Mariposas

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Narra Michael:

— Recuérdame porqué estamos aquí en lugar de ir a mi casa o a la tuya — molesta. No fue nada fácil convencerlo, y ahora, casi en la puerta del lugar decide molestar ¿Realmente le cuesta mucho acompañarme?

— Eso es simple — respondo, no voy a dejarlo cumplir su objetivo, y no borraré esta sonrisa de mi rostro — porque te lo pedí, y porque accediste a hacerlo — respondo sencillamente— además porque se supone que eres mi amigo, y porque... quiero que la conozcas

— Ah, sí claro — fastidia — y olvidaste decir que vengo  solo en caso de que ella no esté aquí

— Vamos Frank — digo, no logra molestarme. Mariposas revolotean en mi estómago, y no soy capaz de eliminar mi gran sonrisa de mi rostro. Tiemblo un poco, pero es por los nervios, ¿Qué me pasa? No me pone nervioso el estar al frente de miles de personas, y aun así no puedo evitar ponerme nervioso por verla

— Tú primero — dice haciendo un ademán, entro primero sin discutirlo, y comienzo a buscarla con la mirada, o más bien lo intento ya que mi manager presente no me lo permite, Por favor Frank, ya te lo expliqué, déjame buscarla—¿Dónde nos sentamos Mike? Vamos, guíame yo te sigo

— ¿Qué te parece? — pregunto mientras guío el camino a una mesa que se encuentra junto a la ventana — ¿No te parece lindo? ¿Mágico?

— Sí— dice mirando a todos lados, mira cada cuadro y las mesas — es lindo... agradable. Me agrada el concepto

— ¿Ves? — digo sonriendo — te lo dije; es hermosa

— Pero a ella todavía no la he visto, no puedo estar de acuerdo tan pronto— dice y comienza a reírse burlonamente, inmediatamente siento el ardor en mis mejillas, y toco mi nariz — Aww se avergonzó

     No respondo, solo continuo buscando desesperadamente mientras que el ardor disminuye. No la encuentro por ningún lado. Ya hemos llegado a la mesa. Normalmente viene a esta hora estos días. Me pareció raro no verla en la barra, pero pensé que tal vez podría estar sentada con alguien más, o sola en una mesa, pero no lo está. Comienzo a temblar más, y la sonrisa se me borra poco a poco al no  lograr encontrarla. Busco incluso del otro lado del lugar, del otro lado de la barra, pero no hay la mas mínima muestra de su presciencia. Calma Michael, me digo a mí mismo, tal vez solo está en el baño, o no ha llegado. Aunque tampoco le avisé que vendría, bueno lo intenté

— Michael — me despierta la voz de Frank — ¿No la encuentras verdad? Te quedaste ahí parado mirando el lugar, y, tu sonrisa ya no está en su lugar

— No — respondo más para mí mismo que para él — ella debe de estar por aquí, o va a llegar pronto... ya verás — tomo asiento enfrente suyo, y trato de no mirarlo, no puedo hacerlo, es como si se regocijara con a noticia. Porqué te pones así Michael, Sabías que era muy probable que no la encontraras — Sí, pero no quise pensarlo, no quise creerlo— me digo a mí mismo. Me siento patético, infantil; ¿desde cuando me pongo así por alguien?
Siento el ardor en mis ojos, avisándome que las lagrimas se encuentran impacientes por hacer su entrada. Tomo mis lentes de sol que están colgados en mi bolsillo y me los pongo para ocultar mi tristeza como normalmente lo hago. Debo esconder el estado de mis ojos, mi expresión. Me ha dado tan duro no verla, el no verla riendo en su silla, radiante como la primera vez que la vi, y con  esa sonrisa... esa sonrisa que le da sentido a mi vida. Que tan ridículo he de verme, casi llorando por una persona que apenas conozco, y por una que probablemente se ha olvidado de mí.
         Durante las últimas semanas no he logrado sacarla de mi cabeza, no he logrado pensar en otra cosa más que en la primera vez que la vi, y en como la pude haber decepcionado al no llamarla, en lo que pudo haber pensado. Me dolía pensar que le cruzara por la cabeza que la había olvidado, o que había sido algo de unos días y ya, pero me dolía más pensar que mientras ella vivía en mi mente, yo no lograra cruzar por la suya. Y aquí me encuentro hoy, tratando de arreglarlo, de demostrarle que me importa, pero ella no está aquí.

Michael Jackson| Mi Otra MitadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora