In Between [Larry Stylinson]

Capítulo 5

Ocho días más tarde...

Golpes fuertes y muy seguidos se escucharon en la puerta de la entrada de casa, seguidos del sonido del timbre repetidamente. Me levanté del sofá extrañado y caminé hacia la puerta abriéndola.

-¿Se puede saber qué es lo que te pasa por la cabeza? -Me empujó entrando en casa y cerrando la puerta tras él. Lo miré algo asustado además de sorprendido. La persona que menos me esperaba ver en un tiempo largo era la misma que me estaba gritando en mi casa. Irónico. -Harry, contéstame. -Continuó gritando haciéndome reaccionar a la situación.

-¿De qué hablas? -Contesté tranquilo. Aún me dolía la cabeza de la resaca por ayer, aunque este dolor empezaba a ser normal cada día. -Cálmate un poco, Louis.

-Que me calme?! -Louis se acercó a mí empujándome contra la puerta, ya que no nos habíamos movido de ahí durante todo el rato. -¿Como se te ha podido ocurrir hacer eso? ¿Sabes en el lío que nos has metido ahora? ¡Supéralo ya, joder! -Intenté procesar por unos segundos sus palabras. Esta vez no me sentía dolido, sino cabreado.

-¿Eres un idiota, lo sabías? -Louis abrió sus ojos sin estar acostumbrado a mis enfados. -¿Crees que puedes presentarte en mi casa y ponerte a gritarme de esa forma? -Esta vez lo empujé a él, dejando mi dedo índice en su pecho. -Estoy harto de tu actitud, Louis. -Me acerqué más a él, mirándole desde arriba. No dijo nada, pero no apartó su mirada. -No puedes enfadarte por todo lo que hago. No es mi culpa si estás celoso de todas las personas con las que estoy. -Louis alzó sus cejas atónito por haberle sacado ese tema.

-No estoy celoso. -Susurró muy cerca de mí.

-Mentira. -Susurré yo esta vez. Y en cuestión de segundos, se avalanzó sobre mí rozando sus labios con los míos demostrando toda la necesidad y el sentimiento reprimido de estos últimos años.

24 horas antes.

Le dí un trago a la cerveza que tenía en la mesa mientras Mitch me contaba la pasada noche con sus amigos.

-Deberías haber venido -Me dijo acusandome con la mirada.

-Ya, lo siento. No fue un buen día para mí, necesitaba estar solo. -Le contesté desanimado.

-Lo sé pequeño, no te preocupes. Pero a la próxima no te me escapas. -Contestó mientras ponía una sonrisa traviesa.
Le sonreí nervioso. Mi móvil vibró seguido de mi tono de llamada. Era Ashton, le hice un gesto con la mano a Mitch disculpándome y contesté.

-¡Tu qué! ¿no me contestas ni los mensajes ya? -Me dijo bromeando.

-¡Hola! Lo siento, estaba con gente y después se me olvidó contestarte.-Me disculpé.
-¿Podrías quedar ahora? tendríamos que seguir la conversación que dejamos a medias y estoy cerca de tu casa, me tienes un poco preocupado Harry... -Realmente sonaba preocupado, así que acepté.

-Vale, yo estoy en un bar con Mitch cerca de casa, ¿Quieres que vayamos a cenar a algún sitio? -Pregunté mientras pensaba donde poder ir.
-Genial, mándame la ubicación y te vengo a buscar. Hasta ahora. -Colgó.

-Era Ashton. -Le dije a Mitch, tenemos un tema pendiente del que hablar... -Dije mientras apoyaba mi cabeza en mi mano con un gesto cansado. -Ahora viene a buscarme para comer.
-Oohh ¿Me abandonas? -Contestó haciendo pucheros bromeando.

-Lo siento, Mitch. -Le sonreí acariciando su mano, que estaba sobre la mesa. -Llevamos quedando desde que nos conocemos, no te puedes quejar. -Reímos ambos. La vibración de mi móvil hizo que dejara de mirar a Mitch para centrarme en el móvil. Un mensaje de Ashton: "Estoy fuera. xx". -Debo irme. -Me levanté a la vez que Mitch asentía. Me acerqué a él cogiendo de nuevo su mano y besé sus labios. Cuando me separé de él me sonrió. Ambos salimos del local y vi a Ashton mirándome alzando una ceja.