Hoy es uno de los pocos días de vacaciones que me quedan antes de empezar la preparatoria. Voy a mi habitación y reviso la hoja donde tengo apuntado mi plan para dejar de ser la Koko no popular y volverme la Koko más popular del planeta:
1.Elegir una preparatoria en la que nadie de mi secundaria decida ir. ✓
2.Cambiarme el corte.
3.Usar ropa distinta.
4.Hablar.
El único punto que he cumplido es el primero, iré a la preparatoria menos deseada por mis compañeros de secundaria, lo que significa que nadie sabrá como era yo antes, y podré mostrar a una nueva y renovada Koko que será popular.
He decidido cumplir el punto número dos, tomé el dinero que tenía dentro de mi vasito de ahorros y decidí gastarlo en una buena estética, debo verme bella y no cargar mi cabello como estropajo.
—¿Koko a dónde vas? —pregunta mamá al verme en la puerta a punto de salir.
—Iré a cambiar de estilo, me cortaré el cabello.
—¿Eh? —dice mamá sorprendida con la boca totalmente abierta—. ¿Ahora que mosca te pico?
Si, mamá ha luchado por años con mi cabello de estropajo y jamás logró que yo me cambiara el corte, pero ahora de la nada yo sola he decidido cambiarlo, entiendo esa cara totalmente.
Mamá sonríe y brinca de felicidad en la sala de la casa.
—Espera un segundo —menciona con una enorme sonrisa en su cara y corre a su habitación dando brinquitos.
Luego dicen que la rara es una.
—Ten, usa este dinero para tu cabello y ahorra el tuyo —me entrega varios billetes y cuando los tomo vuelve a dar otro brinquito.
—Gracias ma, vuelvo.
Camino hacia afuera, tomo mi bicicleta, subo a ella y voy hacia una estética que he leído en internet es bastante buena. Al llegar a la entrada me doy cuenta que no encajo ahí: chicas bellas, cuerpos y caras de modelo.
Luego estoy yo: flaca, sin nalgas y pechos, pelo rojo en forma de estropajo, pecas por toda la cara, un short azul cielo y una blusa amarilla, hasta pareciera que estoy en pijama, ¿qué estoy haciendo aquí?
—Querida pasa —dice amablemente un chico con un acento que no logro reconocer—. Me llamo Paolo, ¿vienes a hacer un cambio de look? —pregunta tocando uno de mis rizos rojizos.
—Ah... ah... ah... ssssi.
¿Por qué estoy nerviosa? Recuerda el punto cuatro de la lista, hablar Koko, debes hablar, anímate, tú puedes.
Besaste a Chad, que más da si le hablas a un desconocido.
—Si, quiero cortarme el cabello, quiero lucir diferente.
¡Hablé! ¡Logré hablar!
Dentro de mi mente estoy bailando y brincando casi tan igual como mamá lo hizo hace rato. Fuera de mi mente frente a Paolo sólo cargo una pequeña y tímida sonrisa, pero oye, hablé, es un gran avance.
—Perfecto, ¿qué corte deseas querida?
Por Zeus, todo este tiempo pensé en un cambio, pero jamás pensé cuál sería ese cambio, ¿ahora que le digo?
No sé me ocurre nada y él chico me mira con un poco de desesperación, ¿qué le digo? Rayos, rayos, rayos.
—Corto, hasta lo hombros —respondo al fin, seguido de eso suelto un enorme suspiro.
—¿Quieres flequillo?
Cuantas preguntas, ¡sólo córtame el maldito cabello!
—Si...
Nunca debí decir si, nunca debí desesperarme y responder al azar el corte que quería. Nunca, nunca, nunca.
En estos momentos me encuentro frente al espejo de la estética luego de que Paolo me cortará el cabello corto y me haya puesto un flequillo, ahora... ¡Parezco a Dora la exploradora! Dora la exploradora con cabello rizado y rojizo.
Koko, aunque no quieras siempre sales con un desastre.
Mi corte de Dora la exploradora y yo nos dirigimos a una boutique del centro de la ciudad. He decidido que con el dinero que me ahorre iré a cumplir el punto número tres de mi lista, la cual cada vez se completa, aunque no exactamente como quisiera que fuera:
1.Elegir una preparatoria en la que nadie de mi secundaria decida ir. ✓
2.Cambiarme el corte. (no es el corte que quería, pero ya qué) ✓
3.Usar ropa distinta.
4.Hablar.
En cada reflejo de las ventanas de las tiendas veo a Koko en bicicleta con un nuevo y extraño corte que para nada luce bien en mí. Pensé seriamente en recoger el cabello cortado y pegármelo con pegamento, pero no creo que funcioné, así que tristemente me fui a mi bicicleta y aquí ando conduciendo hacia la boutique.
Al llegar dejo mi bicicleta en la entrada y paso, me dirijo a los primeros colgadores de ropa a observar, para ver cual me agrada más.
—Hola, ¿necesitas ayuda?
No, ahora no por favor.
Odio con todo mi ser a las personas que me quieren ayudar a comprar la ropa, sé que es su trabajo, pero a mi realmente me incomoda que me vean elegir mi ropa.
—No, estoy bien por ahora, gracias —digo amablemente.
—Está bien, por cualquier cosa estaré cerca —la chica sonríe y se aleja.
Pero no tan lejos, la siento, me está observando y no puedo ver la ropa cómodamente por esa razón.
Trato de alcanzar una blusa que está a una altura inalcanzable para mí, cuando de pronto ella aparece a mi lado.
—Puedo ayudarte sabes.
—No, no, no, no —empiezo a negar con las manos y cabeza, nerviosa—. Estoy bien.
La chica hace un pequeño puchero.
—Correcto, me voy, pero ya sabe aquí estoy cerca para ayudar.
Pensar en la chica esperando el momento indicado para volverme a ayudar me incomodo totalmente, así que salí de la tienda a toda velocidad y tomé mi bicicleta para agarrar camino a casa.
Cuando iba por unos locales me encontré de frente con una chica tan idéntica a mí, ella al igual que yo se encontraba en bicicleta, pero por alguna extraña razón ninguna de las dos se movió de carril haciendo que ambas chocáramos y cayéramos de nuestras bicicletas.
—¡Auch! —grito tocándome mi codo que me raspe al caer—. ¿Te encuentras bien?
Y la chica no está, esto es imposible, no pudo pararse e irse tan rápido, acabamos de caernos...
Entonces me doy cuenta, no choqué contra nadie, choqué contra mi misma, hay una gran ventana frente a mí y a la chica que miraba no era otra más que yo, ¿cómo no pude darme cuenta de eso antes? con vergüenza y la poca dignidad que me quedaba me pongo de pie, recojo la bicicleta y conduzco hacia mi casa portando un corte de Dora la exploradora.
Koko tiene mala suerte hasta haciéndose un cambio de look XD
Espero sea de su agrado el capítulo, me tarde en subirlo andaba ocupada haciendo algunas cosillas, pero aquí está, espero lo disfruten. Déjenme sus bellos comentarios y ¡nos volvemos a leer el sábado!❤
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Koko
HumorKoko es la típica chica popular que todos los chicos desean y todas las chicas envidian, es bella, carismática, y cuenta con muchos amigos. Koko despertó... En realidad, todo lo anterior fue una de las miles de imaginaciones de Koko, ella no es popu...