Día 02

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Yuu-chan faltó hoy.

Iré a su casa para pasarle los apuntes y también le daré un beso en la frente.

-- No se permiten teñidos, teñido --.

-- Yo le diré éso en mi boda con su hijo "No se aceptan viejos"--.

No esperaba que el padre de mi niño adorado estuviese en casa, Shinya estaba en la habitación de Yuu, dándole una sopita.

-- ¡Mi Yuu! Vine para ver cómo estás, tu feo padre no me deja entrar --grité conociendo que mi voz iba a llegar hasta su habitación--.

-- ¡Guren! --se escucharon dos voces fuertes al mismo tiempo junto a unos pizotones; de mi Príncipe, obviamente--.

-- ¡Mi ángel! --grité dramáticamente arrojandome a los brazos de Yuu, quien se tambaleo un poco pero me abrazó--.

-- Gracias por venir Mika, también por la tarea... --sonrió viendo los cuadernos que traía en los brazos-- Guren, Shinya dijo que quiere hablar seriamente contigo cuando no esté en casa --sentí sus dedos enterrarse en mi cabellera y darme unos masajitos--.

-- No hablaré con ése tarado. Estoy protegiendo a mi hijo, Shinya sólo quiere a Mika porque sabe que te quedarás sólo si no lo aceptas --.

Inmediatamente Shinya apareció, dispuesto a tirarle la lámpara de escritorio de Yuu en la cara.

-- Cielo, ve a tu habitación. Papá y yo tenemos unas cositas que hablar, sirvete galletas Mika.

Yuu tomó mi mano y me hizo subir las escaleras. ¿Él está bien?

-- ¿Por qué faltaste Yuu-chan? --.

-- En la mañana tuve náuseas y dolores fuertes en el estómago. Guren dijo que me quedé y Shinya me cuidó mientras él trabajaba--.

-- Dejaron una investigación y me anoté contigo... ¿No te molesta, verdad? --.

Vi en sus preciosos ojos una expresión de molestia.

-- No quiero hacer un trabajo contigo, siempre hago todo contigo Mika -- dijo abriendo la puerta de su habitación, mirándome severamente--.

-- Lo sé, pero como se te da tan mal Historia pensé qué podía ayudarte en éso --.

-- ¿Me subestimas? --alzó una ceja con una expresión seria--.

-- No, sólo... --suspire un poco irritado por la actitud arisca de Yuu-- lamento haberme metido en el grupo contigo sin preguntar, solo... Quería ayudar a Yuu-chan.

Sólo vi como Yuu se acurrucaba entre las sábanas, haciendo un pequeño puchero, viéndose lindo. Estaba enojado, pero su carita roja por el resfriado sólo le hacía verse adorable.

-- Perdón, esta vez iremos a tu ritmo ¿está bien? Elegiremos los puntos que quieras y tú vas a decorar el archivo de word--.

-- Mika, sabes que no sé poner imágenes en word... Tampoco hacerle marcos a las páginas --Yuu murmura mirándome, cerrando un poco los ojos cuando dirigí una mano a acariciar su cabello desordenado. Bastante suave--.

-- Lo siento... Pero podemos hacerlo juntos ¿Te parece? -hice una sonrisa suave, él asintió y poco después se quedó dormido, sé que aún está un poco enojado conmigo-.

Bajé las escaleras con cuidado de no hacer mucho ruido, allí estaba Shinya mirándome sonriente.

-- Mika-Kun, ¿Tan pronto te vas? --Inmediatamente Shinya me dio el encuentro con una bandeja con dos tazas de té--.

-- Yuu-chan acaba de dormirse, está un poco enojado --sonreí un poco--.

Shinya dejó la bandeja en un estante cercano y me abrazó, dando unos cariñitos en mi cabellera.

-- Yuu tiene todo el carácter de su padre, y yo que ahora estoy casado con él te puedo decir que no tienes la culpa... Yuu ha estado extraño estos días --se explicó y yo asentí--.

-- Muchas gracias, Shinya-San --suspiré y tomé mi maleta para irme--.

-- Espera Mika... ¿Tú le has dicho algo a Yuu? se pone muy extraño cuando Guren dice cualquier cosa que tenga que ver contigo --.

-- ¿En qué sentido "Extraño"? --.

-- Niega todo o se queda en silencio... eso no es común en Yuu. Sólo te digo, Mikaela, Yuu no es como un chico normal. Ya sabes, es más complicado que otros. --.

-- Sí, Shinya-San, yo sé éso de Yuu-chan, he estado con él por mucho tiempo... es una de las cosas que me enamoran de él --sonreí recordando su hermoso rostro y lo tierno que se veía con cambios de humor repentinos--.

¡DIOS, LE DIJE A SHINYA QUE ESTOY ENAMORADO DE SU HIJO!

Escuché una risita suya. -- Eso Guren y yo ya lo sabemos, eres un poco obvio, sólo ve despacio con Yuu, puedes asustarlo --.

Asentí y me despedí con una reverencia. Lastimosamente afuera estaba lloviendo, por lo que cuando llegué a casa mamá me gritó, y tenía razón, estaba empapado y temblando.

Sin embargo se preocupó también y me mandó a bañarme mientras ella buscaba ropa muy abrigadora.

Yuu me trató de llamar pero ésa noche no toqué mi teléfono y desperté muy enfermo, mamá mencionó algo de que Yuu quería visitarme para traerme unos apuntes, pero Guren dijo que se enfermaria si esta conmigo.

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Perdonen lo corto del capítulo, pero siento que a veces los días pueden ser así; a veces hay mucho que contar y a veces no :s.

Además los capítulos están así de raros porque quiero crear un ambiente enorme, Yuu está todo menso pero es entendible; su mejor amigo se le declaró hace menos de 1 semana, obvio va a pensar en éso quiera o no.

Gracias por Leer ^^

-Mei-chan-

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100 días para enamorarte [EN EDICIÓN] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora