Capítulo 24.

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Narra Pablo.

Despierto una mañana más con su cuerpo enredado al mío. Ha pasado una semana desde que le conté toda la verdad y todo volvió a la normalidad.

Aún no me puedo creer que volvamos a estar como antes, la necesitaba tanto... Por un momento pensé que la había perdido para siempre y no podía si quiera soportar esa idea, me mataba por dentro.

Su cuerpo desnudo moviéndose en la cama, hace que salga de mis pensamientos.

Ari: Buenos días, mi amor -va dejando besos por mi pecho desnudo, hasta llegar a mi boca-

Pablo: Buenos días a la mujer más bella -sonríe- ¿Cómo has dormido hoy?

Ari: Hacía meses que no dormía así.

Pablo: A mi también me pasaba lo mismo -ambos reímos- Mi amor... -le digo más serio- Tengo que decirte algo -se incorpora para mirarme-

Ari: Amor... Dime que no es nada grave, por favor. No aguantaría algo como lo de la semana pasada -dice abatida-

Pablo: No, cariño. No es nada de eso, puedes estar tranquila -cojo su cara entre mis manos y la beso- Estaré siempre a tu lado, te quiero.

Ari: Y yo al tuyo, te quiero -vuelve a besarme- ¿Entonces?

Pablo: Verás... En menos de un mes comienzo el Tour Terral y empieza en Latinoamérica.

Su gesto cambia radicalmente, está triste.

Ari: Me alegro mucho, mi amor -me besa- Una gira así es un sueño para ti.

Me oculta su estado de ánimo para que yo pueda seguir adelante. La amo.

Pablo: Sí, sí que lo es -sonrío-

Ella me sonríe, pero sus ojos están vidriosos y sé que está a punto de llorar.

Pablo: Pero te digo todo esto porque quiero que vengas conmigo. Te necesito a mi lado y quiero cumplir este sueño teniendo a la mujer que amo al lado.

Su cara cambia totalmente, ahora tiene una sonrisa enorme y brillo en sus ojos.

Pablo: ¿Qué me dices, cariño?

Ari: No lo sé, Pablo... Es todo tan rápido... No quiero ser un problema para ti, ni para tu equipo, y mucho menos hacer que se enfaden contigo porque yo estoy allí.

Mi amor... Siempre pensando en mí, en mi trabajo, en mi felicidad... Lo que no se da cuenta es que ella es mi felicidad y nada me haría más feliz que tenerla allí a mi lado, cumpliendo sueños juntos.

Pablo: Por una vez, pensemos en nosotros -sonríe- No vas a ser un problema para el equipo, ni se van a enfadar conmigo por eso. Además, hablé con Esperanza y está todo bien. ¿Qué me dices? ¿Aceptas? -sonrío y cojo sus manos-

Me mira dudosa, pero finalmente sonríe.

Ari: ¡Acepto! -dice feliz y se abalanza sobre mí para besarme-

Vuelvo A Verte.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora