Love Cameron

12. Curando homosexualidad.

Después de la una de la mañana, decidí que era muy tarde para intentar dormirme de nuevo. Había pasado mucho tiempo de la noche pensando en todo, dando vueltas en la cama, esperando a que todo mejorara.

Encendí mi teléfono, el cual inundó la oscuridad de mi cuarto con un poco de luz de su pantalla. No había ninguna notificación nueva y mis padres no se habían conectado en linea desde ayer.

Así que descarté la posibilidad de que Max le haya contado a mis padres, pero aún así. En mi, sucedía una batalla interna.

¿Era posible curar la homosexualidad? Es decir, más allá de las creencias religiosas, no creo que sea posible.

Me mordí el labio, pensando en si es buena idea o no intentarlo. Me.convencí a mi mismo de que lo era, de todas formas no perdía nada mas que tiempo.

Abrí el buscador, pensé en que teclear. Nunca había buscado algo así, pero me decidí por "Test del gay". Pulsé la tecla de buscar, y empezaron a salir unos portales uno debajo de otro, sobre preguntas para determinar si eras homosexual o no.

Escogí el primero y cuando lo pulsé Crookpie llegó a mi cama en busca de caricias, lo cual respondí acariciando levemente su cabeza.

La pagina se abrió y mostró una serie de preguntas, las cuales iba respondiendo con toda sinceridad. Conforme avanzaba, me iba dando cuenta de que el test, está basado en el estúpido prototipo de gay "escandalosa".

Es decir, la mitad de las preguntas eran de maquillaje, y la otra mitad de famosos buenos. Antes de terminar el test, me di cuenta de que este, no me podría dar una respuesta certera.

Lo cerré y antes de intentar encontrar otro, me salí de esa búsqueda. Cancelé lo que había buscado y lo reemplacé por "como excitarse con chicas siendo gay" pulsé la tecla de buscar.

Salieron a hacerse escuchar muchas voces y opiniones, una pagina debajo de otro que daban cada uno su opinión de este tema. Al entrar a ciertas paginas, la mayoría de los consejos consistían en aceptar quien eres y que estés con quien te gusta.

Y por ahora, eso no era una opción. Bajé hasta una de las ultimas partes y noté que había una pagina que me llamaba la atención, entré.

Era de un chico que había escrito un articulo sobre este tema y decía, en resumen, que te debes concentrar en lo que consideras bonito de esa chica.

Me puse en el buscador de nuevo, y busqué porno con chicas. Al darle "buscar" se recopilaron muchas fotos de mujeres desnudas en diferentes posiciones.

Miré un par de ellas, esperando a que alguna me pusiera. Seleccioné una de una mujer desnuda con las piernas abiertas, la miré, esperando a sentir algo.

Me intenté concentrar en lo mas bonito de esa mujer, pero me di cuenta de algo. Al ver a ese gran numero de mujeres, no siento nada, sexualmente hablando.

Esperaba poder sentir una atracción sexual hacía alguna de ellas, pero simplemente no era posible para mi. Intenté poder crear un sentimiento hacia ellas, pero eso no era mas que un sentimiento vacío.

Cerré esa ventana, quitando esa bochornosa recopilación y miré la hora, había pasado mas de una hora desde que empecé a buscar.

Suspiré, decidido a llegar a una decidida conclusión esta noche. Tecleé "como curar homosexualidad", busqué y, nuevamente, se recopilaron un montón de opiniones sobre la cura a la homosexualidad.

Al releer los títulos me di cuenta de que decía cada uno, algunos decían que tal cura no existía, otras decían que no se habían inventado, otros decían que la homosexualidad se crea por la forma de criar y se puede curar a través de terapia y la opinión religiosa decía que todo era obra del demonio y que era necesario un exorcismo.

Me froté las sienes intentando apaciguar el dolor de cabeza que había surgido. Estaba muy cansado, es decir, no había dormido muy bien por las recientes fiestas a las cuales e asistido, y ahora que podía dormir toda la noche, no tengo sueño.

Mis ojos se sentían cansados de tragar la luz del teléfono en la oscuridad por tanto tiempo.

Tal vez pueda hablar con una persona religiosa sobre este tema, necesitaba cualquier tipo de ayuda, y no podía permitirme pagar una terapeuta.

Entonces recordé que en mi clase hay una chica que tiene un grupo de religión ¿Como se llamaba? Nina.

Nina era una muy devota católica que era hija de pastores. Pensé en tener una conversación con ella sobre este tema, después de todo, ella era la chica mas conectada a la religión que conocía.

Devolví mi mirada al celular, pensando en cual seria mi siguiente búsqueda. Y un pensamiento llegó a mi mente, uno que me picaba la curiosidad.

Pensé en bajarme una aplicación de chats entre homosexuales, se que existían, pero nunca me atreví a entrar en una.

Es decir, ya había comprobado que era homosexual, no sentía ningún tipo de atracción romántica por las chicas. Pero aun así, debatía en mi interior si hacerlo.

Pensé que solo me tomaría unos minutos en hacerlo, y ya había llegado lo bastante lejos como para ingresar en uno de esos chats. No perdía nada.

Así que me puse en el buscador, preguntando por la aplicación y me aparecieron varias opciones de donde elegir. Definitivamente había mas de una, es decir, sabia que existían un par, pero no estaba enterado de este mundo de aplicaciones.

Instalé la primera de todas, la cual era la mas popular. Entré y la aplicación me pidió que obligatoriamente llenara las preguntas de correo electrónico, nombre de usuario, y foto de perfil.

Lo rellené todos, enmascarando lo mas posible algún dato sobre mi, y en cuanto a la foto, solo puse una foto de un chico con la cara recortada de internet.

Al tener todo listo, la aplicación te va enseñando usuarios en línea y tu debes decidir si te gusta o no. Si te gusta, le das a un botón que te llevará a un chat con el.

Pasé a alguno de los usuarios porque la mayoría se veían mayores y los otros no parecían agradables y ya. Hasta que llegué a el perfil de un chico, que parecía joven y amigable.

Hola
-Cameron

Hola
¿Como estas?
-Desconocido

Bien y ¿tu?
-Cameron

Caliente, te ves bien en esa foto
¿Que llevas puesto?
-Desconocido

Suspiré, algo decepcionado. Cerré la conversación, me salí de la cuenta y borré la aplicación del teléfono.

Dejé caer el teléfono y apreté mi cara contra mi almohada, era algo infantil esperar a que hubiese alguien decente en estas aplicaciones, pero aun así creí que lo habría.

Me obligué a cerrar los ojos y pensar en lo sucedido. Había llegado a conclusiones que ya sabia desde antes de esta noche.

Lo que significa que solo perdí mi tiempo. Aunque, pensándolo bien, cuando llegue a la escuela, hablaría con Nina para ver si tiene alguna respuesta.

Apreté mis ojos y hundí mi cara aún mas en la almohada. Me obligué a no pensar en nada hasta simplemente quedarme dormido.