, todo era muy feliz yo sentía que flotaba.

—¡¡Harry!! —Logan me llamaba. —Creó que te tengo que contar algo. —asentí. —Hace un mes... —Hizo una pausa y después continuó. —Recueradas a tu unicornio.

—Saito. —Dije ebrio y sonreí como estúpido.

— Yo vi a tu unicornio salir de un hotel con Marcó . —Mi corazón dejo de latir. Mi sangre comenzó a hervir. Se me bajo la borrachera en ese instante. Con la mirada busqué a Marco camine hasta él y de un golpe lo derribe.

—¡Maldita sea! —Grité. —¡¡Cómo te atreviste a acostarte con mi novia!! —volví a golpearlo, se levantó y se defendió, me lanzo unos golpes uno de ellos me dio en la mandíbula y me derribó.

—Ya te enteraste. —Dijo cínico. —Ella es buenísima en la cama. —Se relamio los labios, patee su pierna y este cayó al suelo, me abalance sobre él y comienzo a golpearlo.

—Te mataré maldita sea. — siento que alguien trata se separarme pero yo lo golpeó.

—A ella le encanta cuando le doy duró. — Cuando menos lo espero resivo un golpe el cual abre mi labio, siento como la sangre sale de mis fosas nasales. Marco esta sobre mi golpeandome, en un movimiento desesperado golpeó mi cabeza con la suya, mierda duele, Marcó caí de espaldas y ahora me colocó a horcajadas golpeandolo, un golpe en el estómago hace que él escupa sangre.

—¡Detenganse! —Escuchaba gritar a Logan.

—¡Es tu fin imbécil! —Grité y me levanté, tome una botella. —¡Levantate y pelea!

Marcó se levantó y se limpió la sangre de la nariz. Tomó una silla y trató de golpearme, le golpee la cabeza con la maldita botella, pero este me dio un madrazo con la silla, ambos caímos al suelo.

—Eres un maldito marica. —Escuchó decir a Marcó mientras escupe sangre. Eso me da fuerzas y logró ponerme de pié, cogí lo primero que alcancé era un maldito cable.

—¡¡Basta!! —Logan me coge del brazo. —Lo vas a matar.. —Suelto el cable y salgo de ese lugar. Voy hasta donde aparque la moto y miró mi brazo. 27/05/98. La fecha de nacimiento de Saito. Mis ojos se inundan subo a la motocicleta y acelere lo más que pude en realidad no me importaba morir, la odio maldita sea, ella me engañó, un recuerdo atraviesa mi cabeza.

FLASHBACK.

— Me encanta esto. —Saito me tomó de la mano.

—A mí me encantas tú. —la miré a los ojos.

—¡TE AMO ZACHARY! —Saito gritaba como loca.

—¡YO TAMBIÉN TE AMO ISVETH! —Grité juntó con ella. —Isveth..

—Dime Zachary. —Sus ojos azules me miraron con suma atención.

—¿Quieres ser.... —me armó de valor. —mi novia?

—Claro que siii.. —Me llenó de besos.

—Tú me quieres matar de diabotas. —sonreí y ella soltó una carcajada.

—Zachary, prometo que te voy a ser fiel toda mi vida, sabes ¿por qué? —me miró a los ojos. —porque te amo, no quiero perderte.

—Nunca me perderás. —Puse uno de sus mechones detrás de su oreja.

—¿Lo prometes Zachary? —Ella levantó su meñique.

—¡Lo prometo Isveth! —con mi meñique estreche el suyo.

—Entonces "Mirame sólo a mí".

—Tienes mi palabra. —besé sus hermosos labios.

—Y tú la mía.

FIN DEL FLASHBACK.

El sonido de un claxón me sacó ese recuerdo, mis ojos se llenaron de lágrimas, sentía esa sensación de nuevo, la misma que sentí cuando maté a mi familia, irá, rencor y dolor. Como pude llegué a la casa de Saito. Tiré la motocicleta y corrí hasta la puerta. Toqué como loco la puerta, pero nadien abrió. Perdí la paciencia, de una patada rompí la puerta, la casa estaba echa un ascó. Más de quince botellas estaban en el suelo, había cocaína en la mesa. ¡Oh no!. Subí corriendo las escaleras, en el corredor estaba ella tirada en un charco de sangre. Me ahogue en lágrimas.

—¡Saito! —Me arrodilló y tomó su cabeza. —Mi amor... despierta. —Saito no hacia ningún ruido, se estaba desangrado. Tomé mi teléfono y llamé al 9-1-1.

LLAMADA TELEFÓNICA.

— 9-1-1, ¿Cuál es su emergencia?

—Mi novia. —Sollozo. —Por favor ayúdeme, mi novia trató de suicidarse.

—Mantenga la calma, ¿sabé la dirección?

—San Francisco No. 30.

—Enviaremos una ambulancia.

FIN DE LA LLAMADA TELEFÓNICA.

Después de eso me desvanecí y caí al lado de Saito.