Capítulo 2

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Pasó una semana más en Konoha, Naruto había continuado con su agotadora rutina de hacer misiones sin descansar. Ya casi se estaba acostumbrando, casi empezaba a parecerse a un zombi. A veces se preguntaba si habría mucha diferencia entre lo que él hacia ahora y los ninjas que estaban bajo las ordenes de Danzo.

Cuando llegó al despacho de Sasuke también estaba allí Shizune. La chica a veces se pasaba por allí para ayudar en lo que pudiese al joven Hokage. Después de todo tenía mucha experiencia en todo aquello tras todos los cuatro años al servicio de la Quinta.

- Buenos días Naruto. - Dijo la chica sonriendo, siempre le había tenido mucho aprecio.

- Buenos días Shizune-Neechan - Dijo Naruto forzando una sonrisa, no tenía motivos para ser desagradable con ella. Realmente sabía que tampoco tenía motivos para ser desagradable con nadie.

Naruto miro a Sasuke y lo vio más serio que de costumbre, a pesar de la situación no pudo evitar pensar que su próxima misión sería realmente importante.

- ¿Qué ocurre? - Preguntó Naruto muy perspicaz para variar.

- La misión de hoy es muy importante. - Dijo Sasuke corroborando las sospechas de Naruto. - Tendrás que llevar dos cartas a Suna, para Gaara.

- ¿Ya está? ¿Por qué no envías aves mensajeras? - Naruto sentía su habilidad insultada por segundos.

- No podemos, Kumogakure lleva una semana interceptando nuestro correo con Suna. Tienen todas las rutas cubiertas, no podemos utilizar la mensajería. - Ahora Naruto entendía porque Sasuke estaba tan serio.

- ¿Y por qué diablos hacen eso? - Preguntó Naruto molesto con los ninjas de la nube. - Que más les da...

- En Kumo... no están muy contentos con Konoha. - Dijo Shizune interviniendo. - Ya sabes que el Raikage quería la cabeza de Sasuke... y tampoco se han tomado muy bien que no solo no se lo hayamos entregado... sino que además se haya convertido en... - Shizune medito un poco las palabras para no herir a Naruto. - Bueno ya me entiendes.

- Su hermano está vivo ¿No? Pues que se aguante. ¿Vamos a tener una guerra ahora por esto? - Preguntó Naruto molesto.

- No sé si será una guerra. - Dijo Sasuke ahora. - Pero están interesados y probablemente asustados con nuestra relación con Suna, nuestro correo no tiene nada que ver con ellos. Pero no podemos perder la comunicación estas cartas son importantes.

Naruto se quedó unos segundos pensando en su misión, parecía realmente importante. Muchas veces se había planteado marcharse de Konoha como hiciera su maestro Jiraiya en el pasado. Quizás más adelante, ahora mismo sabía que Konoha le necesitaba más que nunca. Da igual que fuese desde las sombras, sacrificaría su vida por la villa que amaba.

- Esta bien, partiré enseguida. - Dijo Naruto muy serio.

- Espera. - Le detuvo Sasuke. - En esta misión no iras solo, necesitaras un ninja sensor y médico. Te enfrentaras a varios Chunin y algún Jonin de Kumo después de todo. Además, habrá trampas y emboscadas preparadas.

- ¿Tres miembros? Hacía tiempo que no tenía un equipo tan grande.

- No tendrás dos compañeros, solo uno. - Dijo Shizune mirando a Naruto. - ¡Adelante! - Gritó después la morena.

Naruto se giró hacia la puerta, al abrirse pudo ver entrando por ella una chica de 18 años, como él. Era pelirroja y tenía también los ojos de color rojo, era un color de ojos extraño pero bonito. Llevaba unas gafas negras y mediría quince centímetros menos que el rubio.

La Familia UzumakiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora