El Chico Raro I - LUKEZEL

♡ 47 | El pasado ♡

47

-Somos nuestro propio demonio y hacemos de este mundo nuestro propio infierno.

-Oscar Wilde

Narra Zedd

Mierda. Mierda. Mierda.

Era verdad, mis recuerdos me habían fallado, como había podido olvidar que Bastián tenía un escondite, pero aun así eso no nos decía mucho, si podría estar ahí, pero era de uno en un millón.

Teníamos algo más seguro que eso. Teníamos a Katlyn.

-necesito que me describan el último lugar en el que vieron a Luke- susurro ella-

-En una fábrica abandona- contesto Kate-

Me perdí en el rostro preocupado de Kate, ella no se merecía nada de esto, con las pocas fuerzas que me quedaban me prometí que después de esto me alejaría de ella, eso era mejor que verla con mi mejor amigo, de no poder acercarme a ella como yo quería, de querer besarla pero no poder. Siempre habían estado esos sentimientos en mi, ocultos.

La tomé de la mano y la apreté con cariño. Ella había sido muy fuerte, demasiado. Alguien normal se hubiera rendido, se hubiera vuelto loca ante la idea, pero ella no.

Por eso y más tenía que dejarla ir.

-Lo encontraremos- le sonreí y ella a mi-

No puedes forzar a alguien a quererte, Kate había hecho su elección y yo no quería su compasión y eso era lo que estaba recibiendo.

-Es una fábrica abandonada, está entre Hilton y Palace, han pasado 6 horas aproximadamente desde que lo vimos- suspire- es importante que lo encontremos-

- Y lo haremos Zedd, no te preocupes- me animo katlyn-

De pronto Katlyn extendió un mapa de la ciudad sobre la mesa.

-No pensaras en hacer eso- estaba preocupado por mi amigo, pero usar demonios para encontrar su alma era algo extremo- ¿verdad? -

-Hare lo necesario para encontrarlo, ¿no quieres eso Kate? - sabia la respuesta, pero ella no sabía a qué costo lo haría, Katlyn le daría un pedazo de su alma a un demonio para que así pudieran encontrar la de Luke-

Kate sintió y empezó el rito.

De una pequeña bolsa saco una piedra de meteorito y la deposito sobre el mapa, yo sabía todo el ritual, pero nunca lo había hecho, no quería que ningún estúpido demonio me quitará parte de mí, aunque sabía que eso no me mataría.

Posteriormente comenzó una oración.

-Todos cerraremos los ojos, el demonio no le gustan los espectadores, ni mucho menos los mirones-

- ¿Demonio?- pregunto Kate- pero...

-No todos están en cuerpos humanos, unos otros asustan con solo mirarlos- comenzó a hablar Katlyn- ahora todos cerraremos los ojos-

Y obedecimos.

-Demonio te ofrezco mi alma para encontrar a mi amigo, te intercambio un pedazo por la de él...- suspiro- necesitamos de tu ayuda, debes de aparecer ahora-