Tiempo Tardé (1#CB)

Parte 79

Mansión Agreste

Sábado 9 de Abril del 2016

08:00

Al llegar a mi casa, mi padre estaba en la puerta con una pipa en su boca.

Fue inevitable recordar que años atrás fui a verlos a escondidas de Marcos y él tenía la misma pipa en la boca.

—Hola papá.

Él sonrió y nos abrazamos.

—Pasa hijo, seguro estás cansado.

Entré a mi casa, mi hogar.

—A decir verdad bastante pero prefiero hablar contigo.

—¿Sobre? –Me preguntó frunciendo el ceño.

—Sobre lo que me soltaste cuando te atendí.

Él se rió un poco.

Nos fuimos al living. Nos sentamos sobre los sofás.

—Hace tiempo lo se, años a decir verdad. Solías llegar tarde a casa cuando empezaste la preparatoria. Un día iba a pedirte algo y justo te vi saliendo por la ventana transformado en Chat Noir, aunque para mi siempre eres Catman. Después de eso no volví a preguntar cuando volvías tarde, la televisión me avisaba por donde andabas.

Se rió.

—Sabes papá, tengo algo que contarte.

—¿Sobre qué?

—Te acuerdas de Marcos –Él asintió serio– él era Hawk Moth.

Él soltó su pipa, sentí que cayó en cámara lenta.

—¿Cómo? ¿No-No se había muerto?

Asentí serio también.

—Está muerto, sin embargo, su alma no logró el descanso eterno. Él fue quien hirió gravemente a Bridgette y luego intentó atacarnos a todos en el hospital. Pero fui más rápido y le clavé su propio báculo en el pecho. Salió el akuma, pero sin los poderes de Ladybug no pudimos purificarlo.

—¿Eso quieres decir que es posible que regrese?

—Así es papá. Pero ya estaremos preparados.

Él sólo miro al suelo resignado.

—Hay que seguir luchando, por ellas. Por los que murieron en sus manos y porque no vamos a dejar que nos siga arruinando la vida.

Me levanté del sofá, él hizo lo mismo.

—Tienes razón hijo, hay que seguir luchando.

Nos volvimos a abrazar, no podía cansarme de sentir el calor paternal que me transmitía.

—A la tarde quiero llevar a Adrián a un lugar de juegos llamados "Láser Tag", con Bridgette y su hermana organizamos un cumpleaños sorpresa.

—Está bien hijo. Tienen permiso. Pero descansa un poco, no creo que no haber dormido en toda la noche sea bueno para ti.

—Eso haré papá, hablame para el almuerzo.

Él asintió.

—Gracias por todo papá.

—Gracias a ti hijo, tu también nos cuidas. Tal como se lo prometimos a mamá.

Era la primera vez que la nombraba luego de lo que pasó.

—Invitala a la abuela a almorzar. Hace un tiempo no la vemos.

—Yo la llamó, tu descansa.

Me fui a mi habitación.

Estaba muy cansado.

Feliz.

Por fin feliz.

Pero eso no quitaba todo el agotamiento mental y físico que llevaba encima.

Más tarde te volvería a ver...

Quería hacer algo por ti...

★★★