capítulo cuatro

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"Gala y accidentados"

"Gala y accidentados"

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-Date la vuelta. -pidió Camille para poder sacarse el vestido.

-Vale. -Lucas se giró sobre sí mismo.

Camille se quitó el vestido por encima de su cabeza, quedando en ropa interior. Lucas no pudo resistirse y por el reflejo del espejo, observó cómo Camille se quitaba el vestido. Ella estaba de espaldas así que no se enteró de aquello.

-Espero que tu método sea eficiente. -le tendió su vestido a Lucas y él rió.- No me da risa, es uno de mis vestidos favoritos. -Lucas aun con los ojos cerrados, le prestó su saco a Camille y ella se lo colocó encima de sus hombros.- Ya puedes abrir los ojos. -Lucas obedeció y abrió sus ojos, encontrándose con Camille frente a él con una sonrisa de lado.

-Te ves sexy así. -dijo Lucas encaminándose al lavamanos con el vestido en sus manos. En un descuido de Camille, llevó el atuendo a su nariz y respiró su dulce aroma.

-Y tú te ves sexy tan solo con la camisa. -Camille se mordió el labio sabiendo que él la observaba a través del reflejo del espejo.

Minutos después de un silencio incomodo entre aquellos dos, Lucas se dio la vuelta y le entregó el vestido limpio y seco.

-Wow. De verdad que me impresionas, Lucas. -en un descuido, el saco se resbaló de los hombros de Camille, dejándola semidesnuda a los ojos de Lucas.

A Camille se paralizó el corazón y se quedó mirando fijamente a Lucas a los ojos, sabía que si bajaba la mirada se sonrojaría y no quería que pasara tal cosa. Se mordió el labio desesperada, rezando internamente de que Lucas se agachara a recoger el saco.

La respiración de Lucas se cortó en el segundo que el saco cayó al suelo, tenía a una diosa al frente de él y se le había olvidado hasta como existir. Después de una batalla interna entre bajar la mirada o no, se agachó a recoger el saco y se lo tendió a Camille sin apartar la vista de su rostro.

-Gracias. -intentó sonar natural. Se volvió a colocar el vestido y se arregló pequeños detalles frente al espejo. Mientras se peinaba el cabello con sus dedos pensaba en que ese era el momento adecuado para tachar a Lucas de la lista, pero había algo que no se lo permitía.

-Voy a esperarte afuera. -avisó Lucas caminando hacia la puerta.

-¡Espera! -exclamó Camille dándose la vuelta y corriendo hacia Lucas antes de que tomara la perilla.- ¿Podrías subirme el cierre? Yo no alcanzo. -se dio la vuelta quedando de espaldas a Lucas y apartó su cabello para que pudiera subirlo.

-Vale.

Camille en lo que sintió la mano de Lucas en su hombro, suspiró no pudiendo esperar más. Con la otra mano, Lucas subió el cierre y se quedó unos segundos atrás, observando su descubierto cuello que seguidamente estaba cubierto por los besos de Lucas. Ella soltó un suspiro y echó la cabeza a un lado para darle más espacio a Lucas.

A mis pies / Real MadridDonde viven las historias. Descúbrelo ahora