Narra Pablo.
Ayer me marché de aquella habitación que me estaba quitando el aire y la calma. No puedo creer que él nos haya arrebatado nuestro tesoro más preciado, la creación más pura y verdadera, esa que era fruto de nuestro amor.
Ella está aún más rota que yo pero, no supo cuidarlo y por eso ya no estará jamás con nosotros.
Hoy, un día después, estoy aquí.
Pablo: Lo siento, ya veo que interrumpo -digo cuando entro en la habitación-
La veo a ella junto a otro médico, que no es el que la atendió ayer y es más o menos de nuestra edad, muy juntos y sonriéndose.
Ari: No, Pablo, no interrumpes nada.
Doctor: Yo ya me iba. Sólo vine a ver como estaba la paciente.
Los celos me consumen, no aguanto ver como este doctor la mira.
Él sale y yo ni siquiera le digo adiós.
Pablo: Ya veo que te lo pasas bien sin mí -sus ojos se abren de par en par-
Ari: ¡¿Perdona?! -exclama alterada- No tienes ningún derecho a reclamarme nada cuando acabamos de perder a nuestro hijo y tú no solo has estado un día entero sin que nadie sepa donde estabas, sino que vuelves y lo único que te preocupa es que yo le sonría a la única persona que ahora mismo se está preocupando por mí. ¿Tú sabes como ha sido para mí perder a este bebé? Te voy a dar la respuesta: No, ¿y por qué? Porque tú no has estado aquí, a mi lado para saberlo -me dice llorando-
Me acerco a ella.
Pablo: Lo perdimos porque tú no supiste cuidarlo. ¿Sabes? Tú nunca quisiste a ese bebé y tampoco lo quieres ahora.
Ari: ¡Vete de aquí ya! ¡Te odio! -me grita llorando-
Maldigo a mi boca por no saber callarse. Pero, siento rabia por la situación... Yo también acabo de perder a mi hijo, y ella debería haberlo protegido.
Pablo: Sí, será mejor que me vaya porque no creo que sea conveniente discutir ahora y menos aquí.
[...]
Narra Ari.
Lo veo salir y yo aún sigo llorando. No me puedo creer que él, el hombre al que amo, con el que me voy a casar, me haya hecho esto.
No me merezco algo así y, mucho menos, después de haber perdido a mi bebé.
Ha estado un día entero fuera, no sabía dónde estaba y he estado sola. Y por si fuera poco, aparece y lo único que me echa en cara es que me lleve bien con el médico que me está ayudando y que me culpe de que no he sabido proteger a nuestro hijo.
Puedo jurar que hice todo lo posible para protegerlo y ese animal me lo arrebató.
Doctor: Disculpa -dice al verme llorar cuando entra en la habitación- Si quiere puedo venir más tarde.
Limpio mis lágrimas rápidamente.
Ari: Está todo bien -saco una sonrisa de donde puedo- ¿Por qué venía?
Doctor: Los resultados de los exámenes que le han hecho han salido bien, no hay hemorragias ni lesiones internas, salvo... -le interrumpo-
Ari: La pérdida de mi bebé -él asiente-
Doctor: Así que con todos los exámenes hechos... En un par de días podrá irse.
Ari: Perfecto -él se va pero, le paro- Y, por favor, no me hable más de usted que me hace sentir mayor. Además, es el único hombre que se preocupa por mí... -digo con tristeza por lo que acaba de pasar con Pablo-
Doctor: Lo mismo digo, puedes llamarme Ángel.
Ari: Un gusto, soy Ari.
Doctor: En unos minutos vendrá la psicóloga, te vendrá bien hablar de lo sucedido -me sonríe-
Ari: Gracias -sonríe y se marcha-
Me vuelvo a quedar sola en esta habitación que me quita el aire.
Pablo no tenía razón, yo siempre quise a ese bebé. Aunque él crea lo contrario, no había nada que me hiciera más ilusión en el mundo que tener un hijo con él.
Miro mi dedo anular y veo el anillo de compromiso. Los recuerdos de como y cuando me lo pidió vienen a mí como una tormenta de recuerdos que ahora mismo no quiero tener pero, es imposible detenerla.
Lo que me acaba de pasar me lo hubiera esperado de mil hombres pero, no de él, no de mi Pablo, el hombre del que me enamoré en Los Ángeles.
Al fin y al cabo yo tenía razón, no estoy hecha para estar con nadie a mi lado porque al final todos hacen lo mismo... Salir corriendo.
Y yo... Yo ya no estoy dispuesta a volver a sufrir por amor, no después de haber conocido el amor más puro y haberlo perdido... El de mi hijo.
Nota de autor.
¡Familiaaaaa!
Sé que este capítulo es más corto de lo habitual pero, es porque en nada dubo el siguiente y con ese se cerrará la temporada y habrá una tercera y última.
Gracias por estar siempre 💝
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Vuelvo A Verte.
FanfictionÉl la quería y la quiere más que a su vida, y eso le lleva a renunciar lo que más ama, a ella. Ella se marchó de su lado por un engaño, fue por su bien. El dolor la cegó impidiéndola ver más allá de esa traición. Quien sabe si algún día podrá ver má...