help to me - meglo

twelfth.

Me levante por el ruido de las ollas en la cocina, pase la mano por mi cara y me estire un poco, Milo no estaba a mi lado y mi madre aún no llegaba, entonces ella no podría estar haciendo ese ruido.

Me puse mis zapatos y al comenzar a bajar las escaleras había velas y pequeñas rosas alrededor, en la mesa había una foto de Milo y mia, no la habíamos tomado esa noche en el parque. El comedor estaba decorado con flores y corazones, no entendía qué pasaba.

Vi al chico castaño salir de la cocina con una lasagna de carne acompañada de unos crepes de pollo, mi comida favorita, el acomodo dos platos, era para nosotros dos o eso creía yo.

-Un poco dañaste mi sorpresa. -dijo sarcásticamente mostrando la comida y la decoración.

Me tiré sobre él y lo abrace super fuerte, el correspondio a mi abrazo. Levante mi cabeza y observe sus ojos color miel brillar con la luz de las velas, se veía tan perfecto, hasta que mi estómago comenzó a gruñir por el hambre, ambos comenzamos a reír.

Milo tomó mi mano y sacó la silla me senté y él se sentó al frente mío, tomó un cuchillo y comenzó a servir la lasagna me paso un plato con esta. Se levantó y sacó de la nevera unas malteadas que había hecho.

Comencé a probar la comida y estaba deliciosa, a parte de ser lindo también era cocinero, admito que me enamore más, pero trate de no ser evidente, no quería que me viera como la loca que gustaba de él.

Tenía mi mano sobre la mesa y Milo puso la suya sobre la mía, yo le sonreí. En ese momento llamaron a la puerta, me disculpe con Milo y me levanté de la mesa, pensé que era mi madre, pero me equivoque.

Abrí la puerta y lo primero que vi fue a James con un ramo de rosas y un peluche gigante, también llegó con una serenata. A parte de todo podía oler que había tomado alcohol.

-Qué haces aquí JAMES? -le grité. Estaba furiosa de que no entendiera que no quería nada con él.

-TE AMO LYA, T-TE AMO.-decía embriagado sin poder casi hablar.

Al fondo de las palabras entre James y yo se escuchaba la serenata, voltee a ver a Milo y este ya estaba enojado, subió por sus cosas a mi habitación y salió de mi casa sin despedirse, salió furioso, lo notaba en su cara.

Le pegué una cachetada a James, ya me tenía hasta la coronilla con sus declaraciones después de lo que me hizo.

-Cuando captaras que me dejaste de gustar? QUE FUISTE EL MAYOR ERROR EN MI VIDA. Eres lo peor, cuando entenderás que me fallaste cuando más te necesitaba, te acostaste con alguien en nuestro aniversario James, ME ENGAÑASTE - le grité a lo que derramaba algunas lágrimas y golpeaba su pecho.

Hice que James se alejara de mi casa, un auto llegó a recogerlo no podía observar bien quien era, pero al final me fije que era la rubia Valery, presentía algo muy malo contra mi de parte de ellos.

Cerré la puerta y subí corriendo a buscar mi saco y mi bolso, eche mi celular, mi cartera y la foto que Milo me había regalado de nosotros, tome las llaves de la casa y salí a buscar a Milo a la calle.

Camine por varios senderos buscando al chico, pero no lo encontraba por ningún lado, me dirigí a nuestro parque favorito podría asegurar que estaba ahí. Al llegar me encontré con un chico con audífonos, se notaba que estaba llorando, me acerque y afirme que era Milo.

Me agache frente a él, con mi mano seque algunas de sus lágrimas, también derramé algunas. Nos abrazamos por un buen rato, Milo estaba captando lo mucho que me gustaba y que solo lo necesitaba a él y no a nadie más.

Saque la foto de mi bolso y se la entregue, Milo sonrió y me abrazo super fuerte mientras me daba pequeños besitos.

-Te quiero junto a mi siempre.- tome su mano fuerte y lo mire.