🚢Tyler Down🚢

1.8K 49 1
                                    


      Por fin había llegado el momento. Mía primeras vacaciones sin mi familia. Y era en un crucero. La película del Titanic me había dejado algo asustada, pero dejaré de lado ese absurdo temor y disfrutaré.

     Por dentro y por fuera era realmente elegante, obviamente las personas no vestían trajes de gala, o vestidos.

      Me instalé en mi habitación correspondiente. Todo era tal y como me lo imaginé, tal vez mejor.

    Decidí explorar un poco todo, con curiosidad y resolviendo pequeñas dudas. Me dirijo al bufete, y tomo un pequeño bocadillo de chocolate y dulce de leche.

       Al girarme, choco estrepitosamente con alguien. Un chico. Toda su camiseta celeste manchada en chocolate, y mi blusa con el merengue de su pastelito.

—¡Lo siento tanto!, no me fijé— le pido disculpas.

—Tampoco me fijé. Descuida— me sonríe con tranquilidad —¿Estas bien?.

—Claro, tampoco era mi blusa preferida.

—Todo bien.

—Dime, ¿nos conocemos de algún lado? Creería que si.

    Y era cierto, su rostro me parecía familiar. Quizá lo vi en la tienda de mis padres, o antes de abordar en el crucero.

—¡Claro!, tu nombre es ____. Vamos al mismo instituto— resuelve mi duda
—Soy Tyler, el fotógrafo.

—¿El que acosa a todos para tomar fotos que van directo al anuario?.

—Ese mismo.

—Si, ahora te recuerdo— digo entre risas —¿Vienes con tu familia?.

—Con mi primo, solo vine para tomar fotos— responde él —¿Tú?.

—Sola— venga, saca un tema —¿Te gusta mucho la fotografía?.

—¡La adoro!— exclama, de inmediato noto un rubor —De hecho, salí de mi cuarto para fotografiar algunas cosas.

      Este chico no podía ser más lindo. Sus rizos me encantan, y su tono de hablar tan dulce. ¿Cómo no le hablé antes?.

—Disculpa esta pregunta pero... ¿te gustaría ser mi musa?.

—Suena interesante. Vamos.

—Perfecto. Gracias.

      Nos sonreímos mutuamente, y nos ponemos manos a la obra. La primer foto fue tomada en una fuente cerca del gran comedor.

    La siguiente nos costó más, debía ponerme de puntillas sobre esta y simular ser algo así como una bailarina.

   La tercera la tomó sobre un barandal en el cual debía apoyarme.

    Llegamos a la décima foto, y la ultima. Al menos por hoy dijo el. Me diverti, bromeaba mucho para que, según el, mi sonrisa se viera más real.

—Cuando casi caes al agua de la fuente, esa sin duda fue la mejor parte.

—Y no olvidemos cuando chocaste contra aquel muro.

—O cuando aquel pájaro casi-

—¡Oh calla!.

     Volvemos a reír. Llegamos a mi cuarto, entramos y nos sentamos en el sofá a mirar todas las fotos, nos reíamos de las que sacó mal, o yo había salido mal.

    Me animo a recostar mi cabeza en su pecho. Lo siento inseguro, pero luego de un rato envuelve su brazo en mi hombro.

—Me diverti hoy, ¿Sabes?— le susurro.

—Y yo igual.

      Siento su mirada en mi, levanto mi cabeza y confirmé aquella sensación. Veo que acerca su rostro al mio y poco al poco cierra sus ojos.

    Hace mucho que no hago esto, y no lo espere hoy, parecía algo vergonzoso e inseguro de hacerlo o no.

     Finalmente junto nuestros labios.

—Lo siento, no se porque lo hice, pero... suena estúpido, me pareces muy linda y...

—Me pareces muy lindo también. Disfruté ese beso.

    Fue poco tiempo el que estuvimos en aquella sesión de besos suaves. No podia evitarlo, pero fui yo quien comenzó el beso más apasionado.

    Sin dudarlo moví su camiseta de su lugar. Me miró sorprendido.

—Tú... ¿quieres esto?.

—Sí,  ¿y tú?— sin esperar mucho asiente con la cabeza.

     Ahora es Tyler quien se anima a besarme. Desprende los botones de mi blusa y la saca. Nos dirigimos a la cama con besos y caricias.

     Sus movimientos eran algo torpes. No estaba experimentado, sin duda era su primera vez.

     Saco mi falda que llega justamente a mis rodillas, y mis zapatillas. El termina de desnudarse igual.

    Veo su notable erección, estaba igual de excitado que yo, y notaba que lo quería. Igual que yo.

    Lleva sus manos hacia mi espalda, intentando desabrochar el sostén, pero no podía. 

—¿P-puedes hacerlo tú?, no entiendo su mecanismo.

—Tan inocente, Tyler.

     Se separa un poco de mi y espera a que yo lo haga. Mira embobado, con sus mejillas muy rojas y con una leve sonrisa.

    Procede por quitarse lo único que lo alejaba de la completa desnudez.

    Se posiciona entre mis piernas, y se inclina hacia mi. Me sostengo de sus hombros, y hago que se sienta seguro.

—Puedes hacerlo, Tyler. Sin miedo.

—B-B-bien.

     Lo hace, lentamente. Desprende un gemido de mis labios, el gime en un tono más bajo.

     Lo hacía con amabilidad, hasta que finalmente comenzábamos a excitarnos más, y a hacer más frecuentes los gemidos.

      Me sentía rara, lo había conocido hace menos de tres o cuatro horas, pero me hizo sentir más de mil bonitas sensaciones.  De seguro el se sentía raro, alguien que conoció hace poco le quitó la virginidad.

    Las embestidas eran más rápidas.

—A-ah, Tyler.

    Me aferré más a él, llegando incluso a rasguñarle.

— _-___ —gime cerca de mi cuello.

     Y llegamos al orgasmo. Acaricio un rato su cabello mientras da unas últimas embestidas antes de tirarse rendido a mi lado.

—Eso fue... grandioso— susurra.

—Sin dudas, Tyler— me giro y lo abrazo.

—Te quiero, y te conozco hace poco.

—Me pasa lo mismo— río —También te quiero.


One-Shots 13 reasons why?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora