Él era una bomba de tiempo, que en algún momento iba a explotar por todas las cosas que se guardaba para el mismo.
Ganadora tercer lugar HuntedAwards18.
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Faltan un día para el cumpleaños de Harry, todo sigue igual a como ha estado en estos meses. No sé que hacer al respecto, parece que por dos pasos que damos hacia delante, damos tres atrás. Pero decido dejar todos esos pensamientos negativos y deprimentes a un lado y armarme de valor para poder llamarle.
Tengo el regalo de cumpleaños listo desde hace un tiempo. Estaba un día revisando todas las fotos que tengo en la memoria personal de mi cámara cuando encontré que tenía más de cincuenta fotos mías con Harry o solamente Harry. Es sencillo, lo sé pero creo que será un gesto más personal que podrá gustarle más que algo comprado... lo conozco.
Me siento en el sillón del departamento, con mi pijama puesto. Tomo aire y desbloqueo mi celular ¿Desde cuándo que tenemos una relación tengo miedo de hablarle? Desde que se arruinó por la distancia.
Aprieto llamar antes de que me arrepienta. Me llevo mi celular hasta mi oreja para poder escuchar los pitidos, pero lo único que escucho es como mi corazón late como si quisiera salirse de mi cuerpo. Tenía la garganta hecha un nudo y las manos comenzaron a temblarme.
-¿Amber? -Escucho su voz del otro lado del celular.
-Sí. -Muerdo mi labio nerviosa.
-¿Qué pasa cariño? - Mi corazón late más rápido que antes al escucharlo llamarme cariño. Dios, lo extraño más que nunca.
-Te llamaba para -Pauso, aclaro mi garganta. - preguntarte algo.
-Claro, dime. -Responde con seguridad.
-¿Vendras a casa por tu cumpleaños?
-Mmmm, no lo creo. La banda me hará una fiesta y hay mucho trabajo. -Murmuró apenado. Las ganas de llorar aparecieron. -¿Quieres venir?
-Ya no puedo faltar más al trabajo por ahora. -La vista se me nubló y sabia lo que seguiría. -¿Sabes? Tengo que irme. Tara me esta llamando, tengo que colgar.
-Oh, esta bien. Te amo.
-Yo a ti.
Colgué rapidamente. Tara ni siquiera estaba en el departamento, todos los viernes en la tarde salía con Liam. Unas cuantas lagrimas rodaron por mis ojos. Quería que pasáramos un día importante juntos, despertar juntos, prepararle el desayuno y comer en la cama, ir a almorzar a un lugar especial, hacer algo que nos guste hacer como ir a patinar sobre hielo e irnos al departamento. Pero... creo que no se podrá.
(...)
Los rayos de sol atravesaron por las cortinas de mi cuarto. Traté de moverme para esquivar el sol de mi cara, pero algo me lo impedía. Abrí mis ojos asustada ante la sensación de algo tomando mi cintura. Bajé mi vista para ver unos brazos tatuados abrazando mi cintura. ¿Qué demonios? Vi una vez más los brazos y mi corazón se detuvo.
-¡Mierda! -Salté, quedándome sentada.
Vi a Harry acostado en mi cama, vistiendo unos jeans oscuros, una playera azul marina y sus botas. Se despertó alarmado, volteando a verme. Tenía mis manos cubriendo mi boca abierta. ¿Estaba soñando? ¿De verdad estaba aquí? ¿Después de tanto tiempo?
