💛Capítulo 58💛

970 83 25
                                    

¡Perdón! Se que no he actualizado. Pero la verdad estoy muy enferma💔
Mocos, angina y fiebre
Disculpen si es muy corto.
Cuando vuelva a la normalidad seguiré publicando como antes.

Cuando vuelva a la normalidad seguiré publicando como antes

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

-¿Hide?-Preguntó un peli blanco asomandose por el pasillo.

Había visto a su peli naranja ir al baño. Pero eso fue hace como media hora.
Lo había dejado solo con su madre y su tía, quienes no paraban de cargosear al pequeño Hideki.

Sigilosamente se encaminó a la puerta del baño, la cual se encontraba a dos puertas de distancia.

No alcanzó ni a tomar el pomo de la puerta, que una mano lo atrajo a la puerta de al lado.

-¡H-Hide!¡No me asustes!-El pobre casi se muere de un infarto.

El peli naranja solto una pequeña risa acariciando la mejilla roja del contrario.

-Lo siento cariño, pero mira-dijo felizmente encendiendo la luz.

En aquélla habitación se podía admirar una variedad infinita de juguetes, algunos en las estanterías de roble y otras en sacos enormes.

En pocas palabras

El paraíso de todo niño.

-¡Wao!-Chilló Kaneki observando todo a su alrededor.

Algunos de esos juguetes se les hacía muy familiar
Era de esperarse que la mitad de los juguetes fueran de Hide y Kaneki.

Desde pequeños sonajeros de Hide, hasta a camiones de plástico de Kaneki.

-Siempre anhelaba poder entrar aquí- Dijo Hide observando- al fin lo logré.

-Si la tía nos encuentra aquí,  probablemente se molestará-Habló Kaneki tanteando con su dedo un peluche.

Hide sonrió nerviosamente al imaginarse lo que podría ocurrir. No era para nada lindo.
Iba a expresar su "valentía" con unas palabras, pero no pudo hacerlo.

Kaneki se abalanzó contra él haciéndolo caer.

-¡Ese payaso da miedo!-Chilló atemorizado pegándose al cuerpo de su prometido.

"Cierto, le asustaban los payasos" pensó Hide sosteniendo a su enamorado.

Por primera vez pensó que él no era el único que se comportaba como un niño.

Kaneki quería salir de allí lo antes posible antes de que soltara un grito que hasta el mismo Hideki escucharía.

Hide abrió la puerta riéndose mientras cargaba a un Kaneki miedoso.

Pero tuvo que cerrarla inmediatamente al oír los pasos de su tía.

Hide se quedó estático y Kaneki se aferraba a su camisa nervioso.

Detrás de la puerta, su tía se dedicaba a buscar a sus dos sobrinos para poder regresarles a su pequeño bebé. Que por cierto empezaba a molestarse por no tener alimento.

Kaneki estaba por salir, pero Hide lo retuvo un poco más.

Si salían en ese preciso momento, cavarían su propia tumba.

Abajo, Zay vagaba por los pasillos jugando con el perrito de la tía

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Abajo, Zay vagaba por los pasillos jugando con el perrito de la tía. Que al parecer era muy juguetón.

Brincaba, corría y montones de cosas más por los pasillos.

Pero al llegar al piso de arriba. Escuchaba pequeños murmullos y gimoteos en una de las puertas cercanas.

Dentro de esos murmullos, pudo reconocer la voz de Hide.

-¡Papá Hide!-Lo llamó tratando de abrir la puerta.

El peli naranja, al escuchar a la pequeña, reaccionó instantáneamente forcejeando la puerta.

-¡Z-Zay!¡en un momento salimos!-Comentó nerviosamente el peli blanco, subiendose los pantalones.

Si la niña abría la puerta, estarían más que muertos.

-¡Okay!-Gritó la niña correteando hacía abajo.

-¡T-Te dije que no era buena idea!-Le reprochó Kaneki ordenando su ropa.

Hide solo solto una risa mientras se abrochaba sus pantalones.

-Tampoco te hiciste rogar mucho pequeño~-Murmuró en su oído mientras abría la puerta.

Dejando de lado a su peli blanco sonrojado como un tomate, comenzó a bajar las escaleras con un aire de grandeza.

Kaneki al cerrar la puerta, tomo carrera para lanzarse en Hide por las escaleras.
Ocasionando que ambos rodaran por ella a carcajadas.

-¡Idiota!-Se burló Hide con la cabeza pegada a la pared y sus piernas levantadas.

Mientras que Kaneki reía encima de su estomago con la mejilla izquierda pegada al helado piso.

La pareja no tardo en ser vistos por las tres mujeres y su pequeño bebé.

Las dos mayores de golpearon la frente al mismo tiempo. Mientras que Zay se aguantaba las ganas de llorar de la risa.

-Hideki...¿Esos son tus padres?-Comentó su tía viendolos levantarse.

El peli blanco y Hide sonrieron apenados mientras se acercaban a ellas.
Kaneki tomó en brazos al pequeño Hideki, y se dispuso a alimentarlo en el sillón.

-¿Que eran los ruidos de hace rato? -Preguntó su madre con una ceja en alto.

Zay se integró, aclarando que los había escuchado en un cuarto hablando. Pero su inocencia era mucha como para decir que había escuchado gemidos.

Los causantes de dichos gemidos, se miraron palidecidos antes de dirigir su mirada a su tía.

Los miraba severamente con un aura de maldad.

-Si han dejado "rastros" de algo... Se los haré limpiar con la lengua-Dijo severamente mirándoles.

-Kaneki es el uke, que lo haga él-dijo señalandolo.

-¡Oye!-Le aventó un cojín fuertemente.

-¡Oye!-Le aventó un cojín fuertemente

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.



"Because I love him" (Hide x Kaneki)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora