thirty-sixth.

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Milo me tomo de la mano para salir al balcón del lugar, tapó mis ojos con sus manos mientras susurraba a mi oído.

-Está no es la ultima sorpresa de la noche.

Lo decía entre risas y también oía su voz nerviosa, me encantaba hasta que también empece a reír con el.

Me hizo bajar unas escaleras y eso indicaba que iríamos al mini salón del lugar, era un espacio pequeño pero muy lindo.

Milo quito sus manos de mis ojos y me sonrió para mostrarme el lugar.

Habían velas y una luz color rojo que ambientaba el lugar, al entrar habían globos que colgaban del techo, estaban acompañados de todas nuestras fotos.

No entendía por que me había hecho todo esto, no era una fecha especial o bueno, eso creía yo.

-Feliz día, te amo muchísimo.

A mi mente llego que hoy estábamos cumpliendo meses de que somos novios.

Tomé un suspiro, lo había olvidado por completo, me sentía horrible en ese momento.

Milo me tomo mi mejilla, mientras que me miraba sonriendo, le importaba cinco que se me hubiera olvidado que hoy era nuestro día.

-No pasa nada, estuviste muy ocupada por todo lo de mi viaje y no tuviste tiempo de recordar, lo único que importa es nosotros.

Me sentí bien con Milo, había una pequeña mesa decorada con comida y pequeñas cartas.

Nos sentamos y comenzamos a hablar sobre nosotros, sobre nuestro futuro, una pregunta que rondaba en mi cabeza salio.

-Que será de nosotros cuando te vayas? Todo acabará?

El silencio inundó el lugar, Milo tomo mis manos y me miró fijamente, sus ojos se aguaron, estaba a punto de llorar.

-Nunca en la vida quiero perderte, por mi te llevaría a Francia junto a mi, que mas quisiera yo pero no será posible, solo se que estoy seguro de que no dejaré morir este amor por ti.

La última frase la dijo con la voz frágil, comenzó a llorar desesperadamente, estaba sufriendo, estábamos sufriendo.

Me levanté de mi silla para abrazar a Milo, fue un abrazo largo, ambos estábamos llorando.

Le daba pequeños besitos a Milo en toda su cara pero no funcionaba, me senté en sus piernas he hice que se recostara en mi pecho.

Acariciaba su cabello, mientras de su boca salían frases como.

-Lya no me quiero ir, no te quiero dejar. Te amo tanto, tanto.

Mi corazón se partía en mil pedacitos, no quería dejarlo partir pero era lo mejor, era su futuro.

No sabia que hacer para que el se calmará, en mi mente rondaba la melodía de someday.

Me acerqué a su oído y comencé a susurrar la letra de la canción.

Milo acariciaba mis manos mientras me acompañaba con la letra de la canción, había parado de llorar y eso me calmaba.

Tomé su mano y salimos al jardín, la música del salón grande llegaba hasta donde estábamos nosotros, comenzamos a bailar lento, estábamos abrazados bailando al ritmo de la canción.

Mi teléfono comenzó a sonar, era Lauren, le pedí perdón a Milo y conteste.

-Lya subí rápido, van a premiar a la pareja de la noche.

Colgué el teléfono y le pregunte si subíamos o nos quedábamos acá, el afirmó que subieramos, recogimos todas nuestras fotos y los globos y subimos.

Al entrar al lugar todo estaba oscuro, la luz nos enfocó y escuché a James hablar en el micrófono.

-Quiero que reciban a la mejor pareja de toda la escuela, quienes luchan y lucharán por su amor. Lya y Milo los amo.

Las luces se encendieron y todos nos estaban aplaudiendo Valery grababa todo.

Milo tomo mi mano y solo sonreía y me decía lo feliz que le hacía que fuéramos novios.

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