Torpe

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Mira el número de su asiento y frunce el ceño, le habían dado el asiento del medio, el lugar que menos le gustaba, hizo un puchero y se acomodó molesto consigo mismo por no haberse fijado en donde lo acomodaban, pasaron parios minutos y parecía que el asiento de ventana no hubiera sido vendido, complacido escuchó la última llamada y al ver que nadie más subía se acomodó en el otro asiento. Se puso el cinturón de seguridad y recostó la cabeza mirando hacia la ventana, aún no podía creer lo que había hecho, estaba de viaje a una ciudad que no conocía completamente solo, sería una verdadera aventura.

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Odiaba las despedidas, la gente se ponía empalagosa y nunca sabía cómo reaccionar para liberarse de la gente – ya, Siwon Hyung – frunce el ceño molesto – solo me iré de viaje unos días, no me voy a morir, eres un exagerado, no debí decirte nada

Eres como un hermano menor para mí, es normal que me preocupe – lo abraza por enésima vez – prométeme que te vas a cuidar y que hablarás conmigo mínimo dos veces al día

- sí, si – gruñe cuando escucha la llamada – carajo, se me va el avión – toma su maleta y pisa el pie de su amigo – si pierdo el vuelo, prometo que te asesinare, caballo meloso – evade el ultimo abrazo y sale corriendo para alcanzar su vuelo. Logra llegar un segundo antes de que cerrarán el avión y se dirige hacia su asiento, cuando logra ubicarse ve a un chico en su lugar, trató de llamar su atención de forma educada pero el otro no parecía escuchar, molesto toca su hombro y lo sacude un poco – oye, estas en mi sitio

Intentó distraerse mirando hacia afuera, pero ahora que todo estaba en silencio y calmado los recuerdos de su discusión con Kangin volvieron con fuerza, sin soportarlo más y tratando de que nadie lo vea, se dejó llorar. Sentía que cada día que pasaba su relación fracasaba un poco más, extrañaba a Kangin, necesitaba reconciliarse con él, saca su teléfono y cuando estaba por marcar es fuertemente sacudido, mira a la persona pero por las lágrimas solo logra ver una de forma borrosa a un chico alto y asustado se encoge en su asiento – lo lo siento, no te escuché

Mira al chico vestido de rosa encogerse en su asiento y frunce el ceño – no te voy a pegar, solo quería decirte que estas en mi asiento – le muestra su pasaje – lo reserve hace días

Abre los ojos avergonzado y se levanta de un salto – lo siento mucho, creí que el siento estaba libre – se frota los ojos, sale al pasillo para darle pasada y regresar a su sitio –

Se acomoda y observa al otro chico – tranquilo, en serio no te voy a pegar, ya puedes sentarte – observa que el otro intenta disculparse y alza la mano – no te disculpes otra vez, solo fue un error, no es como si hubieras pecado

Lo sien... bueno, ya sabes – se sienta a su lado sintiendo la atmosfera incómoda, suspira agotado, parecía que no era capaz de hacer las cosas bien, siempre terminaba metiendo la pata, incluso con los desconocidos, no entendía como alguien tan perfecto como Kangin estaba con un torpe como él –

Otra vez no...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora