FRAGANCIA DE AMBROSIA

CAPITULO XV: ABRIENDO EL CAMINO AL PODER

Cuando Yan Da despertó, se encontró muy cerca a Lian Tian Ji de ella, en la noche el se había dormido a su lado, quedando sus rostros muy pegados, podían sentir su respiración tranquila rozándole los labios.

Esta sensación le era muy familiar, los días que había pasado con Shi se había despertado muchas veces entre sus brazos con su rostro pegado al de ella, sintiendo su respiración en sus labios que la incitaban a besarlo como saludo de buenos días.

Su corazón latió muy rápido al mirar a Li Tian Ji muy cerca de ella, no podía ser cierto, por la reacción de su corazón le estaba diciendo que sentía algo por este hombre, recién lo había conocido un día, aparte ella estaba enamorada de su esposo lo amaba mucho, no era cierto debía estar confundida por como se comporto anoche él consolándola de su dolor, pero había algo que no podía negar que el tenía algo que le gustaba, además tenía cierto parecido con su esposo, ambos eran tan diferentes entre sí Shi era dulce, calmado era como la tranquilidad de un sueño, en cambio Li Tian Ji era osado, demandante y muy confiado de si mismo, pero había momentos en que al mirar a Li Tian Ji a los ojos, veía los ojos de su esposo cuando eran tan dorados, la mayoría de ellos cuando se estaban entregando el uno al otro, en esos momentos Shi también era osado, demandante, quería y pedía todo de ella, podía recordar para siempre esos hermosos ojos tan parecidos a los de Li Tian Ji.

Estaba loca debía sacarse ese pensamiento de la cabeza, Li Tian Ji no era parecido a su Shi, el no se le comparaba en nada, debía recordar para que estaba aquí, con ese pensamiento en mente se levantó rápidamente despertando al hombre que estaba dormido a su lado.

- ¿Qué hora es?, le pregunto Li Tian Ji levantandose.

- Es hora que nos alimentemos y estemos listos para entrenar a Shi, le respondió Yan Da.

- De acuerdo linda princesita, creo que debería ir a casar le respondió Li Tian Ji.

- Yo iré, quédate aquí. Respondió Yan Da. Empezando a caminar al bosque.

- Mi amada princesa, siempre es hermoso verte dormir a mi lado, dijo para sí Li Tian Ji. Empezando a estirarse.

Al cabo de media hora Yan Da regreso con lo que había cazado y recolectado, se encontró con Li Tian Ji descansado con los ojos cerrados apoyado en el árbol.

- Aquí está, lo que pude cazar son dos aves de agua miel y traje frutas, Li Tian Ji las empezó a preparar para que las pudieran comer, ambos comían en silencio.

Yan Da termino su ave, pasándole las frutas entre ellas había moras.

- Son moras, desde hoy se convirtieron en mis frutos favoritos, dijo alegremente Li Tian Ji.

Ella lo vio conmocionada, Shi había dicho lo mismo al día siguiente de su noche de bodas cuando comió el pastel que le había preparado.

"Estos frutos son moras, desde hoy se convirtieron en mis frutos favoritos" había exclamado felizmente su esposo.

Li Tian Ji chasqueo sus dedos en frente de su cara haciéndola despertar de sus pensamientos.

- ¿En que mundo te perdiste dulce princesa?, le pregunto Li Tian Ji acercándose a sus labios.

Yan Da se sintió sonrojar al ver sus labios tan cerca.

Li Tian Ji empezó acercarse más a ella, como para besarla, Yan Da sabía que debía quitar su rostro o retroceder, pero algo no la dejaba, cuando lo sintió respirar encima de sus labios, escucho la voz de su pequeño príncipe llamándola ¡Hermana mayor!, Hermana mayor! Donde estás gritaba Shi, ella empujo a Li Tian Ji, parándose en el acto.