nineth.

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La clase termino y Milo alistó sus cosas, se levantó y se quedó esperándome en la puerta del salón. Me levanté, guardé todo y tomé el vaso que me había traído Milo aún tenía un poco de jugo, me despedí de Valery y cuando estaba a punto de salir, sentí a James tomarme del brazo.

—No piensas saludarme, preciosa. —dijo satíricamente.

—No me toques o grito. —lo amenace.

El me soltó del brazo y me envió un beso, sentí repudio. Al salir no encontré a Milo en la puerta, quizás él había visto todo lo de James. Fui a la cafetería para ver si estaba ahí y si, estaba ahí con la rubia, estaban un poco cariñosos, sonrisita para aquí, sonrisita para allá, admito que tenía celos.

Me acerque a ellos para sentarme en la mesa, al sentarme la rubia rodó los ojos por que había interrumpido su conversación, no era mi intención, bueno, quizás un poco si. Valery se levantó con rabia, le dio un beso en la mejilla a Milo con el que ambos sonrieron, estaba que explotaba ante esto.

—Interrumpo algo? —pregunté alzando una ceja. —Pensé que llegarías con tu noviecito, así que no te espere.—añadió el castaño. Me dio rabia que me hablara así, me levanté y me apoye sobre la mesa.

—Te ves tan lindo cuando me celas —me acerque a su cara, él estaba muy nervioso pero me miraba fijamente a los ojos. —Aja, aja —decía en tono sarcástico.

—Alguien con "noviecito" no haría esto —añadí.

Me acerque a los labios de Milo, lo besé, él quedó sorprendido y solo cerró los ojos y correspondió a mi beso, fue un largo y bonito beso, podía observar a Valery al fondo, me miraba con rabia. 

Termino el beso y Milo solo reía y me miraba, tome mis cosas y me levante, tome a Milo de la mano, le bese su mejilla.

Parecíamos novios pero no lo éramos,  lleve a Milo a la zona boscosa, era lindo estar allá, antes de eso me fije que Valery había llamado a James para mostrarle todo, me daba igual, Milo era lo que importaba. 

Nos sentamos en una banca, me recosté en el hombro de Milo, su cabello estaba mas alborotado de lo normal, nuestras manos estaban entrelazadas, escuchábamos el aire chocar con los árboles, las hojas caer, todo era perfecto. Todo esto fue interrumpido por algunas palabras de Milo.

Te quiero muchisimo Lya, mucho más allá de lo que piensas.

Me besó de nuevo.

( ... )

¡liz aquí!

Ahora se celan entre los dos jsdfkjafj, muy feliz y todo pero, la vida no es color de rosas:(

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